Espectro•Katsudeku

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Desde que era un niño siempre solía jugar con sus vecinos, entre ellos Deku, al cuál siempre dejaba de lado. Era un niño sin Quirk, débil y que no portaba ninguna gracia en particular.

Vivió lleno de halagos por portar un poder extraordinario, cosa que le desencadenó a que tuviese un complejo de superioridad.
Su adolescencia fue igual, todos lo amaban o tenían miedo. Era respetado y temido, dios, adoraba eso.

Pero siempre estaba Deku que a sus palabras "lo desafiaba" de alguna manera no le gustaba que este pensará en la idea de ir a la U.E por más que lo golpeé o amenaze este no se rendía.

"Si de verdad quieres convertirte en héroe, hay una forma rápida ¡Cree que nacerás con una individualidad en tu próxima vida y prueba suerte saltando desde el techo" Mencionaba cínico, mientras destruía aquel libro con su quirk arrojandolo desde el balcón.

Pudo observar la expresión de enojó en el pecoso. Él no lo veía como algo malo, le gustaba bromear y más si involucraba a Deku.

Lunes xxx-El día-xxx

Secundaria Orudera

Era otro lunes y su rutina era la misma.
Despertar, escuela, presumir y dejar a todo como los extras que eran, sí lo mismo de siempre.

Llegó a su escuela secundaria, el clima era una mierda, tuvo que agarrar una bufanda horrenda para soportar el frío. Ya entrando al aula se sentó en su pupitre, esperó a que los demás llegasen para que por fin empezarán las jodidas clases, esperaba el día para ingresar a la U.A y no verle más la caras de idiotas de sus compañeros.

"Midoriya?"

Un silencio se formó en el aula, no se dio cuenta que el tiempo paso rápido, que ya su profesor tomaba la asistencia.

"Creo que faltó profesor" dijo una chica peliroja que sentaba al lado derecho del pecoso.

"Bien, continuo Tanaka?"

"¡Presente!"

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El día transcurrió normal, salió de la escuela con sus dos lacayos al arcade, hasta que llegó el momento de regresar a su hogar, sin duda la vieja lo mataría por volver tarde.

"Mierda, 11pm" Maldijo en diferentes idiomas, estaba jodido.

La ciudad estaba a oscuras y el cielo amenazaba con llover. Si contaba con suerte seguro y evitaría la llovizna, en medio de su caminata se detuvo a observar a un montón de personas acumuladas abajo de un gran edificio.

"¿Qué fue lo que pasó?" Mencionaba un hombre de mediana edad.

"No lo sé, dios mío pobre muchacho"
Comentaba aterrorizada una mujer, mientras llamaba desde su celular a las emergencias. "Por favor solicitó una ambulancia encontramos a un joven en medio de la calle desangrado, por favor, dense prisa!".

No le tomó importancia, seguro y habían encontrado tremendo cadáver muerto. Eso solo lo motivo a aumentar su paso, detestaba el olor a muerto y más los bullicios de gente, era molestó.

...

Abrió con sus llaves la puerta de
su casa, trató de guardar silenció y se escabulló a su habitación. Se quitó el uniforme y se hecho en su cama a revisar su celular, no fue hasta que su puerta fue abierta abruptamente, mierda.

"¡Katsuki! ¿¡Qué horas son estás de llegar!? mocoso malnacido, ojalá y sea por pasar tiempo con Izuku"

Se acercaba a su hijo mientras él otro fruncía más su entrecejo.

"Yo puedo regresar cuando se me de la jodida gana! Además y para tú información no estaba con Deku"

"¿Cómo? Izuku no estaba contigo?"

Su expresión cambió a un semblante más preocupado.

"No, mierda dejame en paz"

"Izuku estuvo hoy en clases?" dijo mirándolo y sosteniéndolo de los
hombros "Responde!"

"No, ahora vete de mi habitación!"

Vio como su madre salía rápidamente de ahí, no entendía nada y no le interesaba saberlo.

"Inko, por favor contesta" Miraba su celular que marcaba llamada desviada.

Pasaron dos horas, exactamente las dos de la madrugada y su amiga seguía sin contestarle.

Sintió una mano en su hombro, se tensó por el toque, pero observó que solo era su esposo.

"¿Te sientes bien Mitsuki?" Se sentó al lado de su esposa mientras que esta buscaba más apego.

"Estoy preocupada Mastsaru, Inko me llamó para avisarme que Izuku no llegó a dormir" Miró de nuevo su telefono" Ella estaba, yo pensé que talvez estaría con Katsuki, pero él me dijo que ni siquiera asistió  hoy a clases.

"Eso es grave, me parece muy raro viniendo de Midoriya, talvez pasó la noche en la casa de algún amigo"

"Sí, tal vez si tengas razó-"
No llegó a completar su frase debido a que recibió una llamada, fijo su vista y vió que era su amiga.

"Hola Inko, hay noticias de Izuku?" Menciono suave e intrigada, para ella Izuku era un pan de Dios incluso también le huebiese gustado que fuera su propio
hijo  "Inko ¿Qué sucede?"

Oyó sollozos a través de la otra línea, eso no le dió una buena señal.

"M-mitsuki-san él..."escuchó el leve llanto ahogado "Izuku fue encontrado desangrado en una vía publica, estoy en el hospital, no tengo más noticias nadie me dice nada, ¿Por qué pasá esto? ¿Por qué a mí hijo? no lo entiendo"

La rubia quedó sin palabras, tensada agarró fuerte la mano de su marido y dijo

"Esperanos Inko, vamos para allá"

Juraría que le costó mantenerse firme, la posible perdida de un hijo seria muy duro para cualquier madre. Miró a su esposo y este salió en busca de las llaves del auto.

Camino en dirección a su cuarto dispuesta a sacar su bolso, fijó su vista en el cuarto de su hijo. Dudaba si contarle o no, no sabía si afectaría a Katsuki saber el estado del pecoso.

"Hey, Mocoso" entró a la habitación y prendió la luz "Estás despierto?" Al no recibir respuesta decidió ser directa "Bien, mira Izuku esta gravemente herido en el hospital y me parecería bien que tú vallas
conmigo" Estaba apunto de cerrar la puerta pero se asustó al ver a su hijo levantarse rápidamente de su cama.

"¿Qué deku está qué?"

...