CAPÍTULO CUATRO

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Querido Lucca,

Puedo imaginar la emoción que se vive en Hogwarts con el Torneo de los Tres Magos, pero esa no es excusa para no escribirme. Tenemos un acuerdo: una carta por semana para no alertar a los Sanadores. El profesor Flitwick en su última carta me contó que estás mejorando en tus habilidades de lectura y tareas. Madam Pomfrey mencionó que tu salud está bastante bien, sin muchos problemas. Me alegro de que las cosas estén mejorando para ti, mi amor.

Independientemente de la situación, cuando leo en las estrellas me sale que un buen camino se avecina para ti. Tu Venus está brillando y Júpiter está dando buenas señales. Tu tía Fiona me escribió a principios de esta semana, cree que hay alguien especial dando vueltas. También dijo que Abuelita Nora está segura de que ya es el momento adecuado hablar sobre nuestra familia.

¡Disfruta de la fiesta y haz amigos!

Con amor,

Mami.




Lucca dobla la carta y la mete en el bolsillo. Excelente. Su madre seguramente sospecha que algo está pasando.

Milan apunta con su barbilla, curiosa, preguntando en silencio qué le pasa.

— Yo podría preguntarte lo mismo — Lucca dice —. ¿Mala noche de sueño? Cho dijo que no te fuiste a dormir.

Milan entrecierra los ojos, sin saber qué responder —. Tuve que patrullar, Jason me pidió que lo cubriera ya que no se sentía muy bien.

Lucca ha notado que Milan anda preocupada por otra cosa y sabe que ella no le dirá nada, así que se encoge de hombros y permanece en silencio. Sabe que puede confiar en el Milan pero ya tiene a sus amigos preocupados por todo el problema de la visión. Milan tiene que lidiar con su propia vida. Y si él le dice que ve cosas... Su hermana no tardará en delatarlo con su madre, quien ya parece sospechar que algo raro ocurre.

— ¿Alguna vez has tenido la necesidad de decirle a alguien algo muy, muy importante pero tienes miedo de su reacción?

Milan comienza a toser, sorprendida por la pregunta. Lucca la mira extrañado. Le pasa un vaso de agua y espera su respuesta.

—No.  ¿A qué viene esa pregunta?

— Nada. Un pensamiento que se me cruzó por la mente — dice Lucca, como si Milan no se hubiera ahogado minutos antes —. Y si estuvieras en esa situación... ¿Qué harías?

— Depende. ¿De qué se trata el secreto?

— Está relacionado con que cierta persona se encuentre en grave peligro...

Milan parpadea, luego le da una mirada rápida a su alrededor. Está actuando raro, algo poco habitual en ella.

— Si esa persona está en grave peligro, como tú dices, entonces yo diría la verdad.

— ¿Incluso si te hace ver como una loca? — él pregunta. Milan asiente, dudosa —. ¿Segura?

— Es lo correcto, Lucca — dice ella, jugando con sus manos —. ¿De quién estamos hablando? ¿Escuchaste algo? ¿Viste algo?

— No sé. Tú dime — responde Lucca, sintiendo que no están hablando de la misma persona —. ¿De quién estamos hablando, Milan? ¿Sabes algo que yo debería saber?

Ambos entrecierran los ojos, mirándose el uno al otro con seriedad. Lucca está seguro de que si su hermana tuviese información crucial sobre lo que sea que esté pasando, ella lo diría. Milan no es de esconder secretos y además es una terrible mentirosa.

CONFUNDUS; harry potter (ESPAÑOL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora