Hiryu Rin Shots!!

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I know that you love me

Advertencia; fem! Reader, Fluff, soft, relación heterosexual.

Track one ♡
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Me pones nerviosa, me trabo al hablar.

Nadie se da cuenta por si mismo que se ha enamorado, tan solo pasa. En un segundo tu mundo se puso de cabeza y no puedes hacer nada para evitarlo, cuando menos lo esperas tu corazón ya ha caído en los encantos de alguien más.

La chica alegre de la clase 1-A podía negarlo, puede evadir las preguntas tanto como quisiera, pero ella sabe más que nadie que ha sido flechada.

Centrarse en su propósito como héroe fue lo ideal, quien diría que bastaría con ir al campamento de su escuela para enamorarse. Ni más ni menos que de alguien de la clase opuesta, la clase 1-B era conocida por tener a varios alumnos destacados y algunos otros problemáticos. Como la suya, vaya. Algunos otros pasaban desapercibidos, las razones varían entre lo poco exótico de sus habilidades o por sus personalidades tranquilas. Algo superficial.

Pero entonces lo vio, de pie y con una mirada perezosa y ahí supo que estaba rendida. Su largo cabello negro atado a una trenza, sus ojos rasgados y oscuros le enviaban escalofríos con solo verlos. Sus hombros anchos y fuertes enmarcando su cintura. Se sentía cálida incluso si era un día helado.

Eres tan lindo que duele.

Estaba en sus entrenamientos rutinarios con sus compañeros cuando de pronto la clase opuesta se integró a ellos, no le prestó demasiada atención hasta que vió a un muchacho de pie, viéndola entrenar como si la juzgara. Su mirada no transmitía nada y eso le enviaba escalofríos, no sabía como interpretar aquello. ¿Estaba emocionada o asustada? Podía ver al chico balanceándose, decidiendo entre sí mirarla más o irse a otro lado. Una sonrisa ladina se plantó en su rostro y se fue, dejando a la joven sin habla y sofocada.

Me tienes mal con solo una mirada.

No podía olvidar sus rasgos, ojos afilados y perezosos, sustituyó su flechazo instantáneo con simple confusión por descubrir a alguien mirándola tan fijamente. Se encogió de hombros y decidió seguir con su entrenamiento. Mientras tanto un muchacho alto se alejaba de ella con una sonrisa relajada y, extrañamente, con el pulso acelerado.

...

Algo en ella le llamó la atención, cuando vio su habilidad puesta en acción al atacar y defenderse se sorprendió al punto de querer verla más. Verla más de cerca lo dejó sin aire, por lo general rechazaba las cartas de confesión ya que no se había enamorado antes y ese no era su propósito actual, pero verla le hizo reconsiderar esa opción. Definitivamente era muy bonita.

Quería conocerla, al diablo si sus compañeros consideraban a su clase como unos arrogantes o prepotentes.

...

Caigo a pedazos cuando no estoy contigo.

Era de noche y no lograba conciliar bien el sueño, seguía replanteando ideas sobre como acercarse a ella sin espantarla, decidió salir a caminar un rato. Quizás eso lo cansaría lo suficiente como para ir a dormir. Salió de la cabaña que le correspondia y así sin más camino hacia el denso bosque que rodeaba esas residencias. Luego de un largo rato de estar explorando encontró un tramo despejado que dejaba ver el cielo estrellado y la luna que servía de farol. En medio de este campo vio una silueta sentada viendo hacia arriba, hipnotizada por la enorme luna sobre el bosque.

Era ella, se acercó a pasos lentos y tranquilos preguntándose que es lo que la habría llevado hasta ahí, ¿tampoco podía dormir? O quizás ni siquiera lo habría intentado. ¿Cuánto tiempo llevaba así?

Se sentó a su lado esperando no asustarla y decidió contemplar el mismo cielo. No le encontró el sentido el ver hacia arriba, además de que su cuello empezaba a doler. Desvió su vista al rostro ajeno y se enfocó en sus ojos, que parecían cubiertos por una nebulosa espesa haciéndolos brillar más, eran grandes y miles de estrellas cabían en ellos. Era como ver una galaxia junto a otra.

-¿Qué haces aquí? Es tarde y hace frío. - preguntó el.

-No lo sé, quería ver el cielo. ¿Y tú? - contestó sin despegar su vista del cielo nocturno.

- no podía dormir, creí que salir a tomar aire me ayudaría. No pensé que también estarías aquí....-

- _____ - le cortó - ese es mi nombre. - y volteó a verlo a él, sobresaltandose ligeramente al darse cuenta de quien se trataba.

-Rin, así me llamo. -

Solo quiero ser tuya.

La noche se culminó entre platicas triviales y miradas prolongadas hacia el otro, ella observaba su perfil y sentía aquellos calambres familiares en el estomago. Él se daba cuenta de la contraria y le devolvía el gesto viendo sus ojos fijamente con una sonrisa relajada.

Cuando el sol empezó a salir se dieron cuenta de lo tarde que era y, por lo tanto, debían volver a sus respectivas cabañas. De lo contrario todos se preguntarán donde estaban. ¿Pero eso realmente importaba?

- Me gustó hablar contigo, no pensé que el tiempo pasaría tan rápido.- dijo ella estando en la puerta de su cabaña.

- A mi igual, quizás, y si quieres ver el cielo de nuevo, podríamos volver a vernos. - rascó su nuca mientras la veía a los ojos.

- Me encantaría. -

Podría hacer esto día y noche.

- ¿Qué son estas jodidas horas de llegar?, ¡No te mandas sola, idiota!- un rubio muy molesto la arrastró dentro de la cabaña para interrogarle su repentina desaparición nocturna mientras se disculpaba con el pelinegro y le guiñaba un ojo. - ¡He estado llamándote durante toda la jodida noche! -

Algo le decía al más alto que esa no seria la única noche que se verían.

Lo siento, estaba con el amor de mi vida.

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End of the track one ♡

Isabel LaRosa - i'm yours <3