Desperté temprano por la mañana, no iba a quedarme en la cama mas tiempo! Tenia un lugar que explorar, Edison ya no estaba y la regadera caía así que supuse que se estaba bañando; mis ánimos estaban a tope así que decidí saltar de la cama y mi cara pego contra el suelo!! Como era posible que hasta en otro país me pasara!!
La ducha se apago y yo me puse de pie rápidamente para ir y abrir mis maletas
— ya despertarte! — dijo Edison saliendo ya vestido, bien por mi corazón que al menos hoy no tendría un ataque y mal por mi imaginación que ya se había echo ilusiones!
— buenos días — respondí revolviendo mi maleta hasta que lo que yo consideraba decente para este calor aparecio, short de mezclilla, sandalias y una camisa holgada de tiras gruesas.
— voy a bañarme! — avisé ganando una sonrisa, al parecer estaba de mejor humor que ayer!
Veinte minutos mas tarde, si lo se ha sido una ducha larga pero en mi defensa el agua estaba perfecta y había escurrido el dolor de cabeza que cargaba desde ayer haciendo que se vaya por completo ... Me mire por ultima vez en el espejo antes de correr escaleras abajo como una cabra loca.
— buenos días!! — canturreé encontrando a todos desparramados en los sofá.
—alguien mas siente como si su intestino grueso va a comerse al delgado? — gruño Kat sobando su panza.
— necesitamos ir al banco a por dinero que sirva — sugirió Dan ...
Y era así como dos horas mas tarde estábamos haciendo cola en uno de los bancos para conseguir cambiar nuestro inservible dinero australiano por dolares americanos.
— en que puedo ayudarles? — pregunto la banquera cuando fue su turno.
— somos turistas — hablo Gerome — venimos de Australia y necesitamos hacer cambio de moneda — la chica sonrió y pidió la cantidad de dinero que queríamos cambiar preciono algunos botones en la computadora y nos entrego por fin nuestro dinero.
— gracias! — dijimos con un mejor semblante; por fin comeríamos algo.
Despues de llenar nuestros estómagos con delicioso café americano y un desayuno estilo americano,que no era otra cosa sino huevos revueltos, tostadas de pan y jalea de fresas habíamos ido a rentrar una camioneta y ahora estábamos llegando al supermercado para llenar nuestra despensa.
Edison estacionó la camioneta frente a Walmart y todos caminamos dentroEDISON:
Cuando llegamos a New York, no sabia como sentirme; como reaccionar sentía que estaba regresando a un infierno del que al principio no quería escapar pero que para mi suerte lo había hecho. Desde el momento que habían anunciado que íbamos a aterrizar todo se agitó en mi, yo no pensaba regresar y en ese momento los recuerdos, todo lo que había sucedido aquella noche estuvieron mas precentes que nunca; me volvía a sentir en un pozo del que no iba a salir jamas y es que, quien no se ha sentido así alguna vez? Querer salir corriendo, escapar pensando que de esa forma todo va a estar bien! Querer cerrar los ojos o golpear tus talones tres veces como en el cuento para despertar ... A veces la única solución para sentirte bien es dormir sin pensar que en algún momento vas a tener que despertar.
Sin embargo debo admitir que Madison de cierta manera era como mi oasis, si ella estaba cerca yo me olvidaba de todo y estaba agradecida por ello.
— te gusta el cereal de hojuelas simples o prefieres otra cosa? — Peash preguntó agitando una caja por delante de mi cara.
— A él no le gusta el cerial! — intervino Madison al darse cuenta que yo no respondía. Mis pensamientos estaban volando pesando en las muchas veces que mi hermana y yo veníamos de compras tanto que casi podía escuchar sus carcajadas de aquella vez cuando la perseguía para que me compre una barra de chocolate.
— bien! — hablo Peash mientras se encogía de hombros y se iba.
— te encuentras bien? — pregunto la cotorra yo la mire por un segundo notando su cara de preocupación.
— supongo, digamos que no es fácil volver — respondí tratando de parecer cereno, pero intentarlo a veces no es suficiente.
— estas seguro que no es algo mas?— pregunto por segunda vez, sabia que ella sabia de mi hermana muerta; yo mismo se lo había dicho pero no sabia lo suficiente como para entender lo que estaba pasando justo ahora y no creía que fuera tiempo que lo supiera.
— los chicos rudos también sentimos nostalgia — dije en son de broma para aligerar el asunto.
— vaya, si no me lo dices no me doy cuenta! — sonrió de manera juguetona.
— tenemos un 33 — 12 un 33 — 12 — corrió riendo hasta las chicas.
— 33 — 12? — pregunte alcanzándole mientras las chicas reían.
— código para decir: alguien necesita helado reparador de corazones rotos! — respondió mi prima.
— lo que significa que te llevaremos por un helado luego del súper — sonrió Kat entusiasmada.
— alguien dijo helado?! — Gerome apareció de la nada.
— lo que pasa que ellas piensan que pueden comprarme con uno — bromee
— y no podemos? — la cotorra canturreo sabiendo la respuesta, Sonreí de lado
— podemos llevar jalea de duraznos? — pregunto Hendrick agarrando el frasco
— tu la comes tu la pagas! — dijo Lena jalando una de sus mejillas.
— hey puedo denunciarte por maltrato de bombones jugadores de fútbol — se quejo sobandose la parte afectada
— que!! — pregunto mirándolo aguantando una carcajada
— claro que eres un bombón amorcito! — Kat lo defendió abrazándole.
— vez ella si sabe!! — chillo en respuesta para Lena ella rodó los ojos y todos reímos.
— y si mejor vamos por el helado? Me aburro — Peash soltó fastidiada y todos la miramos en silencio — es broma, necesitó saber si quieren tocino aumado o normal!! — río
— por un segundo pensamos que habías vuelto!! — le dijo Gerome ella lo remedo riendo.
— yo si quiero el Helado!! Son las tres de la tarde y el calor me esta matando- se abanico con la mano.
— no te quejes! En Australia debe estar a unos 36 grados — le dije
— si pero almenos en Australia la playa esta a 5 minutos! — me saco la lengua — tu cocina tiene horno? — me preguntó
— creo que todas las cocinas lo tienen hoy en día Mad — respondió Kat por mi, no es necesario decir que estábamos caminando por los pasillos mientras sacábamos cosas de los estantes para meterlas en el carrito.
— dime que vas a hornear!! — grito Helena abrazándola
— tal vez — siseo
— cual es el escandalo? — pregunto Hendrick
— Madison hará brownies!!
— yo no dije eso!!
— pero lo pensaste, sino por que preguntaste por el horno!? — reclamo Kat
— cual es el drama solo son brownis! — corrigió ella sacando un paquete de harina del estante
— que!!ofendes a los brownies! — dramatizó Helena
— tus brownies son exactamente como los de tu abuela ... Lo que los hace los mejores!! — ella se puso tan roja y sonrió.
— cállense — gruño escondiendo su rostro
— así que los mejores brownies ehh — la codie en son de broma
— eso dicen — respondió apenada.
— voy a tener que probarlos, aun que aun no e comido unos mejor que los de mi madre — me reí
— esta es una receta delicioso a menos que seas alérgico a las nueces como mi madre — río bajito.
— así que tu madre es alérgica a las nueses!!
— no vas a esconder nueces en su comida!!- me regaño haciéndome reír
— No es una mala idea, ella me odia — reclame y si ella fuera mi novia de verdad la hubiera besado ahora por que ganas no me faltaban
— hay que pagar campeón!! — me guiño un ojo empujandome a la fila de tres personas en la caja mientras buscaba algo con la mirada
— quédate aquí, voy por Lena!! — salió de la fila y empezó a caminar, mi prima era la encargada de administrar el dinero, si no fuera así al final de las vacaciones tendríamos que pedir limosna para sobrevivir!!
— hey Aspen!! — alguien hablo a mis espaldas.
— Dante... — dije con desconcierto; digamos que el era un viejo amigo de esos con los que no estas muy contento de volver a ver.
— te e estado buscando — concreto con voz calculadora - donde te has metido?
— que quieres!? — pregunte directo
— hay negocios — sonrió — de esos que solo tu puedes hacer.
— ya no juego y lo sabes! — digamos que hace un tiempo yo no era la persona que soy ahora.
— esto va a dejarnos mucho dinero — dijo.
— no me interesa- respondí, no queria seguir hablando yo le prometí a Danie muchas cosas y esta fue una de ellas
— hey Dante cierto! — apareció Helena junto con Madison — te recuerdo de bueno, de... — ella me miró, aveces me cansaba que todos me tuvieran lastima.
— Helena, no te preocupes te recuerdo como has estado? — beso la la mejilla de mi prima.