El día paso y se dio a conocer que la recién madre del hospital Midoriya Inko había fallecido, mientras que el bebé estaba en una incubadora enfrente de este estaba un Hizashi destrozado mentalmente
Ver a su pequeño hijo metido ahí con varias máquinas conectadas a su pequeño cuerpo para que pudiera seguir con vida, solo sollozaba mientras el doctor solo le daba palmadas de vez en cuando, el simple hecho de ni siquiera poder tocar su mano le era doloroso y más cuando el bebé tendrá que tomar ¨Leche de fórmula¨ por lo que ya no podrá tomar de su madre
Hizashi se marchaba del lugar, después de todo no podía llevarse el bebé con el, en su camino pensaba en un ¿Que haré ahora?, quizas lo mas lógico para muchos es que cuide al niño y maneje su dinero de buena forma y aunque así lo es, su esposa aportaba la mitad de ingresos al hogar, apartando tenía que costear el funeral de su amada, así como estar pendiente de su hijo, pero no había tanto problema con el, el seguro lo reesguardaba a el pero no a Hizashi
Ante un futuro incierto el se estaba enfrentando, con su amada muerta que no es de las mejores noticias que el podría tener estaba Izuku, el no estar prepado para enfrentar esto solo ya lo tenía con bastante paranoia, tenía que ser fuerte al menos para el niño que lo iba a acompañar en un par de meses y años
Llegó a su hogar y entrando pudo ver que salio a una gran velocidad el día de ayer, caminaba por la sala y podia ver las fotos golgadas con el y su amada, ahora su prioridad era el bienestar del niño, al menos tenía una semana libre antes de volver a entrar a laborar. . .
Hizashi se encontraba en el hospital, estaba visitando su hijo cuando podía, al menos ya lo ha visto crecer en esa incubadora durante un mes, al menos ya le puede dar biberón y tocar su pulgar, estaba creciendo adecuadamente pensaba el, venir al hospital le daba cierta tristeza pero cuando ve a su hijo con todos los cuidados piensa en un ¨Es lo mejor para el¨ se decía a si mismo
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El campo de flores
FanfictionUna pequeña serie de la vida de un niño viviendo sus últimos días de vida mientras su padre sufre por no poder hacer nada ante la enfermedad de su pequeño niño mientras visitan regularmente un campo de flores.