Lycoris Radiata

Parte 1

Mi mejilla ardía, el odio de Mikasa era desbordante.

Mikasa: ¿¡Qué mierda te pasa!?

Me había levantado de la cama para hablar con mi hermana sobre su comportamiento con ese Omega. Avancé por los pasillos con Armin queriendo detenerme, en poco me encontré a Mikasa que salía de una de las habitaciones con unas hojas en la mano.

Eren: Mikasa.

Mikasa: No deberías de estar de pie, ve a descansar.

Eren: ¿Por qué realizaste una cirugía y gastaste materiales?

Mikasa: ¿Gastar? ¿Dónde le ves el gasto?

Eren: En todo, esa persona no tiene el dinero para pagarlo. ¿Se lo darás gratis?

Mikasa: A diferencia de ti, Eren. Yo me intereso más por ayudar y menos por las cifras. Si tanto te importa el dinero te lo pagaré después.

Eren: No me refiero a eso

Mikasa: Dime Eren, cuando estuvieron en ese lugar, ¿A él le pasó algo más además de los golpes?

Eren: ¿A qué te refieres?

Mikasa: Del tipo sexual.

Eren: Ahg... sí

Dije avergonzado al recordar tal escena repulsiva.

Eren: Le dieron un afrodisíaco, me obligaron a tener relaciones con él.

Mikasa: ¿Tuviste un nudo?

Eren: ...¿cómo lo sabes? Sí, en un momento pensé en Lea y anude, ¿Por qué las preguntas?

Mikasa: Una última, ¿Lo sacaste aún con el nudo?

Eren: Sí, era demasiado desagrada-

Armin: ¡M-mikasa!

Mikasa con bastante enojo me dio una cachetada, mi mejilla quedó ardiendo, estaba muy perdido con su reacción.

Mikasa: ¿¡Qué mierda te pasa!?

Eren: ¿A mí? ¿Qué carajo fue-

Mikasa: ¡Estoy poniendo toda mi cordura en hablar correctamente contigo, Eren! Te lo preguntaré una vez, ¿Pensaste en lo que hacías al sacarlo?

Me quedé callado, no sabía por qué tenía esa reacción tan violenta.

Eren: Solo quería irme de ahí, no soportaba acostarme con un hombre.

Mikasa: Eren...

Ella respiró profundamente controlando su furia.

Mikasa: No importa si es una mujer o un hombre, no importa el sub género que tenga, puedes matarlo si sacas el nudo de esa forma. ¿Pensaste en eso?

Eren: ¿Matarlo? ¿De verdad crees que me importa su vida como para pensar en eso?

Las feromonas de mi hermana se esparcieron junto con una expresión de querer matarme, naturalmente contesté liberando las mías.

Armin: C-chicos, por favor. No puedo oler las feromonas pero...si sentirlas.

Solo con eso ambos nos calmamos, no queríamos lastimar al rubio. Ella me tomó del brazo y me obligó a verla.

Mikasa: No sé por qué le tienes tanto odio a ese chico, pero si él muere por tu estupidez mis padres sé enteraran.

Me soltó y se retiró aún molesta, Armin sin saber que decir tan solo fue junto con ella.