๑ hamstersito 𖧧 𝘁𝗼𝗱𝗼𝗱𝗲𝗸𝘂 ָ࣪ ੭

O2━ amigos

A penas pisaron las puertas de entrada, el bullicio inició, los murmullos siguieron como balbuceos y las miradas no tardaron en aparecer. Los alumnos de aquella institución conocían al famoso Alfa Líder Todoroki, dueño de las mejores revistas de Japón, a su lado la parejita Izuku Midoriya.

El Omega mantenía sus ojitos al suelo, esa timidez venir a él por las discretas miradas, sus orejitas parpadeando a su caminar. Su cintura siendo envuelta por unos brazos, miró a su costado, Todoroki estaba inexpresivo y marcándolo con su aroma. Esa fría mirada, había hecho que los bullicios cesarán de inmediato.

<...A-Alfa mío...>pensó avergonzado, quería mostrar sus celos como Shoto lo hacía, marcarlo con su olor, mostrar que Todoroki le pertenecía. Pero tanto él como su hamstersito no podían, le causaba cosquillas y lo ponía más tímido de lo usual.

La institución que asistía el hamstersito Omega, era dividido en sectores. La regla de allí era estricta "ser respetuoso" durante décadas, esa regla jamás fue rota. La amabilidad podía sentirse y la humildad por igual. Aquellos que no cumplían la regla eran expulsados, sin tener derecho a suscribir a otra institución y se ganaba un 0% de las notas. Es decir, perdían su beca. Todo.    

Midoriya tenía una sola amiga de salón, Momo yaoyorozu. Una gata Alfa. Jamás podría sentirse intimidado con la blanquecina, quién cuidaba de él cuando Todoroki estaba en horas de trabajos. Su salón era para Alfas-Omegas de situación especial.

Al llegar al salón correspondiente, Shoto saludó amablemente a la Omega Ochako Uraraka, profesora de su pareja; una perrita husky silberiana. Aquellas orejas blanquecinas resaltaban en su cabellera castaña y su tez lechosa, mientras mostraba una sonrisa hermosa.

──Ya queríamos iniciar la clase ──La Omega mayor, miró felizmente al heterocromático── ¿Midoriya-kun?

El mencionado, abrazó efusivamente a la mayor, sus orejitas causaron cosquillas bajo el mentón de la castaña. Uraraka con el tiempo se volvía más importante para el hamstersito, quién ansiaba tener una amistad. ¡podía tener dos amigos!

──Buen día, profesora Uraraka-San.

──Lo mismo para ti, pequeño ──la baja risita  del peliverde, alegró ambos adultos── Ve a tu asiento. Yaoyorozu no ha dejado de preucuparse si llegabas o no.

──Oh... esta bien.

Antes de entrar, Midoriya se giró y miró a su Alfa, lo abrazó fuertemente, sintiendo aquellos brazos envolver su cintura, hizo puntillas y estiró sus labiecitos para un beso. Todoroki riéndose de la ternura, se agachó y lo beso con tanta dulzura. El ronroneo que se escapó del Omega, alegró al Heterocromático, volviéndose posesivo para marcarlo con su olor. Y minutos después, dejarlo ir... 

──Sé ve como ha mejorado ──comentó Uraraka, siguiendo con la mirada al peliverde menor, viéndolo feliz al tomar asiento con Momo.

Todoroki asintió con una pequeña sonrisa.

──Estoy feliz por mi Omega, Después de mi trabajo, Midoriya tiene cita con el psicólogo.──comentó, soltando un suspiró──Kirishima me recomendó que aún no es momento de salir, la parte animal de Izuku, aún no esta listo.   

──Lo entiendo. ¿Hubo algunos problemas?

──Realmente... sí ──admitió── Su celo se acerca, y no sé que hacer. No quiero asustarlo. Midoriya aún no esta listo, menos su parte animal. No quiero que piense que lo rechazo, pero aveces... es difícil decirle no.

Uraraka formó una mueca, podía sentir la tristeza de Todoroki debido a sus feromonas, era complicado el asunto.

Shoto sabía que su Omega tenía sus cuidados. Era realmente frágil. La parte animal de Izuku era una bolita tímida, y muy sensible. Sobre todo, su estado emocional. Cualquier cosa que no fuera apropiado para el peliverde, podía causarle algún pánico o incluso tener un ataque.   

Midoriya era de los pocos Omegas de su especie, era un 0,3% de Hámsters en todo el mundo. Tal vez muchos querían tener una parejita como la de Shoto, e incluso había celos de la gente, pero era una enorme responsabilidad, el Lider León lo sabía perfectamente.

¿Un Alfa León y un Omega Hamstersito? Nadie podía creerlo.

──Debes hablar con él.

──Eso haré Uraraka-San ──contestó── En la cena de esta noche, tendremos que hablar. Sé que Midoriya podrá entender.

──Verás que sí. 

Todoroki correspondío a una sonrisa, mirando última vez el salón,  sintiéndose aliviado de ver como Momo dejaba que su Omega jugara con esas orejitas de gato. La sonrisa de Midoriya, le alegraba los días.

──Nos vemos, Uraraka-San.

──Suerte en tu día.

Todoroki salío de la institución a pasos intranquilos y prendío su vehículo al momento de tomar asiento, fijó la hora y suspiro. Dos minutos para llegar a su empresa. Inició su día al igual que su bebé que estaba en clases.

Más tarde, vendría a buscarlo.