Ben

Capitulo 3-Desapariciones

Cuando nos quedamos solos no sabía que pensar, Era mi oportunidad para besarlo y agradecerlo por lo que había hecho por mí, pero solo fue un pensamiento corto, Ya que los problemas aun no acababan, El parque había quedado solo, Pero a lo lejos, en la entrada de por dónde venimos se alcanzaba a ver una silueta acercándose a una velocidad sobrehumana, Era Joseph, Cuando por fin se acercó lo suficiente para escucharlo se escuchó un grito que hizo a las palomas volar

- ¿BEN, ¿ESTAS MUERTO HIJO, ESCUCHASTE? M.U.E.R.T.O

Me dio escalofrió, Max se levantó, me dio la mano, y ambos corrimos hasta su casa, En el camino nos encontramos con Lola, Quien nos vio cansados y nos ofreció ayudarnos, pidió un taxi y nos dejó en casa de Max, en el camino le contamos lo que paso en el parque, cuando ya iba a terminar la historia ya habíamos llegado a casa de Max, el conductor se veía asustado, Mi mejor amiga me ayudo a bajar, Max bajo sin problemas, Le dije Gracias con un abrazo y los ojos llorosos:

-Oye, tranquillo si? Intentare averiguar que está pasando, Mientras descansa

-Gracias... Enserio Gracias

El taxista le grito a Lola '' Apúrese señorita'', su voz se escuchaba cortada, inmediatamente Lola subió al taxi y el conductor apretó el acelerador, Por suerte la calle era recta por unos 20 kilómetros si no se hubieran estrellado.

Al entrar a casa de Max no estaba ni su madre, Ni su padre, Realmente nunca están, pero mis suegros son muy amables conmigo y aceptaron inmediatamente nuestra relación en cuanto lo escucharon, Max me ofreció bañarme en su casa, Yo llevaba la maleta con mi ropa así que accedí.

Cuando termine de bañarme afuera estaba Max con una bolsa, En ella había una bolsa de bombones y un Jugo, Cuando me vio y me entrego la bolsa me dijo:

-No sabemos lo que está pasando, pero no es normal que nadie esté cerca

-Como que nadie?

Me asome en la ventana, normalmente esa calle por lo larga está llena de gente, cuando llegamos a casa de Max estaba repleta de gente, pero al asomarme, No había nadie.

-Raro

-Esto ya me dio miedo Max

-Mira ... ya estamos a salvo, y aquí estarás bien, te cuidare bien, somos no...

Un horrible estruendo interrumpió a Max

-Te encontré jajaja

Era la voz de un hombre con una voz muy gruesa, pero no era Joseph, no se le alcanzaba a ver el rostro, pero algo era seguro, no estamos a salvo.