Todo Cambia {Valú}

Cap 8

A la mañana siguiente Martina se despierta y comienza a dar saltos en la cama, despertando a Malú y a Vanesa.
Ma- Buenos dias mamis- dice tirandose a la cama
M-Buenos dias bichito- dice revolviéndole el pelo.
V- Buenos dias granujilla- dice haciéndole cosquillas.
Ma- mamis ¿podemos desayunar tortitas?- dice haciendo pucheritos.
M-Si nos pones esa carita no te podemos decir que no- dice besándole la carita.
Ma- Biennn- dice tirandose encima de Malú, empezando así una guerra de cosquillas.
Tras un rato divertido, se levantan de la cama, Vanesa coge en brazos a Martina y bajan las tres a la cocina. Mientras Malú hace las tortitas, Martina está en el salón viendo los dibujos, y Vanesa prepara los cafés y el cola cao de Martina.
V- Amor, creo que mereces que tengamos una charla- dice abrazándola por detrás, mientras se calientan los cafés.
M- Gordi se que estamos pasando un momento difícil, pero siempre me vas a tener, a mi y a la enana- dice girándose y besándola.
V- ¿Desayunamos y hablamos?- dice separándose de ella, tras ese beso que les ha dejado con ganas de más.
M- Está bien- dice sonriéndole y dirigiéndose a buscar a Martina.
Regresa a la cocina con Martina y desayunan con total tranquilidad, entre risas y piques por parte de las tres. Tras recoger el desayuno, Martina sube a su habitación a jugar con sus muñecos, Vanesa y Malú se sientan en el sofá, dispuestas a tener esa conversación que Vanesa se ha guardado durante tanto tiempo.
V- No se por donde empezar- dice nerviosa.
M- tranquila amor- dice agarrando sus manos.
V- Cuando llegó Martina, tuve miedo mucho miedo, no sabía que hacer ni a donde ir, la vi tan pequeña y tan frágil, que no sabía cómo protegerla y tú eras la única que podías ayudarme, sabes de niños, tienes una ahijada de 11 años, sabia que tu no ibas a dejar que esa niña se quedase en la calle- dice algo más tranquila.
M- Claro que no, esa niña merece una vida digna- dice mirándola a los ojos.
V- Cuando vine aquí con ella y la miraste con esa mirada tuya que tanto dice, sabía que había hecho lo correcto y que tu ibas a cuidarla, y así ha sido hasta ahora. Pero Malú, no solo me daba miedo ese posible rechazo a la niña, tenía miedo de no saber controlar lo que sentía por ti y que tu no me correspondieses, pero me he dado cuenta que ambas hemos remado juntas desde el principio y que tenemos que seguir haciéndolo, por nosotras y por la pequeña, porque sois mi familia y sois lo más importante que tengo y no quiero que mis inseguridades y mis miedos me alejen de vosotras- dice con lágrimas en los ojos.
Malú intentó responderla, pero también estaba llorando, simplemente la abrazó fuerte y le susurró un "te amo" que hizo que Vanesa se sintiera la mujer más feliz del planeta. Tras unos minutos abrazadas, Malú se separó más calmada y entrelazando sus manos la hizo levantar del sofá.
M- Quiero que sepas, que voy a luchar por nosotras, por la niña, que tu y yo podemos con todo y no vamos a ocultarnos nuestras inseguridades ni temores, no quiero que volvamos a tener la frialdad de hace unos días, ahora somos una familia y tenemos que educar a Martina en un ambiente agradable y en el que ella pueda ser feliz- dice mirándola fijamente.
V- Te amo- dice acercándose a sus labios y dejando un suave beso.
M- Yo te amo más- dice aún en sus labios.
V-Yo...- el sonido del timbre la interrumpe.
Martina baja corriendo a abrir,pero Malú la coge en brazos antes de que llegue a abrir la puerta, y es Vanesa quien abre. Detrás de la puerta se encuentran un hombre y una mujer ambos jóvenes, no llegan a los 40, ambos se quedan parados y es Martina la que sale corriendo a la habitación cuando los ve. Malú no entiende porque sale corriendo de esa manera, si aún ni se han presentado.
M- Hola- dice confusa
O-Hola, soy Oier y ella es Nora- dice mirando a su mujer.
M- Encantada- dice sonriendo
N- Igualmente- dice con una tímida sonrisa
V- Y ¿que hacéis aqui?- pregunta nerviosa.
N-Somos los padres de Martina- dice bajando la cabeza.
M- Si lo que venís es a buscarla, tendréis que vernos en los juzgados a nosotras y a ella- dice seria.
O- Tranquila, sabemos que hicimos mal, pero nos alegramos de que os haya encontrado, solo queremos saludarla y despedirnos de ella, nos vamos del pais- dice afligido.
V- ¿Y justo venis ahora? Después de llevar casi dos meses sin saber de ella, de haberla dejado a su suerte, os presentais aquí a verla, no tenéis derecho- dice cabreada.
M- Amor tranquila- dice en un susurro.
O- Sabemos que no lo merecemos, pero por favor, solo queremos despedirnos- dice desesperado.
V- Iré a buscarla, pero si ella no quiere, no voy a obligarla- dice seria.
N- Si si, no la queremos obligar, solo despedirnos- dice cuando Vanesa se mete en casa en busca de Martina.
Vanesa sube a la habitación y al abrir la puerta se la encuentra hecha una bola con el perrito que le regalaron hace unos días Malú y ella entre sus brazos. Se sienta en el borde de la cama y le acaricia el pelo, Martina se lanza a sus brazos y rompe a llorar.
V- Ey enana, no me llores- dice acariciando su pelo.
Ma- No quiero irme de aquí, yo quiero con vosotras- dice llena de lágrimas.
V- No te vas a ir, nosotras no vamos a dejar que te vayas, ellos han venido a verte y a despedirse se van lejos, pero solo si tu quieres- dice besando su frente.
Ma- Vale, pero contigo- dice abrazándose fuerte a ella.
V- Si conmigo, y con mamá que esta abajo esperando- dice levantándose con ella en brazos.
Ma- Y con Flopi- dice señalando el perrito de peluche que había dejado en la cama.
Vanesa coge el perrito y se lo da a Martina, que se apoya en su pecho mientras acaricia el pelo suave del peluche mientras Vanesa baja hacia la puerta donde las espera Malú con ella aún en brazos. Al llegar abajo Martina se esconde en el pecho de Vanesa, Nora le acaricia el pelo e intenta que Martina salga de su escondite, pero se abraza más fuerte a Vanesa, empieza a temblar y Malú es la que se acerca y le acaricia la espalda, consiguiendo asi que se tranquilice y salga de su escondite.
En ese momento....