Something To Talk About - Adaptación Caché

Capítulo 20.

DANIELA

Daniela no sabía qué le iba a decir a María José cuando le entregó su café el jueves por la mañana, se detuvo junto a su escritorio y abrió la boca...

—Vas a venir al juego esta noche ¿Verdad?— moduló tambaleando, no dejó que María José respondiera —Es el último partido y después el equipo va por helado, puedo llevarte si quieres, no te puedes perder el último partido— María José parpadeó.

—Iba a irme a casa primero— dijo —No traje ropa para el juego, solo tengo esto .

"Esto" era un vestido azul marino con ribetes blancos que tenía puesto, eso era demasiado elegante para un juego de béisbol, María José se veía bien con él, Daniela lo notó y luego dejó el pensamiento a un lado.

—Puedes ir a casa a la hora del almuerzo y cambiarte o al menos conseguir ropa para cambiarte— dijo Daniela, ella apartó la mirada —Si lo prefieres, puedo evitar las gradas, puedes sentarte allí con tu hermana y...—

—No seas ridícula —dijo María José —me sentaré a tu lado, estamos bien.

—Por supuesto— dijo Daniela.

Todavía sentía que el otro zapato estaba a punto de caer.

—Me cambiaré antes de irnos— dijo María José —Agradecería el viaje, gracias.

Ella sonrió como si Daniela estuviera hecha de vidrio, Daniela asintió con la cabeza y se dirigió a su oficina.

Quizás el otro zapato ya había caído en la forma de Barry Davis, después de que María José se fue el martes, después de que le dijera a Daniela que Barry la acosaba se quedó en silencio en su oficina. Ella había querido gritar, todavía lo hizo, un poco. El asistente de Barry había llamado ayer, pero Daniela no pudo contestar el teléfono, lo rompería si hablaba con él ahora mismo y eso no ayudaría a nadie, tenía que arreglarlo, tenía que descubrir cómo rechazarlo y arruinar su carrera sin consecuencias para María José.

María José no quería hacer una declaración y por mucho que Daniela odiara eso, lo entendía. Esa era la industria que condenó al destierro a Daniela por llamar la atención sobre el racismo y fue entonces cuando ella era una persona de renombre. María José era asistente, pero Daniela era lo suficientemente rica ahora, lo suficientemente establecida. Esto era algo que tenía que hacer.

—

Valentina llamó a Daniela a media mañana, pudo escuchar la rabia en su voz cuando dijo hola.

—Estás haciendo algo al respecto ¿Cierto?— dijo Valentina no hubo una pequeña charla primero.

—Por supuesto— dijo Daniela —Puede que lleve algún tiempo, pero...sí, por supuesto que estoy haciendo algo.

—Cuando ella me dijo... Dios, quiero matarlo.

—Lo traje aquí, Valentina— Daniela dijo lo que la había estado molestando desde que se enteró —Lo invité a nuestro lugar de trabajo, yo soy la quien los presentó, carajo.

—Él es el idiota que lo hizo, Daniela— dijo Valentina —Esto no depende de ti como de María José ​​y ​​sabes que no está en ella.

Por supuesto que no estaba en María José, pero debería haberlo sabido, compartía en la industria con Barry Davis, debió haber escuchado algo.

—Eres realmente rica— dijo Valentina —Seguramente tienes suficiente dinero para asesinarlo— Daniela soltó una carcajada ante eso.

—No puedo decir que no lo haya considerado.