Hoy me puse a pensar; y llegué a la conclusión de que nos pasamos la vida lamentándonos por las actitudes que tienen hacia nosotros personas hipócritas, que solo buscan quedar bien con una sociedad basada en la superficialidad. Me di cuenta de que no importa cuanto hagamos por alguien que, cuando más lo necesitamos, se hace a un lado y luego como por arte de magia reaparece en nuestra vida como si nada. Regresan como si nunca te hubieran dejado adentrarte en la oscuridad, aún teniendo una linterna en su mano; como si con una sonrisa lograran borrar todo el daño que han hecho.
Al final, no podemos juzgar a nadie por confiar en esas personas, y es que ¿quién no les ha creído cuando dicen haber cambiado? Aunque en realidad si cambian, pero de una muy mala manera (como si fueran una versión mejorada del mal que habita en su interior), y en ese momento se superan a ellos mismos; cuando teniendo en su poder una compañía eléctrica, nos dejan en total apagón.
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Reflexiones Rotas
RandomReflexiones, pensamientos, divagaciones de la mente... cuando la soledad reina sobre el silencio de las palabras