Aquellos orbes Rubí - Lucifer [Obey Me]

El Origen

Estaba en la biblioteca buscando un libro que una profesora me había encargado llevar para el día siguiente. Como era de esperarse, ese día estaba a solas con Satan entre tantos libros, finalmente cuando encontré el que necesitaba estaba tan alto que con las justas llegaba a rozarlo con los dedos, pero estaba determinada a alcanzarlo.

- ¿Necesitas ayuda? - preguntó el rubio mientras se levantaba, dejando el libro que leía de lado, dirigiéndose hacia mí.

- No, está bien, gracias pero puedo hacerlo sola - respondí apresuradamente a la par que ponía un pie en un nivel de las estanterías y apoyaba mi mano en una pila, aparentemente sólida, de libros.

Así pude tomar el libro, pero en ese mismo instante la pila de libros se empezó a desplomar haciéndome perder el equilibrio, fue entonces que velozmente Satan se acercó agarrándome de la cintura con un brazo y con el otro apoyándose en el librero de atrás para no caerse junto a mí, yo como pude, me sostuve de su cuello con ambos brazos.

Quedamos en una extraña pose como sucedía muy convenientemente en un dorama con los protagonistas, pero en esta ocasión desde mi perspectiva estaba lejos de ser algo romántico, pues yo tenía mis sentimientos puestos en el demonio de cabello negro. Sin embargo, contrario a mis expectativas, teniendo al ojiverde a escasos centímetros de mi cara,tras sonreír ladinamente, en vez de separarse, este acortó la distancia depositando un delicado beso sobre mis labios. Yo estaba muy sorprendida de que así se iba mi primer beso, con alguien por quien no tenía sentimientos más que de cariño, no supe reaccionar y soltarme de su cuello me haría caer, así que el delicado beso duró unos segundos más hasta que sentí que el mayor pasaba la punta de su lengua entra mis labios con intensiones de profundizar el beso.

- Ajá - Se oyó una voz venir desde la puerta de la biblioteca, yo supe de inmediato que esa profunda y atractiva voz venía del demonio que me quitaba el sueño, Luficer.

Al asomarme a verlo no pude evitar que todos los colores subieran a mi rostro por ver la posición en la que nos había encontrado, cosa que fácilmente podía malinterpretarse. Satan lo miró con fastidio y Lucifer le devolvió una mirada de indiferencia, la cual en cierta manera me dolió porque sentí que no le había molestado en absoluto haberme visto con alguien más, cosa que confirmaba mis casi inexistentes posibilidades con él.

- Lu - traté de llamarlo para explicarle la situación mientras me separava de Satan y me dirigía hace él, pero me interrumpió rápidamente.

- _______, necesito que revises estas plantillas para el programa de intercambio y se las vayas a entregar a Diavolo antes de las media noche. Estoy muy ocupado, así que volveré a lo mío - tras decir esto se retiró en segundos.

Creo que fue el comienzo de una serie de eventos oportunos.

O como cuando ocurrió eso otro...

Un par de días más tarde al incidente de la biblioteca, una noche en la que había terminado todas mis tareas, me dirigí a la habitación de Leviathan para entretenerme jugando algún videojuego con él como siempre solía invitarme a hacerlo.

Al llegar iba a tocar la puerta, pero al escuchar gruñidos de frustración y quejidos, decidí entrar directamente. Ahí me encontré con un Levi sentado en el suelo tratando de meter su gran pierna dentro de unas delicadas botas de mujer, vestido con una falda mal puesta, blusa algo arrugada y una peluca despeinada.

Al verme se sonrojó mucho y me recriminó por no haber tocado antes de entrar, unos minutos después, me explicó que quería hacer un cosplay de Ruri para un concurso con un premio de edición limitada para los ganadores, que no había tenido más opción que tratar de hacerlo por su cuenta, pero el atuendo que había comprado era muy pequeño para él. Se veía tan triste que no me pude resistir a ofrecerme como la "modelo" y él aceptó encantado. Mientras me cambiaba, salió de la habitación para de paso ir a recoger la cámara profesional que había comprado, así que me quedé sola en la habitación.