fuck me, police › chanlix

capítulo cuatro.

―Hola ―apoyó sus codos en el mostrados y su rostro en sus manos, miró fijamente al nervioso chico y le guiñó un ojo―, ¿cómo estás?.

―Bi-bien ―tartamudeó tragando saliva, notablemente nervioso―, ¿en qué te puedo ayudar, bonito?

―¿Me puedes ayudar a buscar una bonita ropa? ―pestañeó varias veces―, es que no tengo a alguien que me diga si me veo bien o no.

―¿Quieres que yo te ayude? ―preguntó sorprendido. Bonito, pero demasiado virgen.

―Claro ―sonrió coquetamente, de esas sonrisas que te dejan babeando―, ¿puedes ayudarme?.

―Por supuesto ―murmuró e intento salir del mostrador casi cayéndose.

Felix rió un poco por lo penoso que estaba siendo el chico y se giró a ver a Bang Chan, pasó por su lado casi rozándolo.

―A mi señal sales corriendo ―le susurró caminando, siendo seguido del chico castaño, quien bajó la mirada al ver la fría y dura mirada que le daba el oficial.

Bang Chan sólo pudo bufar y calmar el extraño sentimiento de su corazón al ver a Felix coquetear con otro chico, se relajó pensando que sólo lo hacía para salir de apuros.

Felix llegó hasta la sección de baratillos y le sonrió al chico.

―¿Puedes buscarme una playera? ―señaló el gran montículo de ropa―, dime cual va mejor conmigo ―el chico asintió rápidamente y comenzó a buscar una playera para que Felix se la pusiera.

―Una linda, de colores bonitos ―susurró Felix en su oído soplando un poco, el chico se tensó y tragó saliva.

―Cla-claro ―suspiró y siguió buscando una playera.

Felix al ver que estaba distraído, le hizo una seña a Bang Chan de que fuera saliendo y este aún dudoso, Caminó hasta la puerta tratando de no llamar la atención.

―¿Estas buscando?.

―Sí.

―Buen chico.

Felix se mordió el labio y al ver que Bang Chan ya no estaba dentro del pequeño local, comenzó a moverse lentamente hasta la salida.

―¿Esta te gusta? ―preguntó el chico sonriendo mientras sacaba una fea playera verde del montón, pero al momento de mirar hacia donde debería estar el rubio, se encontró con la nada―, no de nuevo ―suspiró dejando la playera en su lugar-ni su número pude tener.

―Pobre chico ―murmuró Bang al momento de correr debajo de algunos techos hasta estar algo lejos de la tienda.

―Bien ―se detuvo y tomó aire―, debemos buscar donde dormir esta noche.

―Tienes razón ―miró hacia todos lados intentando ver algo que no fuera sólo lluvia―, hay que preguntar. Ven ―tomó la mano del rubio y caminaron un poco tocando alguna que otra puerta y preguntando a personas algún lugar donde dormir.