Silhouette║Sadie Sink y tú

Capitulo 40: Do u remenber?

POV _____

Desperté, el reloj marcaba seis y treinta de la mañana. ¡Mierda! Iba a llegar tarde. Me duché rápidamente, ni siquiera me detuve a pensar en el desayuno. Arranqué mi auto y llegué a la universidad a las siete en punto, justo a tiempo para entrar al auditorio. Allí estaban Dylan y Noah esperándome, pero noté que habían muchos alumnos ahí, y entre ellos, una pelirroja que no dejaba de llamarme la atención.

—Llegaste tarde —dijo Dylan riendo, como si fuera un logro personal.

—Me quedé dormida, perdón —respondí, sin dejar de ver confundida a la clase.

—Bien, te dejamos, ya nos debemos ir a nuestra clase —dijo Noah, se despidieron y yo me fui a sentar.

El director entró y, con su voz habitual, comenzó a explicar las actividades que se venían para la universidad.

—Como saben, entre los estudiantes de medicina y fotografía, tienen que realizar un proyecto, haciendo una investigación de la muerte que más les llame la atención de Estados Unidos —dijo mientras se dirigía a la puerta, haciendo entrar a otro profesor que parecía haber robado su café.

—¡Buenos días, chicos! Bien, las parejas son... —el profesor empezó a leer las combinaciones y cuando llegó a mi nombre, sentí un sudor frío recorrer mi espalda—. _____ Salvatore y Sadie Sink.

—Ahora, siéntense con sus parejas —ordenó el director. Mis ojos se encontraron con los de la pelirroja que se acercaba, y una mezcla de nerviosismo y emoción me invadió.

—Hola —dijo ella, su voz dulce resonó en mis oídos.

—Hola, Sadie, ¿no? —dije, un poco dudosa, aunque su nombre estaba grabado en mi mente.

—Sí, así es. ¿Qué caso tienes en mente? —preguntó, su mirada curiosa y entusiasta.

—Sinceramente, ninguno. Ya que tú eres la profesional, ¿cuáles casos crees que jalen mas la atención? —le dije, lanzando una sonrisa para disimular mi ignorancia en tanto a eso.

—Depende, hay casos brutales que captan más la atención —replicó Sadie, pensativa. —Mencióname uno que te guste.

—Jeffrey Dahmer, creo que Steven Hicks, su primer víctima en 1978, es frecuentemente recordado —dije, y ella asintió lentamente.

—Sí, pero es muy conocido, seguro que los demás lo eligen. ¿Qué tal Ted Bundy...? A menudo se menciona a Kimberly Leach, su última víctima en 1978

—Ese también capta mucho la atención —respondí, disfrutando de nuestra conversación.

—¿Te parece si nos reunimos para investigar? Mañana es sábado, así que no hay prisa —propuso Sadie, con un brillo en los ojos.

—Claro, ¿a qué hora? —pregunté, emocionada.

—A las tres de la tarde, ¿te parece bien? —dijo, esperando mi respuesta.

—Perfecto —dije sonriendo justo cuando el timbre de salida sonó. —Nos vemos luego.

Recogí mis cosas y me dirigí hacía el exterior del aula donde estaba Olivia. Cuando me vio, me sonrió.

—¿Nos vamos? —preguntó, dándome un beso.

—Sí, vámonos —respondí y nos dirigimos al comedor. Allí estaba mi grupo esperándome.

—¿Se enteraron de la gala? —preguntó Thomas, su mirada llena de emoción.

—Sí, mañana a las diez de la noche —dijo Malina, su tono un poco misterioso.