ex-novios | bajifuyu.

único.

N: hola, quería decirles que muchísimas gracias por los cien seguidores y por los 5k en mi otra historia. espero que también les guste este que salió de la nada bsbdbw.

nota editada: este one shot al principio era con chifuyu fem :) así que ahora hice unos arreglos porque vi que muchos quedaron ??? cuando nombre una falday ahí se me pasó quitarlo kejdkd, así que ahora sí está editado 100%

Ahora sí, espero que les guste.

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Chifuyu era un buen niño.

Sí, un buen niño chupando pollas.

Oh, con esa cara de inocente quien creería que estaba en un cubículo de baño chupando la polla de un chico.

Y no cualquier chico, el más popular de la universidad y también su ex-novio. ¿Cliché? como la mierda, pero Keisuke tenía una polla grande, y a Chifuyu le encanta que sean grandes.

Estaban en un acto del colegio, no saben de qué, solo que llamaron a todos a reunirse en el patio principal.

Pero una cosa llevó a la otra y estaban ahí, Keisuke Baji apunto de correrse en la boca de su ex y Chifuyu tomando todo, excitándose aún más por la forma en que Baji tiraba su pelo para ir más profundo.

Chifuyu había notado la forma en que Baji lo miraba siempre, sus piernas, su culo, su cintura, su cuerpo en general. Y digamos que viniendo de la persona la cual todavía tiene sentimiento, le encantaba.

—Mh~ a-ah Chifuyu.

Keisuke tenía los ojos cerrados, su labio inferior atrapado entre sus colmillos y su mano derecha en el cabello de Chifuyu haciendo que vaya más rápido y profundo, al ritmo de Baji.

Y Chifuyu... Chifuyu solo disfrutaba en silencio. Amando lo rudo que era.

En el baño solo se escuchaban los gemidos de Keisuke, los quejidos de Chifuyu cuando Baji lo agarraba muy fuerte del pelo y el golpeteo constante que hacía la boca de Chifuyu contra las bolas de Baji.

Chifuyu hacia garganta profunda, recibía el pene de más de veinticuatro centímetros sin reflejos y eso a Baji, durante toda su relación, le había encantado siempre.

Y es que el mocoso era tan bueno con la boca, que fácilmente podría considerarse un don.

Siempre le había encantado como recorría su pene con su lengua, larga y cálida, como succionaba sus bolas para después pasar a besar cada parte de su pene.

Siempre comenzaba con el prepucio, metiéndoselo a la boca, ahuecándolo en sus mejillas haciendo que se note, succionándolo con fuerza.

Después se iba al tronco, siempre le daba besitos a todo su pene, besando sus venas sobresalientes, succionando pequeñas partes. Para después envolverlo con su lengua, chupando de arriba hacia abajo.

Cuando quería meter todo su pene, algunas veces, aunque casi nunca ya que sí podía meter los veinticuatro a su boca, lo masturbaba. Es decir, metía todo lo que podía a su boca, y lo restante, lo que no podía meter a su boca, lo masturbaba. De arriba hacia abajo.

Ah, como amaba a ese mocoso de mierda rubio bueno para las gargantas profundas.

Estaban tan metidos en su burbuja, que no escucharon cuando alguien abrió la puerta, hasta que oyeron como la persona entraba a uno de los cubículos para hablar por teléfono.

Baji se tensó, haciendo las estocadas más fuertes en la garganta de Chifuyu, ahogando sus gemidos poniendo su mano en su boca.

—M-mierda. — Gimió Baji contra su palma, despacio. Que alguien los descubriera lo hacía más excitante.

Haciendo el agarre en el pelo de Chifuyu más fuerte, embistió más seguido y rápido tratando de no hacer ruido, sus ojos estaban fuertemente cerrados y los colmillos que tenían apresados sus labios se hundieron con más fuerza, haciendo que sangre un poco.

Hasta que sintió como llegaba a su límite, gimió un poquito más alto, sus estocadas fuertes y rápidas chocando contra la garganta de Chifuyu, como se sentía tan cálido y apretado.

Con ese pensamiento, sé corrió. Llenando la boca de Chifuyu con su semen.

Chifuyu se tragó todo, no había desperdiciado nada y tampoco quería. Lamió de arriba hacía abajo, resaltando las venas, chupando el prepucio con fuerza sacándole un corto pero más o menos fuerte gemido a Keisuke. Dio besitos por toda la longitud, hasta que sintió un agarre que lo tiró hacia arriba.

Se iba a quejar, pero vio como Baji alzaba su mano derecha y ponía su dedo índice en medio de sus labios haciendo una seña para que guarde silencio.

Asintió pero con duda, levantando una ceja.

Hasta que escuchó como alguien salía del cubículo de unos dos puestos más allá. Se tensó, se había olvidado por completo de ese detalle por estar tragando el orgasmo de Baji.

—¡Vete a la mierda papá, este era mi día, me importa un culo si tu hija se cayó de un árbol gigante y ahora estás en el hospital, te lo había dicho hace semanas! —Vaya, parece que el chico tenía problemas—. ¡Sabes qué, tú y tu hija que no soporto me la pueden chupar, no te quiero aquí nunca más, y no me llames más! ¡Vete a la mierda!

Se miraron asombrados y escucharon como el chico salía golpeando la puerta, aparentemente enojado.

—Vaya, ese chico si que la debe estar pasando mal. —Dijo Chifuyu con la voz rasposa.

—Ni que lo digas.

Se miraron, analizando la situación.

Baji tenía el pantalón abajo, sentado en la taza del baño. Su pene estaba a la vista, y Chifuyu solo podía pensar en cuanto lo quería chupar de nuevo y montarlo.

Chifuyu estaba parado, con una ereccion entre sus piernas, solo que con el pantalón no se podía ver mucho ya que era un mom, sus rodillas doliendo un poco, el sutil maquillaje corrido y el pelo despeinado. No era muy difícil verlo y pensar en lo que estaba haciendo.

Sus miradas lo decían todo.

Pero no ahora, ni ahí.

Después se llamarían.

Siempre se llamaban, siempre volvían a ellos.

Porque Chifuyu y Baji eran ex novios, que todavía se tenían ganas.