¡Confiésate, A-Yuan! »... Zhuiling.

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A Lan Sizhui le gustaba Jin Ling, aunque lo más acertado a sus sentimientos era "Enamoramiento incondicional". Esto no era precisamente un secreto, de hecho tanto la mayoría de las personas Gusu y los amigos de otras sectas cercanos a él lo sabían

Era imposible no notarlo si veías con tus propios ojos como alguien tan tranquilo y bien educado se volvía un histérico manojo de nervios junto al joven Jin, ¡No era sutil en lo absoluto! En su defensa, no acostumbraba a mentir por lo que se le dificultaba ocultarlo y no pasar vergüenza

Incluso Wei Wuxian le dijo una vez "Ni yo me avergüenzo tanto" y eso era decir mucho teniendo en cuenta a la persona

En fin era lo que ocurría y aunque muchas discípulas se sintieron tristes por un tiempo al no tener oportunidad, se alegraron por Sizhui quien, contra todo pronóstico, le dedicó su corazón a alguien que no fuera sus padres

Bueno, a pesar de ser lo suficientemente obvio hasta el punto de tenerlo tallado en la cara, sabían de una persona que parecía ignorante a esto; el propio Jin Ling

O al menos esa era la creencia pública. Muy alejada a la realidad a decir verdad

"¿Por qué Lan Sizhui no se confiesa aún?"

Vamos denle un poco de crédito, cualquiera con un par de ojos y oídos podía notar lo extraño en su comportamiento, recién había dado una excusa patética como "Hanguang-jun me está llamando" para salir de la habitación de JingYi

Primero que todo ¡Lan WangJin ni siquiera estaba cerca ¿Cómo diablos iba a saber algo así?! Segundo; la débil excusa fue pronunciada entre miles de murmullo lleno de tartamudeos que casi no los dejó entender

Además el chico literalmente parecía un cachorro alegre estando a su lado, ¿O tal vez igual a un conejo de cola esponjosa? Cómo fuera, el punto era que se veía alegre, y en su opinión... ¡Estaba más que orgulloso de eso!

¡Él, Jin RuLan, había cautivado el corazón de Sizhui, el mejor partido de todas las jodidas sectas! ¡Y quien le gustaba desde un tiempo! Eso era tener buena fortuna

O eso creía pero... ¿Por qué aún no le acercaba y confesaba? ¿Acaso se estaba equivocado?

Actualmente sólo tenía una forma de confirmarlo. Cruzándose de brazos miró a JingYi el cual tenía toda la atención puesta en devorar los bollos de semillas de loto - Oye, JingYi -

Este, por mero impulso y nada de atención respondió al llamado - ¿Qué pasa? -

- ¿Le gusto a Sizhui? -

- Si - El camino del bollo se detuvo al volver a la realidad, sintió había que metido la pata hasta el fondo, pero no sabía en concreto el por qué - Espera ¿Cuál era la pregunta? -

- ¿Le gusto a Lan Sizhui? -

Luciendo completamente horrorizado llevó una mano a su pecho retrocediendo un poco - ¡Por supuesto que no! ¿¡Qué él gusta de ti!? ¿¡Qué tan presumido eres para pensar eso!? -

Una de las cejas de Jin Ling tembló con un tic - ¡Tú acabas de decirlo! -

- ¡No es así! ¿¡Por qué lo diría!? -

- ¡Lo hiciste cuando te pregunté! -

- ¡Te aseguro que recordaría haber traicionado a mi mejor amigo! -