You are a monster from hell

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Verano, 1996

Ruta 145

El ruido de las llantas rodando contra el pavimento de la carretera, la música en la radio, un sol ardiente de 32 grados atravesando los cristales de la van, ya habían pasado al menos tres climas diferentes en las últimas dos horas de viaje, se dirigían Telluride, un famoso pueblo de Colorado, si seguían con el ritmo llevado hasta ahora estarían ahí en al menos una hora y media más; por ahora tienen que sobrevivir el calor con sodas frías sabor cereza, ventanas abiertas a tope y claro el convivir con más personas que ellos mismos en un espacio cerrado.

Habían sobrevivido a las constantes paradas de Niall para ir al baño, la poca resistencia al frio de Esther, al sarcasmo de Nick, a los mareos de Gibson, a las mil bolsas de papitas a lo largo de la van por culpa de Alexa, a los momentos de mal humor de Zayn, a la insistencia de Liam en que pusieran Radiohead o a Modest Mouse y no a la basura del radio, a los mil cambios de asiento de Jennifer, a la manía de Louis de hablar cada que se aburria (ni siquiera hablaba de algo conciso), a la paranoia de Fionn por algún accidente de tránsito, incluso habían sobrevivido viajar con un hombre de 65 años en un trayecto de carretera de más de diez horas.

Nadie en su sano juicio decidiría juntar a su pequeño grupo de amigos dejando invitar a otros amigos a un road trip por pueblitos pintorescos de Estados Unidos; menos rentar una van de mamá que supuestamente es para viajar al proveedor que ofreciera el mejor precio sin importar cuan dudosa sea su procedencia, esto último se lo debían a Niall y Louis; obviamente únicamente se le ocurriría a un grupo de universitarios jóvenes.

No ha habido muchas novedades, la dinámica se mantiene en todo a lo que han tenido que sobrevivir, ventanas abiertas, somnolencia, conductores asignados, música de fondo, por ahora quizá lo más interesante es la conversación de Alexa.

- ¿Mick Jagger?

- Bueno es lo que decían algunas chicas preparatorianas y las amigas de mi madre, bueno según ellas.

- No – dice ruidosamente- aunque si tienes la pinta de haber sido apuesto, incluso ahora se ve muy bien Sr. S, ¿Cuántos años tiene? ¿Cómo 50? – se escucha la risa del Sr. S, es primorosa algo grave y un poco nasal, Alexa está completamente segura que este hombre debió haber sido una belleza en su juventud.

- Eres una atrevida, ¿cómo se te ocurre preguntarle eso a alguien mayor? – El Sr. S exclama fingiendo indignación – Eso no se pregunta, pero oficialmente deje de contar a los 61, cualquier cosa que haya ocurrido después está fuera de tiempo.

La cuestión es que el Sr. S es agradable, es un conocedor del mundo, calmado, simplemente encantador, hace dos años decidió volver a la universidad a estudiar biología, todos a excepción de Esther, Jennifer y Gibson estudiaban algo relacionado a las ciencias.

Volviendo con Alexa, ella era una chica de piel pálida y ojos avivados, estudia genética y biotecnología junto con Louis; el chico menudo de ojos azules, pelo plumoso y camisas de Adidas, ambos se conocieron en un blog de ciencia en medio de una discusión con un Darwinista puritano, tiempo después se enterarían que ese Darwinista era Liam; un estudiante de Biología en su etapa más pedante, por suerte eso es cosa del pasado, después de unas cuantas humillaciones por internet, unas salidas entre los tres y voluntad de cambio es capaz de controlar ese sentimiento de "es que solo yo conozco esto", sigue trabajando en ello.

Fionn, un neoyorquino a mucha honra con quizá un poco de hipocondría y tendencias paranoicas, estudiante de física teórica, hablaba con Esther; estudiante de filosofía, era una chica tranquila amante de los gatos, de temperamento dulce, parecía una muñeca francesa con esos ojos profundos y su cabello oscuro, también era novia de Liam, una pareja un poco peculiar pero linda.