ALASKA

ALASKA 2

-Hola...-

Alfred sonrió al ver llegar de nuevo a Rusia, miró al bebé que tenia en brazos quien señaló al ruso enseguida.

-¡Hola!, si bebé, regresó tu desobligado papá-

-América, no le hables mal de mi a Alaska...no le creas a Alfred- se acerca el albino a cargar al bebé -Solo salí un tiempo tratando de buscarte una madre adecuada, pero no halle a nadie suficientemente fuerte para cuidar de él, cada dia es mas difícil- se sienta en el sillón y coloca al bebé en sus piernas mimandolo.

-Suponia que te seria fácil hallar una mujer que te ayude a criar a Alaska ahora que estas mas estable, me equivoque...- Alfred acerca hacia el ruso la cunita móvil del niño y este se emociona al ver sus juguetes dentro de el.

-Se ha vuelto muy grande, detesto admitir que has hecho un excelente trabajo-

-Eso es obvio, ¡elegiste al mejor!- rie mientras se sienta a un costado de él tomando la manita del bebé.

Iván lucia muy feliz estando cerca de su hijo quien no paraba de reir con los gestos de Alfred, no queria creerlo, pero podia ver el amor que ya se tenian esos dos.

Rusia iba a proponerle algo a Alfred pero un peculiar ramo de flores silvestres frescas llamó su atención. Acunó a Alaska a su pecho despacio.

-¿Te estas viendo con alguien?-

El americano se puso colorado y desvió la vista arrugando los labios -Mmm...¿por que piensas eso?-

-Hay un enorme ramo de flores ...estoy seguro que quiere follarte-

Alfred le dio un zape a Iván- ¿Y que si es así?-

-Mm... no sabia que te dejaras de manera tan fácil, ¿que ejemplo le estas dando a nuestro hijo?-

-Soy una madre sustituta, se que tarde o temprano te lo llevaras, pienso que es tiempo de que te lleves a Alaska contigo, por lo menos mientras estas aqui-

El mayor entrecierra los ojos mirando a Alfred como si lo incriminara -Piensas tener sexo con la persona que te dio las flores, aqui, que descaro- amorosea al pequeño.

-Si...- mira a los ojos a Iván y este se queda callado por unos segundos, siendo algo incómodo hasta que el ruso se levantó del sillón.

-El bebé no puede saber que su madre hace esas cosas con otros hombre hehe...me lo llevare hoy-

-¡Cuidalo bien Iván! ¡No vayas a beber!, Alaska ya quiere pararse...-

-Esta bien, soy responsable, lamento haberte dado esta carga-

-No es una carga, solo quiero darle una oportunidad a alguien, a diferencia de ti, yo tengo un candidato perfecto para ser el papá del bebé- dice bromeando el estadounidense.

El ruso solo sonrie y empieza a recoger las cosas del bebé, Alfred le ayuda y le arma una pequeña maleta para entregarsela al mayor.

-Regresaré por lo que falta...- arropa al bebé en su hombro y observa al americano una vez mas.

Alfred se le quedo mirando, Iván tenia el mismo semblante de desasociego que hace meses cuando le entregó al bebé, la diferencia es que ahora le tenia mucho amor a Alaska, pero por el bien de los tres debian ser las cosas asi.

-Alfred...si yo te regalara cientos de flores ¿me dejarias tener sexo contigo tambien?-

El américano arrugó la nariz y la ceja -¡Largo!- le cerró de un portazo la puerta y se quedo pegado a esta un momento.

-Asi no me regales nada imbecil....lo haria, maldicion- apretó los labios y miró las flores silvestres para despues ir por el número de aquella persona.

Iván suspiró y se alejó con el pequeño en brazos- El era el mejor candidato para ser tu mamá-

-Ma?-

El ruso sonrió y se apresuró a irse.