—Jodido día de mierda—Exclamó un peliazul mientras pateaba continuamente una pequeña piedra del piso con sus manos dentro de aquellos pantalones holgados que portaba.
Aquél día le estaba yendo de mal en peor.
Estaría en la comodidad de su habitación, si no fuera por su madre exigiéndole salir a “socializar” con personas de su edad. Que tontería, esa palabra no existía en su diccionario.
Deseaba llegar lo más pronto posible a su hogar, el viento ya amenazaba con soltar una fuerte lluvia y no había nada con que cubrirse.
—¿Qué?—Colocó la palma de su mano hacía arriba, intentando creer que aquella gota de agua que había caído en su rostro solo era parte de su imaginación—Oh no—Varias gotas comenzaron a caer de manera continua, logrando que kim empezara a correr en busca de un refugio.
La lluvia comenzaba a tornarse más fuerte cada vez, y lo único que había obtenido taehyung para tapar su cabeza, era una bolsa de plástico—¡Genial, estoy empapado!—Después de eso, una ola de vulgaridades fue desatada desde la boca del joven peliazul.
Aquello solo logro que las mujeres mayores en dentro de sus casas le tapasen los oídos a sus hijos para que no le oyesen.
—¡Ya nada puede salir peor!—Gritó y un relámpago resonó con potencia. Bien dicen que aquella frase solo atraía cosas peores—¡Lo siento, lo decía de broma!—Volvió a decirle a la nada, tratando de que los relámpagos cesaran.
Otro relámpago resonó, y taehyung pensó que ya había muerto cuando cayó al suelo al tropezar con algo que desconocía—¿Sigo vivo?—Tocó con rapidez todo su cuerpo mojado, en afirmación a lo que preguntaba—¡Ni eso puedes hacer bien vida, sigo vivo!—Gritó como todo un demente al cielo, y como respuesta, otro relámpago se escuchó.
«Bien, me callaré» pensó taehyung al escuchar aquel resonante trueno.
Pero, todo lo malo que había pasado en el transcurso a su hogar se esfumó justo cuando notó aquel objeto con el que tropezó.
Era un vídeojuego. Oh, cuanto los amaba kim.
Estaba a poco de comenzar a festejar por aquella suerte que tenía, hasta que su madre abrió la puerta, logrando que cayera de espaldas contra el suelo de su hogar.
—¡Mira como estas! ¡Muévete, te resfríaras!—La mujer le tomó por el cuello de su camiseta, tratando de levantarle del suelo.
—Pero.. ¡esto es tu culpa!—Reclamó como todo un chiquillo—¡Tú me obligaste a salir de la comodidad de mi cama!—Continuó así hasta que su madre le obligó a quitarse las prendas mojadas.
—Muy bien, aquí vamos—Frotó sus manos en espera de que aquel juego cargara. Estaba sentado frente a su televisión, encima de su cama, y con el control en manos.
Cuando al fin cargó, taehyung pasó horas jugando.
Sus dedos se movían de manera rápida y ágil sobre los botones del control, era simple y sin tanto rodeo, pero kim se había enamorado del vídeojuego. Los personajes eran tan tiernos a su parecer.
Continuó así, hasta que logró llegar al nivel número cien en menos de un día.
—¿Qué es eso?—Cuestionó, en la pantalla se había colocado un mensaje—“Felicidades por alcanzar el nivel cien, de recompensa recibirás algo que no te esperarás”—Leyó y arqueó una ceja ante su confusión con aquella nota.
«Oh, rayos»
Solo un gran brillo se logró apreciar desde afuera de la habitación del chico antes de que desapareciera.
Esto traería tantas locuras en un futuro.
Próximamente...
voy a estar publicando las historias que he querido publicar desde hace mucho, pero que no he podido por falta de tiempo.pronto actualizaré mis demás historias.
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Play Game • kooktae
Fanfiction𝗞𝗢𝗢𝗞𝗧𝗔𝗘| ♡⃕ . Kim taehyung es un joven que ama los videojuegos. Y un día, se encontró uno fuera de su hogar. Pasaba horas jugándolo, era interesante. Pero, al llegar al nivel número cien, fue absorbido por este, llevándole a un mundo totalmen...