[JISOO]
-¡Ya llegué a casa! - no sé por qué avisaba si mis padres no estaban preocupados de mi llegada, podría no llegar en todo un día y no lo notarían...
Al llegar a mi cuarto, me recosté en mi cama, me encantaba esta parte del día, era mi actividad favorita, aunque hasta hace un tiempo mi cama era más bien mi refugio.
*dos años antes*
-ahí viene la mono, corran!!
-dejen de decirme mono, soy una persona como ustedes
-uhuh ah ah, la mono aprendió a hablar, pero no se le ha quitado lo feaaa
Sentía unas profundas ganas de llorar y escapar lo más lejos posible, pero no me iba a mostrar débil en frente de la gente. Así que solo voy a seguir mi camino, me quedaban aún unas varias cuadras hasta llegar a mi casa.
Estaba caminando, con mis audífonos ignorando todo lo que me decían hasta que sentí un golpe en la cara, ni siquiera quise mirar a las personas, pero sentí como corrían riéndose, cuando levanto la miraba me doy cuenta de que era una banana, que, con su parte más dura me había causado una marca en la mejilla, me sentí humillada.
-desearía estar sola en este mundo, o en el que sea, pero quiero estar en paz. - inevitablemente caía una lagrima por mi mejilla
Mis pensamientos fueron interrumpidos por una voz, sacándome por completo de mi absorto estado
-Jisoo, necesito que hagas los deberes de la casa, ya que estoy muy ocupada con un caso. – dijo mi madre sin ni siquiera mirarme
-Está bien mamá, yo los haré. – mi madre se fue y yo me sequé la lágrima que recorría mi mejilla al igual que en mi recuerdo, creo que siempre existirá un pequeño dolor al pensar que todo pudo haberse detenido ahí.
Fue un tiempo difícil, apenas tenía 15 años, por suerte no siempre estuve sola, y eso fue crucial para poder seguir positiva ante esa situación, por eso me gusta apoyar y proteger a la gente que quiero, o a las personas que veo indefensas, nadie merece pasar por ese tipo de cosas. Jennie me dice que parezco una madre, pero a mí me gusta serlo, significa que puede confiar en mi para lo que sea.
*al día siguiente en la escuela*
Estábamos en horas de clases pero no me sentía bien, mi estómago dolía, creo que la comida tailandesa de ayer no me hizo muy bien, así que pedí permiso para ir a enfermería, cuando llegué al lugar me recosté en una camilla y me taparon con una manta, para mantenerme en calor.
-Heeeey! Jisoo, por fin te encuentro! Me tenías preocupada, te había visto en la escuela, pero no me has hablado en todo este tiempo. Tengo que verte débil para atraparte y hablar jajaja
-Hola Rosie!, ¿No deberías estar en clases? – Rosé, mi antigua compañera de salón, ella fue una de las pocas personas que sin darse cuenta me ayudo profundamente, ella es una excelente persona probablemente podríamos haber sido más amigas, pero sus amigas eran el problema, ellas eran parte de quienes me molestaban durante el año pasado, nunca le quise contar, así como tampoco quería decirle que era evidente que esas "amigas" solo la querían porque Rosie es de las alumnas más inteligentes de esta escuela.
-la verdad es que si, pero yo ya acabé con todos mis ejercicios de matemáticas, estaban realmente fáciles, así que el profesor me dejó salir a tomar aire, cuando salí vi que venías entrando a enfermería y corrí para alcanzarte.
-wow no esperaba menos del cerebrito de la escuela jajaja, te he extrañado Rosé. – le decía mientras me interrumpió
-y yo a ti chu! No sé por qué te cambiaste de salón, me encantaba pasar tiempo contigo, aunque te aburrieras de mi por estar estudiando, cuéntame ¿qué pasó? ¿Por qué ya no te acercas a mi salón?
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Bajo el velo- CHAELISA
Teen FictionLisa, una joven de 17 años quien está dispuesta a que su vida sea pura diversión pero, ¿estará lista para todo lo que se le viene junto a sus 3 mejores amigas?, a veces la vida nos lleva por caminos los cuales nunca imaginamos. -Chaelisa pareja pri...