Parte 1

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-¿Sabes qué harías si este fuera tu ultimo día vivo?

Pregunto el niño de cabellos negros sin apartar la vista del horizonte que se hundía en un anaranjado atardecer.

-Yo creo que no haría nada.

Respondió tras una breve pausa girándose hacia mí.

CAPITULO 1:

-¡Grace! Espabila hombre que te has vuelto a quedar en babia.

-¿Eh? Oh... Hola Erick... ¿Qué toca ahora? Es martes así que Historia ¿No?

-Irse a casa idiota acaba de sonar el timbre de salida

-Ooooh...

El muchacho rubio se queda clavado en el suelo mirando a su compañero que se estiraba sobre el pupitre recién despertado de su letargo y con cara de que volvería a su mundo en cualquier momento.

-Oye Grace ¿sigues sin pegar ojo?

-sep

-podrías probar a...

-Erick ¿Sabías que en Japón antiguamente se cortaban el dedo meñique para regalárselo a sus maridos como muestra de fidelidad? Es bonito pensar que eran capaces de llegar de alcanzar esos límites por cuidar su matrimonio pero es un poco bizarro y estúpido

-Bueno si... Da igual te espero en la entrada si eso hoy podríamos ir a...

-sabes que por mi si- corta el muchacho e cabello despeinado y negro, ojos negros, huecos como los de una muñeca y con un marco en forma de profundas ojeras -Sabes que es de los pocos momentos en los que puedo desahogarme.

Dos muchachos, cada una con 17 sobre su espalda, uno de mirada cautivadora de color azul y otro con una penumbra negra en los ojos.

Los jóvenes caminaban juntos hacia la casa del segundo, un apartamento de de cuatro habitaciones contando el baño, cocina y salón, entran. Grace abre la puerta y deja la mochila arrojada en el suelo del salón mientras tanto Erick, siendo mas cuidadoso la deja reposando en una esquina de la estancia.

-Grace últimamente estas mas distraído en clase y no quiero que descuides tanto tus estudios, eres un buen estudiante no se porque...

No le da tiempo a terminar su "reprimenda" debido al que el azabache ya se encuentra inclinándose sobre el juntando sus labios.

- No necesito tus consejos ni que te preocupes solo que estés hay cuando te necesite y punto-Susurra en un tono suave al oído izquierdo de Erick.

- Sabes que siempre estaré hay para ti- responde sonrojándose.

Lentamente el azabache comienza a reclinar sobre el amplio sofá de color blanco al rubio desabrochando la camisa con el estampado de el instituto al que asistían los dos, cuando hubo terminado de beso suavemente en el cuello al rubio que comenzaba a notar cierta "presión" en sus pantalones al que a Gale no se le paso por alto.

-¿Tan pronto?

- No es mi culpa que lo hagas tan bien-Dice con una sonrisa.

-Tsck-Resopla antes de besarle de nuevo a la vez que sus manos masajeaban la entrepierna de este.

-Gra-Grace-Murmura Erick a la vez que alza su mano derecha para acariciar los cabellos negras del el contrario pero antes de llegar a alcanzarlos es detenido por este.

-Sabes que no me gusta que hagas esos sonidos tan ridículos y esas bobadas, no somos pareja.

-Perdona... Me deje llevar

La tarde cae sobre la ciudad bañándola de ámbar, la gente apura los últimos momentos de luz para rematar las tareas y recados, los niños corren hacia la llamada del hogar, mientras dos jóvenes en un apartamento se unen, una relación, si se puede llamar así, que no ha salido a la luz. Fría y calculada solo se basa en el deseo carnal y el anhelo de un cuerpo cálido en el que apoyarse

-Grace... ¿te sientes mejor?-Pregunta mientras se abrocha la camisa sin llegar a mirar la al contrario que se hallaba sentado al otro lado con solo la ropa interior puesta.

-No, supongo que me estoy comenzando ha aburrir de ti... o quizás es que eres demasiado simple, no consigo sentir nada por ti-Dice con un tono monótono.

Se hace el silencio en la estancia mientras Erick contempla la espalda de Grace.

-Ósea ¿Qué ya esta?

-Si, puedes irte ya

El joven recoge su mochila y sale del apartamento sin mediar palabra con el otro.

Una ciudad grande puede ser hermosa, si, hermosa pero fría, solitaria, vacía y sobre esas calles vacías, frías y solitarias caminaba sin rumbo un joven de cabellos dorados, ojos azules y sin la esencia que habría cautivado a cualquiera que les hubiese visto antes.

-Soy un idiota...

Dice limpiándose con la manga un lágrima que se escapa de ese abismo azul.

-¿De verdad? ¿Te das cuenta ahora de eso?

El joven sorprendido alza la vista y ve a una joven de cabellos blancos que caían a lo largo sobre su espalda

-¿Tama?-Dice con un tono débil el joven contemplando a la chica que se situaba enfrente de el

-La misma... Erick ¿Ha pasado algo?

-N-no bueno... Yo...

Bueno... Primer intento de historia con continuación*risa nerviosa*muchas gracias a todos los que habéis soportado hasta el final del primer capitulo (si es muy horrible lo siento mucho pero es mi primera historia en plan "serio" ).Gracias a todas las personas que me han motivado a comenzar a publicar y a Grace por tener tan mala baba (me veo obligado a darle las gracias a Pretzell y a Panda-kun por ser los primeros en decir que les gustaba la mala baba de Grace) espero no haberos causado demasiados vómitos y espero mejorar con el tiempo ^3^

I'm HereDonde viven las historias. Descúbrelo ahora