Park Jimin es hijo de dos grandes superhéroes y algún día él será como ellos, combatiendo al mal y salvando al mundo.
Solo que había un pequeño problema...
Jimin no tenía súper poderes.
Adaptación de la película de Disney "Súper escuela de héroes"...
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Jimin cuando vio a Jennie en la parada tomó aire y se aferró a la caja en sus manos, se dio apoyo y fue directo hacia su mejor amiga.
-Hola- saludo tímido. Jennie solo lo vio de reojo y volvió su vista al frente como si no hubiera escuchado nada.- Jennie enserio lo siento tanto, se que en estos momentos has de estar pensando en cómo matarme con una de tus plantas venenosas- Jennie sonrió ya que su amigo estaba en lo correcto- créeme tengo una buena justificación, pero antes tengo algo para compensarte.
Jennie alzó una ceja, no había nada que pudiera compensar lo sucedido.
Jimin extiende la caja y la abre mostrando su interior- Son brownies, tus favoritos.
Ok, excepto eso.
Jennie volteo realmente interesada al ver el manjar de chocolate.
-Les dije a mis padres si podían hacerlo ya que era un regalo para ti y ellos aceptaron, no les importo desvelarse para hacerte tu postre favorito y a mi tampoco me importó desvelarme ayudándolos, por cierto aun te debo tu cena.
-¿Tienen cacahuate?- preguntó como no queriendo la cosa.
-Y almendra.- respondió con un tono cantarín en su voz.
De un momento a otro ya no tenía la caja en sus manos, sino que se encontraba en las de Jennie mientras degustaba uno de los cuadritos de chocolate.
-Ahora- habló Jennie con la boca llena del pastelito- ¿Cual es tu excusa barata?
Jimin sonrió mostrando sus ojitos de alcancía- Ayer fue Lisa a mi casa.
Jennie alzó su ceja. ¿Enserio me dejó plantada por aquella buitre?
-Fue ayudarme con asesorías, se supone que me las daría hoy pero al final no iba a poder y pues decidió ir ayer a mi casa de sorpresa y mis padres la invitaron a cenar.-explicó Jimin.
-¿Por qué no simplemente me llamaste o me mandaste mensajes?
-Lo iba a hacer pero Lisa me quitó el celular diciendo "nada de teléfonos en las asesorías" y luego ya se me olvido avisarte.
Maldita bruja. Pensó la castaña mientras mantenía una sonrisa a su amigo.
-Y no solo eso, ayer la acompañé a su casa y ¿adivina que?- Mencionó Jimin realmente emocionado.
-Jimin, controlo plantas no leo mentes- puntualizó la castaña.
-Cierto, cierto, lo siento- se tranquilizo para volver hablar emocionado a su amiga- Voy a ir al baile de bienvenida con Lisa- La sonrisa de la castaña se congeló.
Ay no.
-¿Puedes creerlo? ¡Yo! ¡Un novato! ¡Yendo a la fiesta acompañado de la chica más bonita de la escuela!
