🍰| Capitulo Uno

370 48 12
                                    

No es un secreto que Yeonjun no era el chico más social en la universidad, pero, ¿por qué? Los alumnos nuevos se preguntaban al ingresar, el chico tenía todo para ser el típico popular fuck boy de los clichés. Un rostro perfecto, un cuerpo fitness, espléndidamente hábil para el equipo de natación. ¿Cual es el problema entonces? Fácil, a Yeonjun le desagrada cualquier tipo de persona o cercanía a excepción de su pequeño novio que tanto amaba. Choi Beomgyu había escuchado tantas formas de decir te amo en el mundo pero la de su novio era simplemente para indignarse. Por suerte, cierto castaño es la cosa más dulce que solo puede atinar a reírse de lo borde que es su novio.

-¡Yeonjun compañero mío, muy buenos días!- Saludó Félix con ciertas energías que irritaban al pelinegro, se sentó justo detrás del pupitre de Yeonjun quien le ignoró olímpicamente colocándose sus audífonos.

-¡Agh! ¡Ese bastardo hijo de...!

-¿Dijiste algo?- Interrumpió bruscamente dándose la vuelta para mirarla cuando le escuchó decir algo, Félix trago saliva y negando rápidamente.

-¡No, no! Dije que la maestra es una bastarda porque nos encargo una exposición y no pude hacerla

-Te pregunte si dijiste algo, no quería que me contaras toda tu vida, que por cierto no me importa una mierda

Y sin más se giro levemente para colocarse los audífonos, faltaban aproximadamente diez minutos para que comenzara la clase. Maldijo por lo bajo ya que el pequeño mocoso de su novio era un irresponsable que dormía mucho, los alumnos restantes iban llegabando y Yeonjun solo se dedicaba a verlos con fastidio, el reloj se consumía rápidamente para su mala suerte. Por ultimo, la maestra hizo presencia en la clase sentándose en su escritorio, notó que hacía ademanes dirigiéndose a él así que se quito los auriculares exasperado.

-¿Que?

-La clase a comenzado, Yeonjun. Guarde esos audífonos o se los quito ahora mismo, ¿Entiende? Escuche sus canciones depresivas después

-Faltan dos minutos para que la clase comience- Le respondió señalando el reloj, la profesora frunció el ceño ante su actitud. Le había advertido que una más y sería expulsado- Así que hasta entonces déjeme escuchar las malditas porquerías que yo quiera, por favor- Añadió sin importarle en lo más mínimo con una falsa sonrisa de amabilidad adornando su rostro, se colocó los audífonos en espera de que Beomgyu hiciera acto de presencia en el aula.

Y tal como esperaba, el entro agitado, de inmediato la vio buscar su pupitre que ya era ocupado por Félix.

-¿Beomgyu, quieres sentarte aquí?- Le pregunto Félix, el rubio negó eufóricamente ante la pregunta.

-¡Para nada, Lixie! Puedes quedarte con mi asiento, no tengo problemas por eso- Le dijo con amabilidad caminando del lado opuesto a donde estaba Yeonjun, lamentablemente sentándose atrás de Jeongin quien según el pelinegro estaba seguro de que le coqueteaba.

Observo en la dirección en la que se dirigía así que tomo su manita sin importarle nada, rápidamente miro de manera fugaz que la maestra no estuviera presenciando la escena y con suerte no estaba prestando atención. Ella estaba siendo sobornada con comida para que no pusiera trabajo.

-Sientate aquí, Beomgyu

-Yeon bebe, Lixie ya esta ahí. ¡No te preocupes! Estaré sentado detrás de Jeongin hyung- Trato de convencerle señalando al chico peliazul quien le saludo con entusiasmo cuando notó la mirada de Beomgyu sobre él.

Se giró observando a Félix y sin ninguna pizca de amabilidad le soltó un:

-Largate

-Claro, no tengo problema... Con eso- Le respondió colocándose de pie para tomar su mochila, Beomgyu negó indicándole que se sentara.

-¡Yeon! Deja que Lixie se siente, ni siquiera estaré tan lejos- Beomgyu respondió con un sucio chantaje de besitos en la barbilla, Yeonjun frunció el ceño enojado cuando el mocoso de su novio se soltó del agarre yéndose.

Tomó su propia mochila colgándola en su hombro y después corrió para alcanzar a Beomgyu tomándole de la manito de nuevo. Se sentó detrás de Jeongin e hizo que Beomgyu se sentara en su regazo cosa que lo hizo sonrojar de manera adorable. Jeongin soltó un quejido cuando "Sin querer" Yeonjun le metió una patada por debajo de los pupitres.

-¿Esta cómodo, Beomgyu?

Beomgyu se sonrojo nuevamente ante la voz de la profesora y rápidamente se bajo del regazo de su novio sentándose en el pupitre de atrás.

-Bien, comenzaremos con la clase, saquen su libro de cálculo en la página veinticuatro

•🍰 ❤

-¡Y entonces le dije a mi mamá que yo no quería ese helado de pistache y me dijo que desde ahora tu debías comprarme todos los helados porque ella ya no lo haría más! ¿¡Puedes creerlo!?- Se quejo el rubiecito lloriqueando mientras Yeonjun lo miraba atento a lo que decía, ¿Acaso Beomgyu fue actor de dramas en otra vida o que?

-No uses excusas, mejor dime directamente que quieres acabar con mi cartera

Beomgyu lo miro con sus ojitos llenos de Indignación.

-¡No es excusa! Pero esta bien, quiero un helado de pistache en la salida, Yeon tacaño -Dijo esbozando un adorable puchero, Yeonjun frunció el ceño indignado también ante sus palabras- Dame un besito, soy adorable

El nadador no dudo en complacer al pequeño mocoso malcriado, soltó un gruñido antes de depositar un pequeño y corto besito en sus suaves labios. Beomgyu soltó una risita al ver directamente el rostro de su novio como si tuviera algo.

-¿De que te ríes, mocoso?

-¡Te pusiste rojo, Yeon!- Habló entre pequeñas risas para luego después de unos segundos enfadarse tiernamente ante el apodo, le dio un leve manotazo en el pecho al pelinegro- No puedes decirme mocoso, tienes que llenarme de palabras bonitas y amor

Yeonjun se rió con ganas tomando la manita del rubio y entrelazando sus dedos.

-¡Aigoo! ¡Soy como un bebe! ¡Si no me das atención lloro!- Siguió quejándose entre lloriqueos y se soltó de las manos entrelazadas.

-Yo te doy atención- Se apresuro a decir mientras fruncía el ceño por quinta vez en el día le tomo la manita no muy contenta con que la retirara.

-Entonces dime algo bonito

-Me caes menos mal que todos en esta horrorosa escuela

-¡Yeon bebe! Eres adorable, también te amo- Soltó un chillido tirándose encima de él para atacarlo con besitos y abrazos que claramente el contrario recibió encantado.

Paso sus manos por la cintura de su novio correspondiendo a su cálido abrazo, algunos chicos los miraban celosos, otra con admiración. Las chicas miraban con burla y otras con aburrimiento.

¿Acaso su relación era muy extraña?

Rude Boy | YeongyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora