Parte 56

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POV.ATENEA

Ha pasado tres meses desde que empecé mi vida de cero, por así decirlo 

estoy en mi mansión en Sorrento, Italia, exacto aún sigo aquí pero que puedo hacer, al menos mis padres están en Arezzo

Hoy iré a visitar un amigo que es dueño de un restaurante y está asociado con mi padre con los vinos

Llevo puesto un conjunto negro con tacones de aguja y un bolso de color beige, mi cabello lo deje suelto y aun sigo con el color blanco,

Voy en mi jeep de color negro, falta poco para llegar y ver a Jean Carlos

Al estacionar en frente del restaurante me recibe un tipo en traje rojo me ayuda a bajar y se lleva el auto para otro lugar

Entro como siempre con la frente en alto, paso seguro, largo y elegante

Llego a la mesa que me dijeron donde se encontraba y veo a una joven que está de espalda con un cabello castaño casi rojo y a su lado un hombre fuerte y solo con camisa de traje pero sin su chaleco y otros cuatros hombres más

-buenas tardes - digo amablemente llamando la atención de los presentes

-Elizabeth cuanto tiempo! - dice Jean Carlos

-querido - nos damos dos besos en cada mejilla

Con una sonrisa nos separamos y comienzo a saludar a los cuatro hombres hasta llegar a la pareja

Saludo primero a la chica que se llama Melody y... Alexander

Lo saludo normal sin mostrar una pizca de arrepentimiento, celos o tristeza

Simplemente lo saludo como al resto

Tomó asiento y comienzo la platica al recibir las carpetas

-los negocios están funcionando por lo que veo - digo con voz neutral y clara para que todos me escuchen

-esos vinos nos están llevando a la gloria - afirma Martín, un socio

-entonces sin los vinos de mi familia estarían acabados? - pregunto intentando ocultar una sonrisa

Veo de reojo como Alexander toma de su copa para ocultar una sonrisa

-tienes el mismo carácter de tu madre aunque no tengan la misma sangre - Jean Carlos murmura

-Mira, hasta poeta me saliste - todos en la mesa reímos

Empezamos a ordenar mientras charlamos de diversas cosas y obviamente me quedo con las carpetas ya que Jean Carlos tiene demás copias

-solo digo, que si algún día eso llegara a pasar, tendría que negociar si me llegasen a atrapar

-no es tan fácil como parece - digo mirando a la persona que hablo

-no lo es? - niego-entonces por qué estas aquí?

-por la sencilla razón de que fui más inteligente que ellos y logré escapar, costó? Mucho, pero al menos valió la pena, si no era el FBI lo que me perseguían, eran los de la CIA, es lindo saber que soy importante para los que están muy arriba y aunque me tuvieron presa y ni aún teniendo me en sus propias manos fueron capaz de durar tres días con mi presencia cerca, eso solo demuestra que para ser inteligente y salirse con la suya, no se necesita tener pene- sonrió bebiendo mi copa

Alex me mira orgulloso y calmado a la vez, si te preocupaste por mí bestia

-eso quiere decir que no te pueden ver la cara de estúpida - habla la tal Melany

Los Maestros de la Mafia  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora