Primera fase

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   La fiesta había sido todo un éxito: había ido mucha gente, sus padres no habían hecho lío y la casa estaba más limpia de lo que esperaba. Tal vez, hasta podría decir que subió su popularidad en el instituto. El único problema, momentáneo esperaba, era el malestar general que sentía. Probablemente era un efecto secundario del alcohol, que no había tomado con ganas hasta la noche anterior.

   Se sentía mareada, le tambaleaban las piernas y su visión estaba borrosa. Pero no todo era culpa de la locura fiestera...

    Se recostó en su cama, con su gato al lado, y tomó su celular, que dejó al segundo, por la molestia que le causaba el brillo de la pantalla. Cerró los ojos y acarició a su gato, que además de ser su fiel mascota, era el responsable de una parte importante de sus molestias.

***

Melissa abrió los ojos de a poco, esperando encontrarse a su gato a su lado, pero no estaba allí. Con pereza, salió de la cama y puso sus pies sobre el frío suelo, los cuales la guiaron a la cocina por un poco de comida.

"...Se le realizará una autopsia por parte del personal forense, que en este momento está trasladándola a un centro de salud cercano."

—¿Qué pasó? —pregunta a su madre, que está escuchando las noticias en la radio.

—Shh, déjame escuchar si dice algo más —la corta, haciendo un ademán con la mano y llevándose la pequeña radio portátil a otro lado.

Melissa abre el refrigerador y saca un yogurt, luego va al cajón de los cubiertos y toma una cuchara, para luego dirijirse a la caja de cereales y sumergir su mano esperando hacerse con un puñado de Estrellitas.

—¡Melissa! ¡Deja de hacer ruido que no puedo escuchar la radio!

—Menudo cacharro —suelta la joven por lo bajo.

—¡Listo! Ven acá para que hablemos. ¡Y tráeme mi taza de café que dejé sobre la mesa!

  Madre e hija se acomodan en el sofá y comentan la reciente noticia: Una mujer de avanzada edad, a la que todos conocían como la loca de los gatos, murió por causas que se desconocen. Un raro caso, destinado a los mejores forenses y detectives.

***

   Durante la autopsia, los médicos descubrieron, horrorizados, que los órganos de la mujer se habían derretido. Sí, los encontraron derretidos como mantequilla un día de calor.

Asustados, por no saber la causa del fenómeno, los profesionales decidieron hacer una rápida reunión, que finalmente no terminó en nada. ¿Cómo evitar el pánico general si le comunican a todos que una mujer murió, porque se derritió por dentro? Imposible. Lo único que sacaron en claro, fue que necesitaban hacerle todos los exámenes posibles al cadáver, para descubrir la causa de muerte.

***

Nadie sabía lo que había provocado la muerte de la mujer, ni siquiera los 15 gatos que habían sido su compañía por tantos años. La prensa estaba indignada por no poder sonsacarle información a los médicos que habían realizado la autopsia, y algunos, asustados imaginando lo peor.

***

Tres semanas después de la sospechosa muerte de la mujer, los científicos encargados de la investigación descubrieron que la sangre del cadáver, contenía una sustancia no identificada, que según algunos, era parte de la composición del pelaje felino. Al parecer, los gatos de la "loca de los gatos", le habían contagiado una rara enfermedad. El problema ahora era si solo esos gatos transmitían la enfermedad, ¿tendrían que dejar todos a sus amigos felinos? ¿cuál iba a ser la excusa para los medios?

***

Melissa se sentía cada vez peor. A penas comía, estaba mareada todo el tiempo y constantemente le temblaban las piernas. Había ido a consultar a su médico, pero lo único que obtuvo fue una receta para comprar un medicamento que le quitaría las nauseas. Es que él no suponía que lo de ella, era mucho más grave que un simple mareo.

***

Con el tiempo,  muchos amantes de los gatos comenzaron a consultar por mareos y las autoridades, tuvieron que reunirse...

"¡No podemos divugarlo! ¡Será un caos!", exclamaban algunos; "¿Que haremos si no? Morirá todo aquel que tenga un gato", decían otros; ¡Moriremos todos! sollozaban unas alteradas señoras de alto rango. Pero no se ponían de acuerdo. Hasta que un hombre bajito de negro bigote y divertido aspecto, se pronunció frente a todos y decidió imponer la idea de decirle a la prensa que los gatos estaban transmitiendo un virus parecido al de la gripe, nada grave, que era mejor prevenir, alejando a los gatos de las casas por un tiempo. Finalmente todos estuvieron de acuerdo y pusieron en marcha el plan.

***

—Me niego a dejar a fantasma en ninguna parte que no sea mi pieza.

—Hija, te enfermarás.

—Ya está enferma, querido. Ha estado toda la semana quejándose de su dolor de cabeza.

—Dejaremos al gato e...

—Fantasma. "El gato" se llama Fantasma.

—Está bien. Fantasma, el gato, se quedará en el campo de tu tía. Cuando pase todo y te mejores, podrá volver.

  Melissa discutía con sus padres sobre el futuro de su peludo amigo, luego de escuchar la alerta de un virus transmitido por los gatos. Los defensores de los animales y amantes de felinos, se reusaban a dejar a sus mascotas, al igual que Melissa.

—No hay opción. ¿Quieres que lo llevemos juntos? Dejaremos que faltes a clases para que puedas acompañarnos si quieres.

—Fantasma se quedará aquí. En el patio trasero si quieren. Es mi última oferta.

Casi lo fue. Los padres de Melissa se llevaron a su gato esa noche, no sin ganarse una larga ley del hielo por parte de la joven, quien fue una de las beneficiadas con la cura que se encontró tiempo después.

Pero no todos tuvieron tanta suerte. La mayoría de los amantes de los gatos en todo el mundo no llegaron a ver la luz del día en que se creó la vacuna. Miles murieron, derretidos por dentro, a causa del virus transmitido por sus mascotas. El mundo dejó de ser el mismo y de a poco las personas fueron dejando a sus gatos, e incluso perros, conejos y aves, alejados de sus hogares. Científicos en todo el mundo se unieron para combatir la pandemia, que arrasó con ciudades enteras y dejó a muchos con graves secuelas. La cura fue administrada a gente de todo el mundo, con o sin gatos, que pudo vivir tranquila por muchos años.

  Claro, porque nadie esperaba que un perro se hiciera amigo de un gato...

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⏰ Última actualización: Mar 29, 2015 ⏰

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