Silhouette║Sadie Sink y tú

Capitulo 49: La familia Sink

POV _____

Volvimos a Nueva York después de que Álvaro y Olivia se quedaran en Los Ángeles. Al día siguiente, Sadie apenas me dirigió la palabra, pero, para ser honesta, yo estaba muy ocupada jugando con Malina y Noah durante el vuelo. Ahora mismo estoy en un examen ultraimportante, y Dylan me está pasando algunas respuestas por telepatía. ¿Quién dijo que hacer trampa no era un superpoder?

Cuando terminó el examen, nos dirigimos al comedor, y de repente...

—¡_____! —gritó Olivia, abalanzándose sobre mí como si fuera un gato gigante, tirándome al suelo en el proceso. Todos en el comedor se quedaron viéndonos como si hubiéramos empezado una telenovela.

—¿Están bien? —preguntó Thomas, preocupado, ayudándonos a levantarnos.

—Sí, pero, ¿a qué vino eso? —pregunté confundida, sacudiéndome la ropa.

—Por eso... —dijo Emilia, señalando a una chica pelinegra al otro lado del comedor.

—¿Y eso qué? —levanté una ceja, completamente fuera de onda.

—¡Tonta, es Amybeth! ¡Cambió de forma! —susurró Dylan como si eso lo explicara todo.

—Ah... ¿y eso a mí qué me importa? —respondí, sin captar aún la importancia.

—¡Es algo importante! —Thomas rodó los ojos y, sin previo aviso, me cargó al hombro como si fuera un costal de papas.

—¡Indignante! —me quejé, mientras los demás se reían.

Nos llevó a un sendero más alejado, donde "Amybeth" finalmente volvió a su forma original. Todos estaban serios, menos yo. Thomas me bajó de su hombro como si fuera el elegido, pero de un reality show absurdo.

—Bien, ¿qué demonios está pasando? —pregunté, claramente perdida.

—Vamos a fingir tu secuestro. —Amybeth soltó eso como si fuera lo más normal del mundo.

—¿Perdón? —Mi ceja casi tocó el techo.

—Es por venganza —dijo Louis, mientras sus ojos cambiaban de color de forma dramática, como si estuviera en una mala película de ciencia ficción.

—¿Venganza por qué? —pregunté imitando su tono, exagerando el drama.

Se venía la explicación intensa, modo telenovela activado.

—Cuando encontramos a Amybeth, casi estaba muerta por la tortura que sufrió. La mordí para hacerla híbrida. —dijo Emilia, como si fuera algo casual.

—Yo... bueno, Sadie y su grupo siempre me molestaron. —dijo Louis rascándose la nuca.

—Yo me tuve que ir de la escuela por las burlas de su grupo. —añadió Olivia, con una mirada dura.

—Sadie estaba enamorada de mí, al igual que Faith. Pero elegí a Sadie y ella me dejó por Ted. Fui raptada y torturada, luego me transformaron, pero los demás creen que estoy muerta. —Amybeth sonrió como si fuera el final de una novela de terror.

—Así que queremos fingir tu secuestro, para que se pongan nerviosos, sufran, y se den cuenta de lo que han hecho. —Thomas concluyó, muy serio.

—¡Vaya! Me encanta el plan. Pero, ¿realmente tengo que fingir mi muerte? —dudé, mirando a todos.

—Te lo mostraré. —Dylan se acercó a mí, ignorando las advertencias de Louis.

De repente, un flashback invadió mi mente, mostrando cómo Sadie dejó a Amybeth por Ted de la manera más fría y cruel posible. Todo lo que sentí fue rabia.

—Sadie... es una hija de... bueno, su madre no tiene la culpa. —Amybeth sacudió la cabeza, viendo mi expresión de enojo.

Respiré profundo. —Si todo lo hizo para poner celoso a Ted, vamos a hacerles pasar por el infierno. ¡Hagamos esa mierda! —dije con una sonrisa desafiante, mientras los demás sonreían. —Ahora, ¡vamos a comer, que estoy muerta de hambre!

Horas después...

Todo el día transcurrió normal, como si no hubiera una conspiración en marcha. Sadie me invitó a su casa, como si nada. Dylan ya tenía todo planeado, iba a pasarme los apuntes mientras yo "desaparecía". Fuimos caminando hacia su casa, pero el silencio entre nosotras era tan pesado que podía cortar el aire.

—¡Sadie! —Un pelirrojo salió de la casa y la abrazó efusivamente.

—Oh, ¿tú debes ser su novia? Un gusto, soy Caleb Sink. —dijo, mirándome de arriba abajo.

—Eh... sí. Soy _____ Salvatore. —dije incómoda mientras me forzaba a sonreír.

Cuando entramos a la casa, me recibió una niña pequeña, probablemente la hermana menor de Sadie.

—¡Hermanita! ¿Ella es tu novia? —preguntó emocionada, abrazando a Sadie.

—Sí, Jacey. —respondió Sadie, sonriendo.

—¿No pudiste conseguirte algo mejor? —dijo la niña, mirándome de manera crítica.

—¡Jacey! —la regañó Caleb, pero la niña no se retractó.

—Le hablaba a ella, no a Sadie. —replicó, dejando caer la bomba. No pude evitar soltar una carcajada.

—Si tuvieras 8 años más, ¿andarías conmigo? —preguntó Jacey, sonriendo con una inocencia alarmante.

—Posiblemente. —respondí, sonriendo.

Sadie me miró con celos evidentes, y me besó como si quisiera marcar su territorio.

El resto de la tarde transcurrió sin sobresaltos. La familia de Sadie era sorprendentemente agradable, tanto que me hicieron olvidar por un momento el plan que habíamos armado. Aunque, en el fondo, no podía evitar pensar: "Lástima que su hija solo esté interesada en Ted".