[PAUSADA] "Let's Not Be Alone Tonight" (Fanfic) (Ross Lynch)

CAPITULO 8

-¿Disculpa?- suelto a Mad con una carcajada.
Está jugando.
-Mi reacción fue la misma, pero, es verdad.
-Si sintiera algo por mí, lo hubiera mencionado.
-¿(Tn)______, conoces algo llamado "FRIENDZONE"?
-¿Como puedes decir eso Maddison?- mi voz sale temblorosa, parte de mí lo sospechaba pero, creía que eran alucinaciones mías.
-Ya te lo he dicho, si no me crees es cosa tuya.- Se sienta en su cama, rendida.
Decido no continuar con la situación, aunque sé que esto aún me importa, y me va a estar dando vueltas en la cabeza toda la noche.
Me levanto de la cama y camino hacia el pequeño tocador blanco que esta al pie de mi cama a un metro y medio de distancia aproximadamente, con esa identificación aún en mis manos. Por más tiempo que la tengo en mis manos más le hecho de menos.
La dejo dentro de una pequeña cajita con forma de cofre, no sin antes echarle un ultimo vistazo a la foto.
Maddisson se levanta y se encamina al baño.
-Esta era la prueba que necesitabamos para saberlo.
-¿A que te refieres?-pregunto caminando detras de ella.
Toma su cepillo de dientes atascado con dentrifico y se lo lleva a la boca.
-Que conocieras a un chico mas sexy que te trajera loca.-dice entre cepilladas.
-¿Mas?
-Erick puede ser un nerd, friki, retrasado o lo que quieras llamarle, pero... tiene lo suyo.
A decir verdad, ella tiene razón, Erick es un chico muy apuesto, tiene el cabello rubio oscuro, casi marrón, siempre lo lleva en un loco peinado alborotado hacia arriba y lo tiene mas corto de los costados. Sus ojos tienen un hermoso color azul grisaseo, hace un par de años no tenia un buen cuerpo, por lo que Maddison solia llamarlo "El montadientes" pero ultimamente se ha preocupado oor hacer ejercicio y sus bazos son mas fuertes y definidos.
Me atrae, de cierta forma, pero no para salir con él, no para ser su novia.
-T-tienes razón-respondo a Mad- pero, no... no logra llamar mi atención.
-Lo se, te entiendo, y es porque... estás loca por Ross.- se seca la boca con una toallita de papel y salgo de la habitacion, exasperada, se que es verdad y que muero por llamarlo, pero no lo puedo admitir, me cuesta decir que estoy loca por un extraño que me hizo un cumplido sobre mi trasero.
-Eso no es verdad, por favor, deja de decir eso.
Me siento en el pequeño banco del tocador.
-No dejas de pensar en él, y es mas que evidente, asi que ni siquiera te esfuerces en negarlo, te conozco demasiado bien.-Eso es cierto- puedo asegurarte que cada que ves esa identificacion, fantaseas con besar esos irresistibles labios.
Me sonrojo, porque se que es cierto y evidentemente, es imposible que sea un secuestrador. Quiere volver a verme y yo a él.
Me cubro la cara con las manos y comienzo a reir.
-¿Ves?
Suelto un largo suspiro.
-De acuerdo, lo llamaré.
-¡ALELUYA!-exlama levantando sus manos hacia el cielo.
-Pero no hoy.
Rueda los ojos.
-Bueno, con algo me he de conformar, pero te recuerdo que mañana iremos a un lugar... y... seguro piden identificación.
-solo tengo 18, la edad para beber son 21, asi que no me sera necesaria para ningun bar, aparte, es identificacion de estudiante.
Ahora que lo analizo, creo que parece mas joven de lo que en realidad es, no me habia percatado de que tenia 21.
-Un momento, la identificacion de Ross... no es de estudiante cierto?
-N-No... el, es mayor de edad.
-No lo parece... -frunce el ceño
-Lo sé, es... extraño.
-Entonces él necesita mucho mas su identificación.
-Solo quieres que lo llame ahora, pero no lo haré, tal vez lo haga mañana.
-¿¡TAL VEZ!? Dios mio, eres imposible.-se da la vuelta, cruzada de brazos y comienza a caminar haca su cama.-Me voy a dormir, espero que mañana tus ideas se aclaren.
Apaga las luces y me quedo mirando al suelo unos minutos.
*Yo tambien...*
* * *

Abro lentamente mis ojos y veo a Ross, parado al pie de mi cama de espaldas, acomodando su perfecto cabello frente al espejo.
Sonrío.
Está vestido con una camiseta naranja de cuello, unos pantalones color crema y unas botas marrón.
-R-Ross?-murmuro dormida.
Se gira hacia mí con el ceño fruncido.
-¿Disculpa?-Camina unos paso y el hermoso cabello rubio que creí ver se transformaen una melena castaña.
Mieeerda...
-¿Que? - pregunto a Erick quien parece estar muy molesto, por la manera en que camina, pareciera que en cualquier momento va a saltar hacia mi y va a estrellarme en la cabeza la lampara que está a mi lado.
-Dijiste: "¿Ross? "-dice imitando mi tono, lo cual me molesta.
-¿En serio?- pregunto tratando de demostrar sorpresa, pero soy una pesima actriz.
-Vamos (tn)_______ no te hagas la tonta, sabes muy bien lo que...- no termina la frase.
-Bien, tal vez lo dije, ¿y?- lo interrumpo.- ¿a ti en que te afecta? ¿tienes alguna razon para molestarte?.
Rueda los ojos, y sale de la habitacion echando humo.
Cierra la puerta de un fuerte portazo que me sobresalta.
Sé que me pasé un poco, pero no tiene derecho a comportarse de esa manera, mucho menos a hablarme así.
-Vaya... que buena manera de iniciar el dia...- se burla Maddison, desde su cama, ni siquiera habia notado su presencia.
-Agh callate.-tomo una almohada y se la lanzo a la cabeza.
Ella ríe.
-¿Cómo entró?
-El señor perfecto descubrio que no tenia espejo en la habitación, y el baño estaba ocupado, asi que vino a "peinarse" aquí.
-ah...
-Dijo que te veías muy linda durmiendo.
Me sonrojo y paso saliva.
-Eres insoportable.-me cubro la cabeza con la otra almohada.
Se echa a reir.
-Eso fué lo que dijo.
-vale... vale... ya dejalo...
Comienza a sonar mi movil, con el típico tono de mensaje.
Habia olvidado que se habia quedado sobre el tocador.
De mala gana, me levanto y camino unos pasos tasta llegar ahí.
Lo tomo y reviso la pantalla.

Buenos días princesa.

Sonrío al ver el remitente.

Buenos días mamá.

-¿Es Ross?-pregunta Mad
-No, no es Ross...
Ruedo los ojos.
La respuesta la recibo sasi de inmediato.

Me temo que no te podre llamar esta tarde cariño, tengo un dia muy atareado.
Portate bien.
XOXO
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Claro, te amo.
¿Y como está mi pequeño?
XO
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Me vuelvo hacia Maddison.
-Adelante
-¿Que?-pregunto algo confundida
-Adelante... finge que no deseabas que fuera él- se levanta de su cama.
-yo no esperaba que fuera él- miento
-No intentes tomarme el pelo, no me trago tus mentiras.
-No estoy mintiendo, ademas... -no termino mi frase y mi telefono vuelve a sonar.
Algo que agradezco ya que no habia logrado formular alguna excusa.

Esta perfecto hija, tan perezoso como de costumbre.
Te amo mas
XO
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Su mensaje me hace sonreír.

Mantenme al tanto.
Besos.

-Tengo que vestirme- informo a Mad tomando mi ropa de la maleta corriendo hacia el baño, tratando de evitar su interrogatorio.
-Hoy te dejé escapar Park!-exclama.
Pero cierro la puerta de golpe.
* * *

-Mddison, son solo Los Angeles, no Las Vegas-exclamo al ver los tacones de aguja que lleva puestos.
-No hay lugar para ser sexy amiga.-anuncia levantando un pie, presumiendo su zapatilla.
-Cuando demos dos pasos en la arena ya estarás en el suelo, te lo aseguro.
-Esta bien-gruñe y se dispone a quitarselos, toma sus sandalias y desliza sus largos pies por ellas facilmente.
Ella lleva puesto un largo vestido de una tela demasiado fina, y un sombrero que es mas grande que yo, y claro, todo en esta vida es mas grande que yo, Maddison me saca casi media cabeza a pesar de que mide 1 metro con 65 centimetros.
Yo solo visto unos shorts de mezclilla, sandalias y una blusa de manga corta holgada demasiado larga, que cubre casi todo el short haciendo parecer que voy medio desnuda, pero no me importa, no soporto tanto calor.
Tomo mis lentes de sol redondos y mi bolso.
-¿Hoy lo llamas cierto?- dice cuando cruzamos la puerta.
**AHÍ VAMOS DE NUEVO**
-Si...
Ruedo los ojos.
-Tu movil estaba sobre la cómoda.- Coloca sus manos en puños sobre sus caderas, enarcando una ceja.
-Lo llamaré cuando estémos de vuelta.
Niega con la cabeza.
-Algun dia me vas a matar.-gruñe
Río por lo bajo.
Comienza a sonar un tono de movil que me suena familiar.
Frunzo el ceño.
-¿Ese es mi movil?-pregunto ladeando la cabeza.
Maddison me mira mordiendose el labio y caigo en cuenta que el sonido provieme de dentro de su bolso.
-Tal vez.-sonrie como disculpandose pero hago caso omiso de su expresión y le arrebato el bolso, hurgo entre sus cosas y por fin lo encuentro.

NUEVO MENSAJE

Seguro es mamá.

Abro el mensaje y no distingo si mi corazón deja de latir o late tan rapido que parece no hacerlo.
En la pantalla se lee:

Estoy en un gran dilema, no se que quiero más, si volver a ver tu rostro, mi identificación o tu trasero.

-Ross

Me sonrojo.

Por dentro estoy gritando y saltando de felicidad mientras por fuera solo logro tratar de reprimir una enorme sonrisa.