Mis Fantasías Y Mi Crush

En realidad tú eres mi tipo

Al día siguiente amanecí con un mensaje que de buenos días de su parte, lo respondí mientras me alistaba para ir al trabajo, debo confesar que me alegró la mañana, vamos que jamás pasas a imaginar que un día vas a mensajear con tu crush.

Ese día luego del trabajo salí a trotar y al pasar cerca de su apartamento lo ví en la lavandería, estava de espalda y andaba sin camisa, madre mía!!! pero que taco de ojo me dí, su amplia espalda y brazos músculosos me hicieron pensar lo fácil que le sería alzarme en brazos ya que ese siempre fue el dilema por mi estatura.

Sin darme cuenta quedé imaginando unas buenas posiciones que podríamos hacer... Salí de mi embobamiento y aumente el trote, lo que menos quería es que me viese lujureandolo y de seguro con las mejillas ruborizadas por los pensamientos poco decentes que estaba teniendo.

Pero eso despertó aún más mis ganas de que almenos me diese un beso, a quien engaño quería que me diese una buena follada y que con la experiencia que debía tener, me hiciera gritar de placer.

Esa noche volvimos a mensajear, me dijo que quería chatear fuera de la apps asique le pasé mi WhatsApp sin protestar, pero ese día tenía muchas tareas de la universidad asique me despedí temprano.

Así pasaron unos días me escribía siempre un mensaje de buenos días y en la noche chateabamos, me contó un poco de su vida que trabajaba cómo jefe de obras en un proyecto y que iba al gimnasio, también confirmó que hacía un tiempo desde que tuvo una pareja estable pero estaba soltero actualmente y sólo estaba viendo que se daba. Yo le comenté que sí ya eso lo sabía porque antes de que se mudará yo vivía aquí.

Los mensajes cada vez eran más casuales e insinuantes ya me había dicho que aunque su preferencia eran las chicas blancas yo le había parecido muy guapa y con una personalidad interesante y que moría por verme en persona.

Yo estaba algo así cómo en estado de levitación con sus alagos que sin pensarlo envié: bueno a mí siempre me han gustado los chicos morenos y de preferencia con el cabello en risos, a lo que él respondió en plan relajo: osea que yo soy tú tipo?

Y ahí voy yo dejando la timidez debajo de la almohada y le respondo: sí, eres mi tipo en realidad fuiste mi crush desde que tenía 16 años... Pero que carajos acabo de enviar? Se suponía que eso no lo debía saber, ya era demasiado tarde el mensaje ya estaba enviando, sólo tocaba esperar cómo se lo tomaría...