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Andar ebrio  es una de las causas de accidentes que más se habla.

Pero también las existe por no estar concentrado, por usar el teléfono o estar peleando dentro del automóvil.



Pero lo que le pasó a la madre moreda fue otro caso.


Luz, Amity y la pequeña Azura regresaban de una pizzería familiar repleta de juegos de arcade.


Azura venía dormida, con sus dulces y juguetes entre las manos.


Amity solo tarareaba la letra de la radio.


Luz conducía un auto color rojo.

Ella no estaba borracha.


Noceda no estaba molesta.


No estaba usando el celular.


Luz estaba concentrada.


Ella sí

pero otro conductor no.




Un coche negro las chocó a toda velocidad.

Visitas con rosas - LumityDonde viven las historias. Descúbrelo ahora