Verte Otra Vez

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Veo sus ojos, puedo ver confusión, enojo, pero en el fondo puedo ver...
¿Tristeza? O ¿Desilusión, tal vez?. Esperaba quizá a alguien más, como... a Andy, por ejemplo...

"Tú eres andy" dice esa voz en mi cabeza

Lo sé, parezco loca, soy yo, pero...este cuerpo no es el qué él quería ver y ni es nada grato ver la desilución en sus ojos.

Sigo indagando en sus hermosos orbes grises, después de todo, los ojos son la puerta al alma ¿Cierto? Y puedo ver...
Tal vez un poco de alivio, pero...por alguna razón hay algo mas en su mirada que no logro descifrar. Que me confunde en gran manera.

Su vista sigue fija en mis ojos, como si él, al igual que yo, me estudiara a fondo.

¿Qué hace aquí? ¿Es él el nuevo socio? ¿Mamá lo sabe?

Esas y otras dudas mas llenan mi cabeza en cuestión de segundos. Segundos que se vuelven demasiado cortos cuando es a la persona que amas a quien tus ojos están mirando.

Podría seguir mirando esos hermosos orbes tormenta toda la vida, Porque, a pesar de que éste no es mi cuerpo y que él ha cambiado -Por mi culpa, lo reconozco- Sigue provocando que me olvide de todo y que el mundo a nuestro alrededor desaparezca, y solo seamos nosotros.

Nuestras almas siguen siendo las mismas, y seguimos estando amarrados, perteneciendonos como antes, y unidos ahora también por lo más valioso de mi vida, y que sé que si la conociera, de su vida también.

Liliam

Mi bebé. ¡No! Nuestra bebé

La verdad es que seguro él no se lo esperaba, al igual que yo, quizá tampoco estábamos preparados, pero ella es lo mejor que nos pudo pasar, así él no lo sepa, y yo con todo el dolor de mi alma, me perdí estos años de su vida.

En fin, estaba de regreso y haría todo por permanecer al lado de mis dos grandes razones.

Un carraspeo nos trae a la realidad, o más bien a mí, que sin darme cuenta ya estoy comenzando a babear.

Es que. ¿Quién podría resistirse a ese hombre?

¡Exacto! Nadie.

-Buenos días señorita....-provoca cauteloso, dejando la frase en el aire, atento a cada movimiento de nerviosismo de mi parte.

Sin embargo, aunque tenga ganas de salir corriendo, ya sea a sus brazos o a casa para esconderme debajo de la cama y llorar, simplemente sonrío con debilidad y aclaro mi garganta para darle una respuesta concreta.

-Lena...-Trago saliva y repito: -Lena harrys. -contesto aún sorprendida por la situación, alejando mi vista de la suya, aunque todavía puedo sentir como quema su mirada ardientemente sobre mí.

La verdad es que si sigo viéndolo así, sería demasiado sospechoso, y pues, con lo transparente que soy, siento que terminaría gritándole con la mirada cuánto lo amo.

Luego seguro me mira como si fuera la persona más pirada del universo y me envía al manicomio.

¡Oh! Imagino que usted es la hija de la CEO Pots. -dice el que, según el informe que mamá me hizo estudiar más de diez veces, es Manuel Stevens, mientras me recorre con la mirada de una manera en extremo incómoda.

¿Ah....? que le hace creer eso? ¿El apellido...?

Reprimo mis ganas de rodar mis ojos y bufar.

Tranquila Andy...trata de no ser grosera. -me brindo paciencia

Pero es que la mirada de ese señor no me agrada para nada, estoy por contestar sin importar si mi voz suena pesada, la actitud maliciosa de este viejo verde en serio me está fastidiando.

¿y si te vuelvo a encontrar? (#1 Saga "Ángeles") ✔️ [Terminada] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora