La mansion Melbourne

Capitulo 1 - La Despedida

Layla

Me desperté sobre las 6am, hoy era el dia, hoy por fin me iría a estudiar a Melbourne

Melbourne es una mansion reconvertida en internado y es en donde voy a estar estudiando este curso, y espero porfin poder socializar como una persona normal y no como una con padres extrictos (bueno, padre*)

Mi familia es un poco extravagante, mi madre nos abandono cuando tenía 5 años pero mi padre siempre a estado para mi y mi hermano

Mi hermano, Lucas (alias mi padre 2.0) es muy divertido y un poco loco a veces, pero muy sobreprotector y bueno

También tengo una perrita de agua llamada koko, tiene el pelo marrón y duerme mucho.

Me duché, vestí, peiné y revise que en mi maleta tuviese todo lo que necesitaba y baje a desayunar

Cuando bajé las escaleras me encontré con mi padre en delantal cantando mientras hacía tortitas

Mi hermano estaba en la barra riéndose mientras intentaba robar las tortitas que mi padre iba dejando en un plato

-buenos días-dije sentandome junto a mi hermano

-buenos días, hermanita

-buenos días hija, mira,-señala el plato de las tortitas - te e echo tortitas

-¿hay para mi también, no? - inquirio Lucas

-depende, ¿ a qué hora viniste ayer de "cenar" con tus amigos?-contestó papá

-le sonríe como si no hubiera roto un plato-prontito papá, muy prontito

-¿A si? Entonces se nos metió un mapache en casa ayer a las 3 de la mañana, estas castigado.

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Después de desayunar nos montamos en el coche rumbo a la estación de tren

Papa me dejó ir delante a mi para fastidiar a mi hermano pero bueno, no me quejo por que me beneficia

Bajamos de el coche y sacamos las maletas de el maletero

Me acompañaron a esperar el tren y nos despedimos

-pasatelo bien y se responsable, te quiero - dijo mi padre

Le di un abrazo y le dije que también le quería

-que sepas que me voy a quedar tu cuarto de lunes a viernes-dijo Lucas

-atrévete y pongo trampas para ratas-nos reímos -

-nos vemos - me abrazó -

-Nos vemos - correspondí el abrazo

Justo antes de subirme al tren me di la vuelta y los despedí con la mano

En 2 horas llegaré a Melbourne así que decidí escuchar música e intentar
echarme una siesta