Parte única.

774 141 56
                                    

Pisado. Así se sentía el corazón de Jimin.

Pisado como cientos de flores hermosas.

Tenía la sensación de haber sido demasiado iluso pensando que alguien de la talla de Taehyung se enamoraría de él, probablemente había confundido toda la amabilidad que el más alto le ofrecía con algo romántico, pero finalmente tocó el suelo de la realidad cuando al llegar a la florería lo encontró con otro chico pálido a quien besó en los labios mientras le regalaba palabras melosas que a Jimin le hubiera gustado recibir.

Se había equivocado.

—Te lo dije —habló un azabache tomando asiento junto a él—, tu mente estaba volando muy alto, Park... Hey, cuando lloras te ves más feo.

—Vete de aquí, Jeon, no quiero escuchar que te burles de mí —masculló sorbiendo su nariz—, eres un tonto.

Jeon Jungkook era el hijo de la dueña de la florería donde trabajaba Taehyung, solía ir con frecuencia a visitar el lugar y curiosamente estaba ahí cada que Jimin aparecía para platicar con el otro chico. Su relación con Jimin no era la mejor, siempre se hacían comentarios irónicos que en vez de parecer visitar la florería, parecían visitarse el uno al otro para debatir sobre temas tontos en los que decían tener la razón o tal vez solo intentaban llevarse la contraria.

—No te sientas mal —dijo Jungkook al no encontrar otras palabras que decir.

—Gracias, ya no me siento mal —contestó el rubio sarcástico—, era obvio que no le iba a gustar... el otro es bonito, su cabello es más hermoso y su voz es grave... yo no tengo nada de eso.

—Te dije desde el inicio que no podías ilusionarte con Taehyung, no es porque tú no seas lindo, es porque... bueno, ellos ya se conocían desde hace un tiempo, además, ¿cómo le iba a gustar un chico que compra tulipanes en vez de rosas?

Como respuesta a la pequeña broma solo hubo silencio, el azabache soltó un suspiro pesado, así no podría arreglar el humor de Jimin.

—¿Por qué lo haces? —preguntó en un hilo de voz—, estoy harto de que te la pases molestandome y burlandote de mí.

—¿Yo?

—¡Cada vez que te miro por accidente por mucho tiempo sacas un comentario tonto!

—¡Es que si me vas a mirar tanto mejor ya bésame!

—¿Eso es lo que quieres? ¡Pues bien! A la p-próxima lo haré y vas a quedar como tonto —hizo un mohín con los labios.

Nuevamente hubo silencio. Solo estaban ellos sentados en el banquito de un parque que quedaba en la esquina de la florería, a algunos metros de distancia habían niños correteando por el lugar, personas comprando dulces, gente haciendo ejercicio, estaba lleno. Pero para ellos solo habían dos.

—Estoy enamorado —soltó el azabache de pronto.

—¿Qué?

—Te molesto porque estoy enamorado.

—E-Entonces eres muy tonto al descargar tu frustración en mí por estar enamorado... deberías de ir con esa persona y mejor fastidiarla a ella.

Jungkook llevó la mano a su frente, no cabía duda que Jimin era un poco lento para las cosas del amor.

—De ti.

Otra vez hubo silencio.

—¿De mí? ¿De mí qué? —preguntó con inocencia.

No sabía si Jimin estaba fingiendo para molestar o en verdad que no la captaba, pero se inclinaba más por la primera opción. Aún con los ojos hinchados y la nariz roja de tanto llorar, Jimin podía seguir siendo ese chico juguetón que tanto le gustaba.

—¡Eres tan difícil! —gritó y luego un sonrojo cubrió su rostro—. Estoy enamorado de ti...

—¿Eh? ¿Acabas de decir algo? No escuché bien.

—Que estoy enamorado de ti...

—¿Que estás qué?

—¡Estoy enamorado de ti!

La demás gente los miró raro, Jimin comenzó a carcajear para después devolver la mirada hacia el atardecer. Jungkook lo observaba confundido sin entender qué respuesta a su confesión era esa.

—Si me vas a mirar tanto mejor ya bésame —susurró Jimin copiando las juguetonas palabras que Jungkook le decía diario.

—No soy un cobarde como tú, Park...

—Demuestralo.

Y así Jungkook se atrevió a tomar a Jimin de la nuca con delicadeza y acabaron por juntar sus labios en un beso delicado, tan suave como los pétalos de las rosas, tan dulce como los chocolates que ponían en las canastas de flores en San Valentín, tan romántico como un arreglo de cientos de tulipanes.

Se separaron con los rostros enrojecidos de pena.

—¿Y Taehyung?

Una sonrisa se dibujó en el rostro de Jimin antes de responder.

—Creo que no me gustaba tanto, además parece que en realidad siempre me gustó otra persona.

—¿Q-Qué persona?

Aunque no lo aparentaba, Jungkook sentía sus manos sudando de los nervios, siempre trataba de hacerse el duro, pero era tan difícil para él ser romántico sin miedo a sentirse rechazado.

En el pasado nunca había encontrado manera de acercarse a ese chico rubio que pasaba frente a la florería cuando venía de regreso del colegio, por eso cuando lo vio empezar a entrar para hablar directamente con Taehyung, Jungkook no halló otra manera de hacerse notar más que soltando esos comentarios que irritaban al más bajo, tal vez... Eran atrevidos coqueteos entre discusiones que acabaron pareciendo broma en vez de sentimientos serios.

Por suerte el rubio era como él en muchas cosas, y aunque no la captó del todo, llegó a tener la sospecha de que había algo más entre los dos.

—Un idiota que dice que las rosas son mejores que los tulipanes —respondió Jimin, rieron.

—¿Enamorado de quién? No escuché bien —preguntó para molestarlo y escucharlo una vez más, recibió un golpe suave en su hombro y de nuevo soltaron carcajadas.

—Enamorado de ti, Jungkook idiota.

Se rieron y volvieron a besarse.

Después de ese día vinieron muchas discusiones más sobre flores y marcas de bombones, muchos besos e incluso un millón de palabras dulces.

Encontraron una parte de sí mismos dentro del corazón del otro, un amor de tulipanes y rosas.

_______

Gracias por haberlo leído completo, lo escribí con mucho amor y cariño.

Créditos de portada para: j1957j

🎉 Has terminado de leer Amor de rosas y tulipanes OS [ Jikook || Kookmin] 🎉
Amor de rosas y tulipanes OS  [ Jikook  || Kookmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora