Jiang Cheng lo sabía desde un inicio, esta sería su ultima misión, es que todo podía salir mal, su padre, su madre, los jades o quizás Wei Ying metiendo sus narices donde no lo llaman.
Dentro de esa camiones en absoluto silencio lo sabía, no saldría con vida, menos si su puntería seguía siendo perfecta y lo era.
- ¿Tenemos noticias? - odiaba escuchar la angustia en la voz del contrario, pero sabía que se odiaba más a sí mismo por lo ocurrido
- Lo sentimos señor... - una voz habló con pena
- ¿No hay noticias o esta muerta? - así que él estaba ahí también, reconocería ese tono frío en cualquier lado
- Ella murió - habló nuevamente una voz extra y todo se quedó en silencio, un silencio que lo mataba por dentro, porque sabía las miradas que tendrían ambos sobre él, podía sentir sus ojos perforar su cráneo, solo quería morirse
...
- Así que tu, un niño cualquiera, un asqueroso principiante asesinó a la Madame - una voz le hablaba molesto, se notaba que quería matarlo ahí mismo
- Si señor, yo, un simple niño - porque al parecer nadie sabía que era un Jiang
- Bien, ultimas palabras antes de morir - sintió el arma en su frente
- Intenta lo imposible - su conocido lema familiar, pudo escuchar como el hombre se ahogó con su propia saliva un segundo para después retirar la venda de sus ojos con fuerza
- Su hijo... - gruñó entre dientes, él conocía esos ojos, esas facciones molestas
- Si, mi madre es Yu Ziyuan, ustedes perdieron - sonrió, debía fingir alegría y soberbia ante tal situación
- Maldito seas Jiang Wanyin - escupió su rostro, conocía ese nombre, el heredero Jiang que nadie había visto pero al que todos temían, su fama solo era superada por su hermano debido a que estaba loco disfrutaba matar, Jiang Cheng era rápido y preciso
- Gracias Lan Qiren - claro que sabía quién era ese hombre, su única misión fallida de la que Wei Ying se burló por meses
- Así que sabes quien soy, bien, cortaré tu cabeza y le mostraré a los Jiang quién se llevó la victoria - se sentó frente a él en una silla que parecía un trono
- Hágalo, a mi padre no le importara en lo absoluto, mi madre no sabía de esto así que creerá que lo hice por decisión propia - sonrió sínicamente
- Pero a Wei Wuxian le importará ¿me equivoco? - se levantó tomando una navaja de la mesa de al lado
- ¿Si me mata? no, él me envió así que no le importará en lo absoluto - a decir verdad eso esperaba
- Entonces cortaré tus manos, sacaré tus ojos, sacaré tu lengua o tus órganos y se los enviaré - la navaja estaba en la mejilla del menor
- Y él se reirá mientras tira eso a la basura, es absurdo - bufó
- Bien, entonces tendré que descubrir si el rumor es cierto ¡SU SHE! revísalo - se sentó de nuevo mientras le entregaba la navaja a ese hombre que lucía jodidamente asqueroso que lamió sus labios ante la orden recibida
Piensa en otra cosa Wanyin, piensa en otra cosa - se repetía a sí mismo
...
Ambos jades lloraban a mares en la habitación, su madre estaba muerta, la mujer que los trajo a la vida, que los crio con amor, les mostró lo bello del mundo y les enseñó a disparar su primer arma.
- Hermano... - ¿estaría bien preguntar?
- Dime Wangji - Xichen limpió las lagrimas del rostro de su hermano
- ¿Lo conoces?
- Lo amo...
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LA FELICIDAD ES REAL CUANDO SE COMPARTE...
FanfictionHeredero de la mafia ¿simple cierto? Pero... ¿si tuviera que matar a la madre del hombre que ama? O... de los hombres que ama... LOS PERSONAJES PERTENECEN A LA NOVELA MO DAO ZU SHI