El Manicomio

Cap 1

Pasando

Narradora.

Pasado

10pm

Ay estaba un niño de 5 años jugando con su juguete favorito, un oso de felpa, entra su padre alterado lo levanta de el piso frío.

—P–Papá–Dijo el pequeño a dormilado llamando la atención de el mayor.

El mayor lo depósito sobre la cama.

—Si pequeño–Responde el mayor alterado al mismo tiempo que sacando las maletas al igual que la ropa de el closet.

—Donde está mamá?–Pregunto el pequeño frotando sus ojos marrones.

—Okay, tendremos que ir de viaje unos años–Dijo nervioso metiendo la ropa a la maleta.

—Pero y mamá?– Cuestionó el niño.

—¡Mamá no irá!–Le levanto la vos a el menor provocando que se le cristalizaron los ojos–No cariño no llores por favor–Dijo agarrando las mejillas rojas del menor provocando por el llanto del menor con – solo que mamá no podrá ir a este viaje por qué mamá tendrá un viaje de negocios muy importante

—P–pero si mamá no va quien me va cuidar–Pregunto el niño con la vos entre cortada.

—Yo te cuidare pequeño–Dijo el mayor, mientras le daba un cariñoso abrazo.

—¿Y a dónde iremos?–Pregunto el niño dudoso.

—Con tus abuelos... a Monterrey–dijo el mayor colocando la ropa en la maleta–okay vámonos.

Tomaron un avión y se fueron a Monterrey.

15 años después antes del centro de rehabilitación.

—Papá.... ya llegué–dijo gritando y entrando a la sala.

—Ni un paso más–dijo un señor de traje negro– O le dispararon–dijo apuntando a mi papá quien yacía en el suelo de rodillas frente al hombre.

—okey, okey no dispares–dijo poniéndome de rodillas con las manos en la cabeza.

—¡Hijo!–dijo el hombre que igual mente estaba de rodillas.

—¡Cállate!–le dijo el hombre quien ya le apuntaba con el arma.

El padre le enredo las piernas en los tobillos asciendo que este cayera.

—Hijo corre–dijo el hombre sosteniendo al otro en el piso.

Narra Oliver

Corrí lo más que pude asta llegar a el carro, tome las llaves me subí al auto y me aleje lo más rápido posible siendo seguido por el enemigo.

Después de que los dejé ase media hora me pare enfrente de un centro de rehabilitación mental ya sin gasolina. Entre al centro de rehabilitación y me encuentro con una recepcionista.

—Hola disculpe–la señorita me volteo a ver desorientada–Me podría ayudar? Es que mi carro se que do sin gasolina–le digo a la recepcionista.

—Tu eres al que buscan en la tele?–pregunto una niña con curiosidad.

—En la tele de que hablas?–pregunto con duda.

—En la mañana los adulto pusieron las noticias–dijo la niña con un puchero–y en las noticias dijieron que te buscaban por ver el hijo del narcotraficante más poderoso de aquí te buscan para capturar te a ti y a tu padre ¿Si eres tú?–pregunto curiosa.

—Yo..... ¡No no soy el!–digo asustando a la niña para volver con la recepcionista–eeee me vengo a inscribir al siquiatrico–dije con ciertos nervios.

—Y tu tanque de gasolina?–pregunto la recepcionista con los ojos entre cerrados.

—Que tanque?–pregunto con cara de confundo.

—Okay llena este formulario con tus datos y fórmate de aquel lado para acerté unos exámenes–me dijo entregando me una hoja y una pluma para después señalar dónde me debería formar–pagaras con tarjeta o efectivo?–pregunto la señorita.

—Con tarjeta–digo entregándole la tarjeta.

Me fui a sentar a la banca para cenar el formulario, me forme para los exámenes que obviamente tuve que sobornar al doctor para contenerme aquí.

—Al menos aquí estaré a salvó, por ahora–Dijo en un susurro antes de que entrara el doctor para darle dinero para que dijeran que me detectaron esquizofrenia.

Aci es como empezó todo.