¡Historias TsuAmane!

2. Flor de cerezo.

Nota: Básicamente es un oneshort muy aparte del anime, aunque conservan la misma edad.

Shipp: Amane x Tsukasa. (Osi a la variedad)

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¡Tsukasa, ya te he dicho que dejes de meterte en mis cosas! ──dijo molesto, quitándole toscamente aquel sobre de papel de las manos de su hermano.──

──¿Te le vas a confesar?

──No me cambies de te-..

──Si o no, responde.

Las mejillas de Amane se tornaron de un ligero color salmón, siendo una muy obvia respuesta para el azabache, quien sólo dio media vuelta y se esfumó dejando al mayor en una gran confusión.

¿Se preguntarán que esta pasando?, retomemos, hoy es un día un importante para Amane, por que por fin siente que tiene el valor para declararsele a esa chica de cabellos plateados pero── Tsukasa, de alguna manera, al enterarse, se siente terrible, se siente traicionado y no puede evitar sentirse triste al mismo tiempo, era como si le hubieran roto el corazón, ¿por qué..?

Había transcurrido una semana y Tsukasa, trataba de evitar lo más que podía a su hermano, ¿por qué se sentía tan débil ante él?, ¿por qué pensaba que si lo miraba se rompería a llorar?, era hora de salida y nuestro azabache fue el primero en salir del salón, llevándose alguna que otra mirada por parte de sus compañeros, ya que era normal ver a los gemelos juntos en todo y que uno salga "corriendo" de esa forma era extraño de ver.

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Los delicados pétalos caían sobre el pasto verde y uno que otro sobre su uniforme, el azabache tomó uno de los pétalos con su mano y lo observó en silencio, recordó a Amane, en como este le sonreía con dulzura y como su luz parecía iluminar sus días, una pequeña lágrima se deslizó por su mejilla.

Ahora todo era diferente, su hermano ya no era tan afectivo con él, es más lo notaba más distante y eso le dolía pero nunca lo admitiría.

──¿Tsukasa?

Una voz a sus espaldas se logró oír, reconocería esa voz en cualquier lugar,  se trataba ni más ni menos que de su hermano, quién se acercaba, el azabache rápidamente limpio como pudo sus lágrimas, no quería que lo viese de esa manera, tan lamentable.

¿Estabas llorando?──cuestionó con un gesto preocupado en su rostro.── Tsukasa, ¿que ocurre?, ¿por qué me haz estado evitando? ──dijo mientras se sentaba a un lado del azabache, quien sólo ocultaba su rostro en sus rodillas.──

... Tsukasa ──repitió al no conseguir respuesta alguna.──

Ya te oí, no te estoy evitando s-sólo.. ──respiró profundamente, tratando de calmarse, no quería llorar, no delante de él.── Te estoy dando tu espacio personal, ¿no es lo que querías?

──En ningún momento te dije que me evitarás.

──En ningún momento me dijiste que no lo hiciera.

Un suspiro por parte de ambos se hizo presente, quedando en un incómodo silencio por varios segundos, hasta que el mayor se atrevió a hablar.

──No se la entregué.