Después de haber estado en el Árbol, Lance bajó de el con ayuda de Edward, había una cabaña cerca, una que pertenecía a Carlisle pero la usaban solamente cuando guardaban Sangre de repuesto, para esas ocasiones en las que se cerraba la temporada de Caza
–¿A dónde vamos? -Preguntó Lance al ver que recorrían un pequeño camino hacia la montaña
–A un lugar, mágico -Respondió Edward- e igual de hermoso que tú
Ambos caminaron hasta llegar casi a la cima, entonces Lance vió que había una hermosa cabañita no muy grande pero acogedora & a la vez muy linda
–Hemos llegado -Dijo Edward-
–¿Me hiciste caminar hasta aquí por una cabaña? -Dijo Lance algo desilusionado-
–No es sólo una cabaña, es algo que quiero sentir solamente contigo -Respondió Edward haciendo enrojecer las mejillas de Lance- ven Lance, Entra
Edward encendió las luces e hizo pasar a Lance, Edward había pasado la noche anterior limpiando el lugar para que cuando llegara Lance estuviera bien para él
Edward no limpiaba comúnmente eso, es más jamás nadie lo había hecho, solamente Lance era capaz de hacer que él hiciera cosas que no hacía por cuenta propia–Y... Dime -Preguntó Edward- ¿Te gusta?
–Es pequeño, pero -Respondió Lance- es lindo & muy agradable
–Creí que dirías otra cosa -Se alivió Edward-
–No... Sólo que pensé que me llevarías a otro lugar -Dijo Lance-
–Si quieres podemos irnos -Propuso Edward-
–No... Está bien -Contestó Lance- contigo a tu lado todo está bien
–Entonces supongo que te gusta -Dijo Edward-
–Casi tanto como tú -Halagó Lance-
Edward Rió ante las palabras del último
–Lance puedes sentarte y encender la televisión -Invitó Edward- yo... Iré por algunas cosas ¿Te parece?
–No me dejarás abandonado ¿Verdad? -Le preguntó Lance a Edward-
–Jamás -Respondió-
Edward dejó a Lance en la cabaña, fue a un lugar en donde había dejado leña que había cortado anteriormente para encender la chimenea, había empezado a hacer fresco & en las montañas bajaba mucho la temperatura por las noches
Lance Había empezado a sentir la brisa de la última hora de la tarde, fue a la cocina, había muchas cosas, parecía que habían rellenado La almacena apenas en ese momento, encontró una bolsa de Cocoa & preparó una poca en un recipiente, para antojo de la tarde, Había un sillón-Cama en la sala & una televisión en el frente, La encendió & puso un canal en el que habían estado pasando películas, aún era viernes
Eran las 06:30Se abrió la puerta, era Edward venía cargando leña entre sus brazos
–Volviste -Celebró Lance- por un momento creí que me dejarías aquí sólo
–Nunca lo haría, jamás habrá una cosa que me obligue a dejarte
–Preparé cocoa -Preguntó Edward- ¿Quieres?
–Ah supongo -Respondió Edward- sólo déjame encender la chimenea & ya regreso
–Ok, está bien -Dijo Lance-
Edward tomó los leños & encendió el fuego
Ya se empezaba a sentir algo de frío en la montaña, aunque para Lance era agradable
Rápidamente el fuego tomó más fuerza & enseguida había una fogata, Había cobijas en el sillón, Edward sabía que a Lance le gustaba eso, de pronto el aire comenzaba a soplar más & Edward se metió a las sábanas con Lance, ambos estaban platicando ni siquiera ponían atención a la película, Pero todo estaba bien para ellos dos
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El Chico de los Labios Rojos
VampirosA muchos de nosotros nos apasionan las historias imposibles de amor y de vampiros Esta historia está inspirada en Twilight Lancelot, un chico reservado tímido y de pocas palabras Edward Cullen, un vampiro de 118 años Lancelot acaba de mudarse a Fork...