Al día siguiente...
Krista se levantó de su cama, normalmente se levanta a las 9 y 20 de la mañana, pero hoy se levantó temprano.
Ni su propia madre sabía porque Krista se había levantado tan temprano y con tanta energía.
Asi que le preguntó.
-Krista, a donde vas a ir hoy?
Y Krista le respondió.
-Déjame madre, a ti no te incumbe.
Y Krista se fue corriendo hacia afuera sin desayunar.
Era raro ya que los Jueves eran libres para el Colegio Safiro, pero Krista no se dirigía hacia allí, Krista se fue por un lugar oscuro, muy oscuro, no se podría ver la mínima cosa, siguió caminando y escuchó a alguien hablar, se asomó por una esquina para ver quien era, era César, estaba con una chica y un chico, Krista no los reconocía.
De pronto, llegó alguien detrás de Krista y la empujó, causando que César y los demás se dieran cuenta de ella.
Krista se avergonzó muchisimo, y vió a la persona que la empujó.
No vio muy bien el rostro pero vió unos ojos rojos como rosas, un traje formal y unos dientes afilados.
Krista le dio miedo, hasta logró pensar que era un hombre lobo, pero luego César la levantó del piso, y le dijo.
-Deja en paz a Krista, Doimo.
-Quien es ella César, no que no te juntarías con débiles? Dijo aquella persona que empujó a Krista.
Apenas dijo eso, la persona que habia empujado a Krista (Doimo) se fue y desapareció en las sombras.
César aún estaba confundido por lo que había pasado, que estaba haciendo Krista ahí, asi que llegó la otra chica que estaba con él.
-Y esta tipa quien es? Acaso de verdad te juntas con débiles? Preguntó la chica
César no se veía feliz con tal comentario, hasta llegó al punto de golpear a la chica.
-CUAL ES TU PROBLEMA?! Gritó la chica.
-Yo nunca me relaciono con débiles, eso quiere decir que ella no es débil, Soey.
Dijo César.Krista no sabía nada de lo que pasaba, solo sabía que aquella chica se llamaba Soey.
-Uh- y-yo, no creo que debería estar aqui, mejor me voy a donde iba a ir. Dijo Krista con una cara aterrada.
César la soltó, y la dejó irse.
Krista salió corriendo al hospital, aunque fuera irrespetuosa, aún tenía sentimientos.
Llegó al hospital y le gritó a la enfermera que la dejará ver a su abuela Viviana.
Llegó a la habitación de su abuela, y lo que menos se esperaba era su abuela apunto de morir.
-Acércate, Krista.
-Quiero decirte algo importante antes de que muera. Suplicó la abuela.
Krista se acercó, mientras recorrían las lagrimas por su cara.
-Krista, querida, ya no me queda mucho tiempo, y quiero que sepas que tu eres la heredera de todos mis terrenos.
Krista quedó asombrada, pero no quitaba el hecho de que seguía triste.
Pero lo que menos se imaginaba Krista era que sus padres la escuchaban.
Continuará......
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Los nuevos petalos
RomanceUna mujer de 16 años, Krista, intenta volver a ser como fue 7 años antes, va poco a poco cambiando con ayuda de sus amigos y amigas, mientras su familia tiene un plan para acabarla ya que su abuela murio y ella fue la que se quedo con todos los terr...