EL PASADO

💚 25 💙

A pasado una semana y Diego no aparece, Dana y yo apenas comemos y dormimos, pasamos el día  buscando todo tipo Información para sacar a Diego de ahí, cada minuto intento no perder la esperanza se que pronto lo lograremos.
Cada que despierto lo busco a un lado de mi, quiero abrazarlo, ver sus hermosos ojos, su sonrisa luminosa y esos labios que me encantan

Estábamos en la sala, esperando que nos llegará información que Dana le pidió a un amigo suyo

Jorge: Diego tiene que aparecer, no pudo desaparecer así como así -  hablé con preocupación
Dana: esperemos la información de mi amigo, quizá nos tenga algo bueno - dijo con calma, ella se ha encargado de calmarme, de consolarme cada que me siento triste
Jorge: Diego, estoy haciendo todo lo que puedo para encontrarte mi solecito, tu solo se fuerte mi sol - susurré tomando aquella hodie que aún tiene su olor
Dana: dónde quedó el Jorge al que todos le temian, el que casi mata a golpes a Diego, el bully de la escuela, aquel chico que no demostraba sentimientos que tanto me dijo Diego - dijo Dana, Diego le había contando de mi, el estaba enamorado de mi desde antes
Jorge: como sabes eso? - pregunté con mi ceño fruncido
Dana: de verdad creíste que Diego apenas te quería, el llevaba un tiempo enamorado de ti - soltó aquellas palabras de golpe
Jorge: Diego me hizo cambiar, yo nunca quise herir a nadie, cuando era pequeño a mi me hacían bullying, cuando llegamos aquí decidí que nadie iba a verme débil - suspiré - cuando empeze a hablar con Diego, supe la maravilla de persona que es, quería protegerlo de todo, yo me lo prometí, pasamos un tiempo juntos cuando casi lo mató a golpes, poco a poco me enamore de el, pasamos un fin de semana en mi casa de campo y ahí lo bese, el tuvo una crisis y sentí aún más esas ganas de estar con el y protegerlo. Poco a poco me fui enamorando más. Diego se convirtió en mi luz en medio de una oscuridad profunda, mi sonrisa en medio de una tristeza desgarradora, es ese rayito de luz, de esperanza, de alegría, cada minuto que ha pasado sin el siento que se llevaron una parte mi - para este momento estaba soltando lágrimas sin piedad -  El puede tener 18 años pero siempre sera mi niño, lo amo con su pasado, con sus berrinches, sus antojos de embarazada, sus bailes raros, lo amo, cada parte de el, me enamore de cada habilidad pero también de cada defecto, lo amo así, amo a mi solecito, AMO a Diego Cárdenas Argüelles - Dana me abrazo y ambos empezamos a llorar

Dana: no sabía todo lo que sentías por el, el siempre te vio como un imposible, cuando logre salir de ahí, debe estar muy orgulloso de el, de lograr aquello que nunca creyó lograr - dijo entre lágrimas
Jorge: y tú cómo conociste a Diego, por lo que se eres su única amiga - dije limpiando mis lágrimas
Dana: ahh - suspiro - su madre y mi madre eran amigas, éramos vecinos, desde ahí éramos amigos, cuando su madre murió, el estaba muy mal, yo iba a su casa y jugábamos pero por algún motivo siempre lloraba. Paso un año y un día llegó a nuestra casa, estaba llorando, yo aún recuerdo la imagen de mi niño, con el cabello despeinado, su camisita rota, un llanto desgarrador y sus pantalones bañados en sangre, su padre y su hermano abusaron de el, sin piedad alguna - soltó un fuerte sollozo - mi madre y yo fuimos a poner una denuncia, pero por algún motivo está no procedió, mi madre y yo pensamos que su padre pago para que no se lo llevarán, siempre escuchábamos los gritos de Diego, pidiendo que lo dejarán, que no le hicieran nada, después llegaba a nuestra a casa pidiendo ayuda, denunciamos más de una vez pero nunca procedió, escuchábamos su llanto por las noches, hasta que un día dejo de luchar, dejo de ir a nuestra casa, ya no escuchábamos sus gritos, sabíamos que seguía ahí, por qué lograbamos escuchar su llanto por las noches. Pasaron los años, pediamos ayuda y nunca llegaba, cuando me dieron una oportunidad de estudiar en España hablé con el, no quería dejarlo solo lo pero el me pidió que viviera por el - de nuevo un fuerte sollozo de su parte de hizo presente y yo comencé a llorar - que hiciera lo que el probablemente nunca podría hacer, que tuviera amigos por el, que amará por el, que fuera feliz por el, así que se lo prometí y me fui a España no sin antes pedirle a mi mama me mantuviera informada, yo diario le llamaba, un día me dijo que su padre le dió un apartamento, pero que seguiría con el "trabajo". Cuando regrese y lo ví con esa sonrisa en su rostro, desde que el era un niño de 4 años yo no veía aquella sonrisa, esa sonrisa real, sincera, porque el siempre sonreía, pero está era totalmente falsa. Me sentí muy feliz por el, llegó contigo, aquel chico del que me hablo por tantas noches, aquel chico de pelo rizado y ojitos bonitos que hacia su corazón latir rápido    -suspiro - el siempre será mi bebé, mi niño, solo quiero verlo feliz y se que tú eres eso que lo hace feliz.
Jorge: creeme que lo amo, yo también lo quiero ver feliz y de eso me encargaré yo - dije aún entre sollozos, ambos estábamos llorando, cuando el sonido del celular de Dana nos saco de nuestros pensamientos, tomo su celular y vio aquel mensaje y sus lágrimas corrieron por su mejilla pero una sonrisa tímida asomó en su rostro

Jorge: que pasa Dana - pregunté, temia que fuera algo malo
Dana: sabe dónde se encuentra Diego 

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Hello chiques aquí está un capítulo más, espero les guste no se olviden de votar y comentar que les pareció

Maratón 3/3

Les amo 💖