Descubierta (One-Shot) Bakugou x Lectora +18

"CAPÍTULO ÚNICO"

DESCUBIERTA

                         

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   Eres una joven aspirante a Heroína, perteneces a la clase 3-A.
Fuiste incorporada a aquel departamento cuando cursaron al segundo año de estudios, pues el potencial que demostraste en tu primer año, llevo al directivo a tomar aquella decisión.

   Las reacciones de la sección A al descubrir a su nueva integrante fue obviamente de sorpresa, pero sobretodo, te aceptaron sin ningún problema, y en menos de un mes ya encajabas muy bien con todos.
   Bueno, con todos menos con un chico rubio con un quirk tan explosivo como su temperamento. A quien habías admirado desde el primer festival deportivo, cuando fue coronado como el número uno, tal como había dicho que sería.

No era nada grave, simplemente sus personalidades no congeniaban. Eso no evitó que ese sentimiento de atracción aumentará con el paso del tiempo.

Te gustaba y mucho...

Pero a pesar de ello, jamás te atreviste a confesarte. Lo más probable era un rechazo y aquello era preferible evitar.

No obstante,cuando solo un mes faltaba para que por fin llegara su graduación; ocurrió algo que, definitivamente, lo cambió todo...

~•~

   Eran cerca de las 11 pm, día sábado. Acostumbras entrenar hasta tarde los fines de semana, ya que tú don necesita que poseas una fuerte resistencia física, por lo tanto es fundamental aquel esfuerzo. Además, la profesión con la que soñabas de pequeña estaba a tu alcance, casi cruzando la calle y te sentías tan bien que todo el empeño valía la pena.

  
   Te encontrabas tomando una ducha para quitar todo el sudor, producto del arduo entrenamiento, era de esperarse que gran parte de tus compañeros yacían en sus habitaciones, durmiendo.

   Por lo tanto, las duchas de los vestidores que se encontraban en el primer piso de los dormitorios fueron las seleccionadas para asearte a esa hora

¿Razón? Son las que, normalmente, tienen agua caliente todo el día.

   No había problema, no era la primera vez que hacías aquello, incluso aveces algunas de las chicas también te acompañaban. Por desgracia o suerte, este día, todas estaban muy agotadas como para seguir ejercitándose.

   Te diste tu tiempo, era relajante dejar caer el agua cálida en tu cara, sientes como el entumecimiento desaparece poco a poco, y entonces todos tus músculos se liberan, te sientes más liviana y lista para tener un buen sueño.

Pero, de pronto lo recuerdas y comienzas a pensar en lo bien que se veía hoy en el gimnasio.
Ese cuerpo tan perfectamente trabajado que creció más este año, esos ojos rojos tan llamativos y ese cabello rubio opaco que olía tan bien... Sin mencionar su fragancia en sí, tan agradable; tan adictivo y peligroso.

   Una cosa llevo a la otra y terminaste por imaginarlo con un poco menos de ropa, como cuando les tocaban las clases de natación y lo veías entrar con su ceño fruncido, sin camisa; mostrando su abdomen y esa cintura tan exquisita, sus brazos y piernas fuertes como todo su ser, y esas manos, cuánto anhelas ser tocada por aquellas manos que se ven tan suaves y bruscas a la vez.

~•~

   Saliste sin pudor alguno del cubículo de baño donde estabas, habías olvidado la toalla en el banco del medio de los vestidores, pero qué más da, estas completamente sola.