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Miró serio la destrucción que había provocado en aquel universo, no le gusto ver a las familias heridas, niños llorando y gritando ya sea por ayuda como por temor a ser asesinados.

Pero aún así, mantenía un mirar serio y amenazante, había preferido ser el Guardia del monarca a que siquiera atacar a los inocentes.

Lo único que aceptaba de aquello, era el hecho de que no mataban a nadie, pero a pesar de eso, no aplaudía que torturaban a la gente.

Se le había olvidado que cierta pesadilla podía sentir su negatividad, lo cual parecía alimentarlo mucho más que la negatividad provocada en el universo actual.

- (Se nota que quieres hacer algo para impedir esta masacre) -pensó al ver como el Guardia apretaba con fuerza el mango del cuchillo.

Viendo como desviaba la mirada cerrando levemente sus cuencas, así que se acercó y le sujetó de los pómulos, y con sus extensiones sus brazos.

- Por que no miras, mh? -Sonrió con burla.

Viendo como cerraba con fuerza sus cuencas, negando ver la masacre.

- Eres débil en ese sentido. Una desventaja por haber sido un Guardia Real que protegia gente así, no? -lo dicho tensó cada vez más al monocromático.

Sintiendo al más alto tan cerca especialmente, le incomodaba, y aquella voz tan ronca y dominante no ayudaba en nada.

En aquel momento estaba a merced de la pesadilla, quien solo miraba atento cualquier acción que hiciera el más bajo, absorbiendo aquella negatividad que tanto le favorecía.

Para después alejarse del monocromático y soltarlo, mirando hacia sus secuaces.

Notando que aparecía un portal, y de allí salia exaltado el protector de Au's, pero cuando salieron, también pudo ver que el de cicatriz en su pómulo miraba seriamente al recién llegado.

- Vamonos! -Ordenó nightmare al no tener nada más que hacer allí.

Así que hizo un portal, viendo como el monocromático era el último en entrar al estar protegiéndolos de cualquier ataque por la espalda.

- Yujuuu! Jajajaj! Debieron ver sus caras! Para retratar! -sonreía burlón killer.

Siendo acompañado por horror y dust, quienes animados festejaban su victoria.

- Eyy, X parlante! -se acercó el demente al monocromático.

Quien esquivo su abrazo, sin querer mancharse de la sangre de inocentes, le traía malos recuerdos.

- Tengo que irme. -Habló teletransportandose rápidamente lejos.

- Ey... -llamó chara al estar un rato viendo las expresiones del dueño del cuerpo.

- porque me recomendaste estar en su grupo?? Yo no quiero torturar a nadie.

El Albino no supo que decir, no sabía cómo explicarlo exactamente, así que solo suspiro rendido.

- Entonces has lo que quieras... -Se abrazó a si mismo para después volver a desaparecer de la vista del contrario.

Quien miraba serio el suelo de su universo, solo se sentó, tocando levemente sus pómulos, notando que estaba llorando.

- Aquí está. -Escuchó detrás suyo.

Y al reconocer la voz, rápidamente oculto sus lágrimas en su bufanda, mientras se cubría la cabeza.

- Que haces aquí?? Quiero estar solo. -Pidió apoyándose en sus rodillas, viendo el vacío mismo.

- Cross, estas emitiendo mucha negatividad, ink pudo ver que no es tu intención lastimar a nadie, por eso vinimos -se tensó al reconocer la voz del soñador.

- dije que quiero estar solo. -Habló un poco más fuerte.

Teniendo un escalofrío al sentir que le abrazaban por la espalda, pudo por un momento sentir paz, tranquilidad, pero también sintió mucha culpa.

A Base De MentirasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora