Cherry Blossom | KookV ♡ [Adaptacion]

Capítulo 3

Su vida como cirujano en urgencias era más ajetreada de lo que todo el mundo pensaba, con largos turnos de 48 horas y podía pasar de 10 horas en un pabellón quirúrgico realizando una sola intervención pero siempre se daba tiempo para descansar y recuperarse.

La idea principal de vivir de su pasión no era matarse.

Taehyung era una persona de gustos sencillos, que amaba la música clásica, ver documentales en la televisión sobre el universo y disfrutar de películas románticas que lo hacían llorar por sus finales tan emotivos.

Salía con sus amigos de vez en cuando aunque estos intentaran sacarlo de casa a toda costa, prefería la tranquilidad de estar bebiendo una taza de café acompañado de un buen libro que estar en un bar donde seguramente terminaría bailando encima de la barra completamente ebrio y le pediría a cualquier desconocido su número telefónico para después jamás llamarlo.

Oh, claro, también se pondría a coquetear con quien se le atravesara por delante y cuando intentaran besarlo diría graciosamente su fobia, con orgullo, como si fuese una característica más de su personalidad pero solos alcanzaba a hacerlo porque si ese no era el caso terminaría desmayándose en medio de la pista de baile.

Y no era porque le había ocurrido antes.

Claro que no.

Solo cerca de 100 veces donde intento tener una pareja y falló miserablemente.

En el intento número 99 se dio por vencido y prefirió vivir el amor a través de los miles de libros que tenía en las repisas de su habitación y de las películas que reproducía antes de dormir, era menos vergonzoso y más interesante.

¿Por qué intentar crear una historia de amor si para eso existían los escritores y directores?

¿Quien era él para despreciar su trabajo?

Esas eran sus respuestas cada vez que su familia y amigos le preguntaban si había conseguido novio.

Hace más de un año había asumido si filemafobia, aprendió a vivir con ella y también aprendió que el amor no estaba hecho para todos.

Él era uno de los desafortunados.

Había ido a terapias donde no obtuvo ningún resultado o que dejaba a la mitad, nunca tuvo el incentivo suficiente para ser constante, jamás se enamoró de alguien que lo aceptara y ayudara, sus cinco antiguos novios, que no le duraron más de dos semanas, se aburrieron de esperar y cómo no hacerlo, no podían besarlo, ni siquiera en la mejilla o terminaba desmayándose sin importar el lugar.

Nadie iba a estar con alguien como él.

Y estaba bien.

Tenía un lindo y dormilón gato que había recogido de la calle hace cinco meses, su nombre era Tommy; su compañero, el primero de muchos.