Caminamos por un buen rato. Ya habíamos salido del pueblo, cuando de repente un globo de agua aterrizo en mi cabeza empapándome.
-Quien mierdas me a tirado el globo?!.-Grite, mientras unos niños con más globos de agua salían de su escondite. Era un grupo grande y no muy mayores, no tenían más de doce años , vamos que a fuerza les ganábamos.
-Que hacéis aquí?! Es nuestro pueblo fuera de aquí!-Empezaron a tirarnos más globos de agua, ¿que les pasa a estos niños? No entiendo porque se meten con nosotras, no pueden estar más aburridos.
-No es vuestro pueblo y tenemos derecho a estar aquí.-Alba se les acerco.
-Sois unas niñatas, no tenéis derecho.-Nos empezaron a grabar con un móvil de vete a saber de que años era. Me acerque a Alba y le dije que mejor ignorarlos e irnos a la tienda. Era una tienda de ropa, estaba un poco apartada del centro de el pueblo
-No se que se piensan estos.-Le dije a Alba, mientras miraba algunos tops y camisetas, ya empezaba la temporada de otoño y se notaba, todos los colores eran marrones o parecidos.
-Nada, son unos subnormales, si los niñatos son ellos.
-Si, mejor ignorarlos, ya se irán.
Decidimos salir de la tienda después de estar un rato en la tienda. Para nuestra sorpresa los niños siguen ahí. Esta vez eran más, unos diez, ni que hubiéramos cometido un crimen.
-Que miráis ahí, si no tienes tetas, para ponerte un top de eso.-Los niños seguían grabando, por suerte solo les quedaban dos globos de agua, empezaron a decirnos mil insultos, algunos que no había oído en mi vida, si que tenían tiempo libre y mucho, porque como para insultar a alguien con abrazafarolas o robaperas... Por lo menos tienen imaginación . No me iba a meter a pelearme con ellos no llegaba a nada, y luego la bronca de los profes me la llevaría yo por pegar a un niño pequeño.
Al poco tiempo llego la policía y los cagados se fueron, pero no todos. La policía empezó a calmarlos, pero no servía de nada ellos seguían gritando y diciendo cosas que ni yo entendía, calambuca, que es eso? Bueno tampoco importa.
-Que ha pasado?-Nos pregunto la poli cuando por fin se calmaron. Le contamos todo y nos dijo que nos fuéramos y ya está.
Nos fuimos, pero no a donde los profes, para el lado contrario, queríamos seguir investigando. Pero los niños nos empezaron a seguir. Algunos iban hasta con moto, ya que tenían amigos mayores.
ESTÁS LEYENDO
QUELIDO DAIRIO
HumorIMPORTANTE: Esta historia esta mal escrita aposta, tiene faltas de ortografía y de mas cosas, lo estoy haciendo porque me aburro.