80 dias olvidandote

El accidente de los Dachs (día 6)

Los rayos del sol reflejan en mi cara, despierto de golpe, mi gata duerme cerca mío.
-Ohh no Dios mio, mi gata rompió la ventana y esta sangrando, ¡Eso es una paloma!, esto es demasiado- digo en voz alta, mi padre entra a mi habitación,
-¿qué sucede?- me pregunta. Señaló a la ventana, veo a mi gata y está sangrando así que me pongo una sudadera y la tomo, bajo y agarro mi bici, me dirijo al veterinario con tanta prisa que no pienso en nada más.

*Llamada entrante*
Alejo

Mientras atienden a mi gata, mi celular vibra, y veo que es Alejo, no me atrevo a contestar; ¡él es un idiota!, como pudo, la verdad ya se me había olvidado la foto de anoche.

Su gata está bien- me dice el veterinario, solo debe darle estos medicamentos y desinfectante la herida.
Asiento con la cabeza la tomó y regreso a casa.
Paso por la casa de los Dachs y veo que están de salida, saludo amablemente a Don Frédéric y a doña Anastasia, y veo salir a Angel, esta algo molesto por que lo salude pero no me respondió el saludo, sin embargo no me importo.

Sigo mi camino y llego a mi casa, veo a Alejo en la puerta; suspiro y no lo saludo y solo entro a casa, mi madre me dice que no sea grosera. -¡NO TE METAS MAMÁ, ESTE TIPO ES UN IDIOTA!- le respondo golpeando la puerta, subo a mi habitación y me recuesto en la cama aún sin arreglar, mi padre ya había arreglado la ventana y eso me daba alivio, aunque me preguntaba como es que se estrelló con la ventana.

Alejo sigue gritando afuera, así que decido salir y hablar con valentía,- ¡YA NO QUIERO SABER MAS NADA DE TI, LARGATE!- grito enojada, al darme la vuelta me dice,- yo envié esa foto a Angel, no te quería contar nada pero el drogo a mi hermana Alen en un paseo, donde las enemigas de ella la dejaron en ridículo, era la hora de que pagará por eso, además Alicia fue mi novia cuando estudie en la Academia Portside en California, y Michelle estaba triste aún no recuerdo por qué, y Laura primero que todo no se que hacía ella en ese lugar, y segundo es la novia de Erik, estaba muy borracho Sofia, por favor perdóname-

-Lárgate- le digo y escucho que prende su coche y se va.

Pasan un par de horas mis padres reciben una llamada así que  la cual le informan que su jefe acaba de tener un accidente, se notan demasiado preocupados así que decido ir con ellos al hospital donde estaban, mis padres se habían encariñado mucho con los Dachs.
Al llegar al hospital nos dicen que necesitan sangre tipo A- para Ángel, el había sido el más afectado además del conductor del otro carro.

Mi padre y yo éramos A- pero mi padre no podía dar sangre por que estaba tomando medicamentos, fui y me realizaron los exámenes para ver si éramos compatibles, en el recorrido escucho que el otro paciente es Alejandro, -NO PUEDE SER, NO PUEDE SER ALEJO MEJIA- me salta un grito. Le pregunto a la enfermera, quien había sido el otro herido, me dice que estaba muy grave, iba ebrio y con exceso de velocidad, además la acompañante estaba con bastantes golpes por el choque, cuando me entero de su nombre me pasa un escalofrío por todo mi ser, -Alejandro Mejía y Michelle Barbens- me dice la enfermera. Me recargo en la pared y una lágrima fría baja por mi mejilla, como es posible que sean ellos. Me llevan a la sala de espera de nuevo y me informan que ahora pase a donar la sangre. Mis padres están sentados, se levantan y me preguntan que había pasado, por que lloraba. Abrazo a mi madre y le dijo Alejo es el que se choco con los Dachs. Iba ebrio.

Me abraza fuerte y me dice que estará bien, llega el médico diciendo que don Frédéric estaba estable, Antonella solo tiene unas heridas, Doña Anastasia esta en observación y Ángel entraba a cirugía, el iba manejando el auto nos dice el oficial de tránsito. Meneo la cabeza y paso donde me indica el doctor.

-La aguja es demasiado grande, esto duele mucho- le digo a la enfermera, me dice que estaré bien. Cierra la puerta, recuerdo mis audífonos en el bolsillo de mi chaqueta así que decido escuchar música mientras pasa el tiempo.

Me quedo tan concentrada, que no veo cuando entra Doña Anastasia, me doy de cuenta cuando  la enfermera cierra la puerta de golpe, la veo con una mirada de  melancolía,
- íbamos tan bien, Ángel estaba contento, esta mañana cuando te vio dijo que eras muy hermosa, que tu mirada parecía un hermoso atardecer, veía ternura, y a la vez tristeza, el sabe por lo que pásaste, también vi la imagen, lo siento mucho, pero puedo decirte que fue Ángel quien te envió la foto anoche, dijo que el no te merecía, que no debías vivir en un engaño, y ahora estás aquí donando sangre por su vida- una lágrima cae por su mejilla sus ojos se clavan en los míos y me dice -Dios te destinó para salvarle la vida a Ángel, gracias- se acerca y me abraza con una calidez, me sentí segura con ella, es tan perfecta, única, -doy por seguro que así Dios lo destinó- respondo. Llega de nuevo la enfermera y me retira la aguja y me dice eso es todo. La enfermera sale, me colocó mi chaqueta, veo a Doña Anastasia y le digo,
- el estará bien, se recuperará- le doy una sonrisa y salgo de la habitación.

Me recuesto en el muro, vuelvo a donde están mis padres, ellos están cansados así que les digo que se vayan, se llevan a Antonella con ellos. Me quedo en esa sala, hay una señora embarazada, un señor con un yeso en su pierna izquierda, una niña y veo un joven que esta de espaldas, con chaqueta negra y el gorro de su chaqueta cubre su cabeza. Cuando vuelve el doctor me informa que Ángel ya salió de la cirugía, salgo corriendo para la habitación de Doña Anastasia para darle la buena noticia pero a medio camino me estrelló con el joven de chaqueta negra, su olor es el mismo perfume de Erik, miro su rostro, es él, tiene los ojos hinchados, la cara golpeada y un corte en su labio, su mirada es fría, triste, ahogada.

Me abraza, tan fuerte que puedo sentir los latidos de su corazón, tan fuerte que el entorno queda silenciado, se hecha a llorar en mi hombro, y sale un murmullo de su boca.

¡Lo siento!- y esta tan frío, tan golpeado que puedo ver que esta mal, mi corazón cruje como un papel, mi mente recuerda la vez que nos abrazamos por primera vez, pero ya no puedo sentir lo mismo que esa vez, me duele verlo así, su mejor amigo esta hospitalizado en este lugar, su novia había tenido una orgía con su mejor amigo, su tío había muerto. Me alejó de él, y le digo:

- todo estará bien- se balanza hacia mi y junta sus labios con los mío, pero me apartó  de él, sus labios son fríos y ya no quiero sentir esta sensación.

Al pasar esto se va, y quedo en medio del pasillo, confundida, enojada y triste. Ya hace un mes que terminamos no es justo que vuelva a confundirme, vuelve mi mente a Angel, voy a la habitación de Doña Anastasia y le informo lo que me dijo el doctor, su cara se ilumina, y se limpia las lágrimas, así que me dispongo a salir y ella me dice - gracias-, le doy una leve sonrisa y salgo de la habitación.

Me dirijo a la habitación de Alejandro, y esta Laura, mi corazón se quebranta y veo que ella lo besa, me recuesto en la pared y empiezo a llorar, me siento por un momento y llega la enfermera a decirme que puedo ver a Angel así que me seco las lágrimas y me dirijo al cuarto.

Al llegar lo veo completamente dormido, la enfermera que estaba en el lugar se retira, quedo sola con él, me siento cerca de él, le agradezco por haberme sacado de la relación con Alejo, acaricio su frente y su mejilla, es tan perfecto, un verdadero ángel, el despierta pero antes de que yo diga algo el se sienta tan rápido y toma mis mejillas, se estaba haciendo el dormido y por sobre todo se ve mejor, antes de que pueda retirarme de el lado de él, estampa sus labios en los míos, una vibra pasa por mi cuerpo, siento paz, calidez, ternura, puedo sentir ese beso dentro de mi corazón, me siento tan unida a él que todo desaparece, acaricia mi mejilla y mentón mientras nos besamos, siento un aire tibio dentro de mi, - estoy siendo besada por un ángel- pienso.
Me retiro de él, veo su mirada, sus ojos negros como la misma noche, su mirada tan hermosa que me pierdo en ella pero antes de que pueda decirme algo salgo corriendo de la habitación y me recargo en la puerta, no es cierto.

Mi sonrisa sale de la nada, tocó mis labios con los pulgares, y puedo sentir un mar dentro de mi, puedo sentir mi corazón latir de emoción, puedo sentir vivir en una nube, una nube de donde me hizo volar este chico, me siento tan cerca al sol, tan cerca a las estrellas, y me siento drogada sin estarlo. Aquí es donde pienso que un beso causa tanto estragos y naufragios dentro de mi.

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Un nuevo renacer para Sofia, Angel Erik y Alejo.

La vida sonríe, en esta mañana en la que quiero encontrar un sueño como el de Sofia y vivir en las nubes tan alto como ella.

Gracias por el apoyo, los amo.

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