ROLLERCOSTER.

Untitled Part 1

-MEMORIAS DE UN AUTOR TRISTE-

Roller Coster

He sentido que todo da vueltas, vueltas y vueltas sin un punto fijo de partida solo voy caminando y las calles se van haciendo más largas, como más profundas y al darme cuenta ya he llegado y tengo que girar cuadra, medio segundo después estas tirado en el suelo de algún lugar inconcluso y llegas a la horrible conclusión que te estas echando a perder, te levantas, parpadeo, estas caminando en algún lugar confuso donde tiembla, acto seguido, te levantas de nuevo parpadeas, has llegado hola abué, hola papá, has buena cara, sube las escaleras, da vueltas el corredor es una serpiente eterna que se va alejando cada vez mas de mí, llego al cuarto miro al techo y siento un temblor enorme dentro de mí, algo no anda bien tío, algo está mal conmigo, han pasado dos horas en 5 minutos, fue como un parpadeo donde los ojos se mantuvieron en calma 2 horas me levanto la boca está seca, me sabe a plomo y a pequeñas sonrisitas blancas y a veces coloridas, me levanto, todo gira un poco menos, maleta, billetera, teléfono, adiós papá, cuídate abue. Voy en un autobús, cierro algo los ojos y ya he llegado me baja de golpe el color del día, veo todo lo que veo cada día de mi vida y se ve como tan diferente, todo es desconocido, tome asiento y espere a empezar mi entrenamiento, mire un pequeño candado y todo no paraba de moverse, entrene, nos vemos profe, nos vemos amigos, nos vemos idiotas niños ricos con autos caros, acércame a la parada del autobús, un compañero se me acerca y muestra un tarro, creo que debió ver la cara pálida, los ojos perdidos y los labios secos. Han pasado dos horas en 5 minutos, estoy caminando avenida abajo por un lugar oscuro junto el  mientras nos tambaleamos, decimos estupideces, jadeó un momento y estoy arrojado en el piso, parece una ciclo ruta, por donde la gente pasa y ve un chico con un gran buzo de lana y un gastado jean con Vans, junto con un chico de ropa muy fina, como con un gran teléfono, ambos tan iguales, tan perdidos, tan idos y sacados del camino, han pasado dos horas, "miradme, miradme maldito escandaloso, estoy feliz, estoy muriendo, estoy sonriendo desde el otro lado de ti, estoy maldiciéndote, ¿Te burlas de mí? Sé que estas sacado de onda, esta vez tome yo el control, tu estas allí y yo acá, tu estas intentando encajar mientras yo te saco más del camino, te enloquecí, creo que gane, miradme, miradme! Soy un Roller Coster a toda marcha, que saca y hierbe tu sangre a altos grados, la eleva a tu cabeza, mira como estoy aquí junto a ti en el suelo gritándole al cielo y las estrellas que estoy bien, que estoy un poco desviado de la cordura pero que el ácido no ha perpetrado en lo total".

Estoy mareado, creo que he vomitado, tal vez unas tres veces, estamos en la parada del autobús, llega primero el de él y se marcha, acto seguido en unos 3 minutos el mío, estoy empapado en sudor, pálido y con la ropa húmeda por el roció del pasto, jadeó, llego a casa me duermo, despierto en mitad de la noche, algo no está bien esta como bien vuelto mierda, las cosas se han venido de bajón de nuevo estoy sudando, preferiblemente  estos son los momentos que eligió el para mí, los momentos en que me siento a llorar y a odiarme y odiarlo a él, los momentos que el eligió para mostrarme que poco a poco no voy siendo nada más que su sombra hecha mierda, soy su pequeño, enclenque y pálido muñeco de trapo, estoy momentos de insomnio a las cuatro de la mañana son los que me da el para ser lo que él ha construido, lo que ha mas bien derrumbado para verme a mí, ver lo que soy y como me voy viniendo abajo, cada vez más y más, para ver sus desastrosos resultados y preguntarme como ha llegado a poseerme tanto, como ha hecho de mí su alquiler. Soy como un barquito, nadando en la mitad de un cielo azul, soy un barco, un naufragio tal vez, lleno de explosivos, lleno de drogas y de memorias escritas, de un libro que muestra claramente la desintegración de una persona en la etapa que han llamado adolescencia, soy un barco, tal vez un bote, que va navegando en un mar de ácido, más bien como en un pantano, con plantas raras y diferentes como alimento, con amaneceres donde la boca te sabe algo a metal, algo a cobre, como a eso de estar a las 6 am totalmente descompuesto y bañado en sudor, con síntomas de algo tras de ti, algo muy poderoso.

 Son las 11:00 pm del día siguiente, del día siguiente, del día siguiente de estar drogado, bañado en sudor, triste, feliz, dudoso y de no ser yo, como que el día siguiente, del día siguiente, del día siguiente de estar como en estado de descomposición.