Un apocalipsis a tu lado - Chris Evans y tu -

CAPÍTULO 1 "El comienzo"

Narrador omnisciente.

___, una chica de caballo negro, tez pálida y hojos claros.

De 25 años de edad, trabaja en una firma de abogados famosa. A pesar de que se le considera joven en su trabajo, es una de las mejores abogadas en su firma.

Ella vive en Atlanta en un departamento de aquella ciudad, era algo pequeño para su gusto, pero se sentía cómoda. Todas las mañanas llevaba a cabo la misma rutina.

_Pi, pi, pi... pi, pi, pi_

Sonaba el despertador indicando que era hora de comenzar con la rutina diaria.

___: Aaah... -- Se quejó la chica apagando la alarma. -- Supongo que es hora de despertar. -- Pensó.

Se levantó un poco desganada por los continuos problemas que tuvo días anteriores, por el hecho de que sus "superiores" no se sentían conformes con su trabajo, pero al menos hoy sería su día libre.

_Brrrr, brrr... brrrr, brrr_

El sonido del teléfono vibrar causó que la chica contestara la llamada sin ver de quién se trataba.

_:
¿Bueno?

X:
¿Sigues adormilada?

_:
-- Revisó de quien se trataba. -- Ah, Rob, no, tiene ratito que desperté, pero no por completo, ¿qué necesitas?

Robert:
Al parecer todo en el despacho es un caos, Adriana está pidiendo los papeles para la demanda contra la empresa de cosméticos.

_:
¿Ya se la pido a Alex?

Robert:
Sí, dice que es un incompetente y que Laura no hace nada.

_:
Pero se supone que él debe de llevar el caso, además es mi día libre. -- Renegó molesta.

Robert:
El mío también, pero Laura sigue con lo mismo de proteger al parásito.

_:
¿Tom está ahí?

Robert:
Sí.

_:
Dile que arregle lo del asunto con Alex.

Robert:
¿Y a Adriana?

_:
D

ile que ahorita se la redacto yo, y que de Laura no se preocupe, yo me voy a encargar de ese asunto.

Robert: Está bien, ahora le digo, ¿quieres que vaya por ti?

_:
Si porfa, trae donas de paso, por favor.

Robert:
Okay, adiós -- Colgó.

Comenzó a desvestirse y se metió a la ducha, 20 minutos después se estaba cambiando.Salió de su departamento para poder salir de aquel gran edificio e ir a su trabajo.

Al salir su mejor amigo lo esperaba en aquel auto deportivo gris.

Robert: Hola bonita -- Saludo entregándole lo que sería su desayuno.