Capitulo uno

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                                                                                                Cafebritica

Bien comenzamos desde el lugar donde lo conocí, en una cafetería de mi pueblo "olanda", si en la cafetería, tenía 15 años y el 16, el trabajará en la cafetería, era el del mostrador.

Era un día normal iba saliendo de mi escuela y mire este lugar nuevo "cafebritica" si te soy sincera lo primero que pensé cuando leei el título pensé -que nombre tan estupido- pero bueno vamos a darle una oportunidad y aparte me encanta el café, ósea a quien no le gusta es de lo mejor, entonces ahí es cuando mire al mi primer amor cuando entre lo primero que mire fue a un chico alto con el cabello oscuro los ojos verdes llegando a café, piel blanca, labios gruesos, sejas gruesas y un poco de pecas- Dios de donde sacaron a este chicos?-y su mirada fue directa a mi, me imagino por qué al entrar suena un timbre, me puse muy nerviosa socializar y hablar con chicos guapos no es lo mío, y me estaba arrepintiéndome de haber entrado ya que le tenía que hablar y las manos ya me estaban sudando y nervios en mi abdomen , definitivamente no vuelvo a venir a ese lugar, pero claro que no iba a irme ya estaba aquí y vas a pedirte un café descafeinado, y así se te quitarán los nervios, si Emma tu puedes, tú puede, solo un café descafeinado, solo eso y te vas como si nada hubiera pasado, si tú puedes, llego a la caja y adivínen quien me atendió así es el chico alto, y su mirada, aaaa ya me morí con solo eso, y revivo cuando escucho que él me habla

-Bienvenida a cafebritica que gusta ordenar-Me dijo el chico amablemente pero alavés frío, y su voz me muro, pero me tengo que concentrarme no vas a a hacer aquí el ridiculo.

-un café descafeinado por favor-Digo yo fríamente, pero por dentro me estaba mirando por su mirada

-Bien en un momento se lo sirvo-Dijo aquel chico alto

Me fui a sentar en una mesa, y agarré mi celular y empezó a usarlo a lo loco ya que no tenia a quien hablar, entonces decido mandarle a mi madre que me había parado en un café, y así pareciera como si estuviera hablando con alguien y tenga vida social lo claro no la tengo, pero claro, nadie se iba a dar cuenta.

La cafetería era pequeña pero bonita, su decoración era de plantas falsas y algunas verdaderas y tenían libros y velas era muy bonita, de echo era un poco a mi estilo, los libros los podía leer no había problema y había gente no tanta,en general era perfecta para pasar las tardes después de la escuela.

Después de unos minutos el chico alto me dio mi café y me fui a mi casa, en el camino realizo que en realidad el café era muy bueno, era exactamente como a mi me gusta, como mi abuela solía preparármelo, ahora si era oficial iba a ir a esa cafetería todos los días después de la escuela.

La tarde en camino a casa era perfecta, era otoño estábamos en octubre mi favorito mes, ¿por qué? Bueno primero a quien no le gusta otoño, otoño tiene días lluviosos, y frescos, ver los árboles en esta temporada me da tranquilidad, aparte en este mes es cumplo años, y me gustan los colores de este mes, también noche de brujas, aunque ya no pido dulces pero aún me sigue gustando, en fin octubre es el mejor mes por muchas razones aparte de estas.

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Llegue a casa, estaba caliente,las cortinas estaban medio cerradas, dejé mi mi suéter en el perchero y gritó.

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⏰ Última actualización: Jan 05, 2022 ⏰

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El chico de la cafeteríaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora