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— Jimin no se que hacer.

— Pidele que te folle, ya está.

Jungkook se sentía en una crisis al no saber que hacer y Jimin no era de mucha ayuda, hace unos minutos se había dado el tiempo de revisar su calendario y mañana llegaba su celo.

— No le voy a decir eso Jimin, yo y Taehyung nos hemos dado un besito, ni siquiera un beso. — Jimin suspiró recostandose en el espaldar de la cama y comiendo sus galletas saladas.

— Entonces no sé, es la única persona de "Confianza" que tienes, a menos que tengas que tocarte tú solo. — Jungkook se cruzó de brazos y se paró de la cama para caminar de un lado hacia otro sin saber que hacer.

— ¿Y si me voy? Mi olor es muy empalagoso, hasta los niños olfatearan el olor.

— ¿Y me dejarás solo con él y esos niños? Para eso me devuelvo a París.

— Joder Jimin.

Jungkook iba a quejarse otra vez pero la puerta fue tocada, miró a Jimin quien se encogió de hombros y le hizo una seña para que abriera la puerta.

— Hola ¿Qué pasó? — Taehyung metió sus manos a sus bolsillos y mordió su labio antes de hablar.

— Yo... Quizás escuché su conversación. — Jimin tapó su boca evitando reírse.

— Yo te dije que habláramos en el baño. — Jungkook le dio una mirada seria que hizo que siguiera comiendo sus galletas en silencio y escuchando la conversación de su amigo con el alfa.

— No es necesario que tengas sexo conmigo Taehyung, me iré hasta que se acabe.

— El mío también es mañana, tampoco tengo con quien pasarlo.

Y ahí Jimin supo que tendría que irse a un hotel junto a esas crías, pero todo será por que su amigo recibiera una buena follada y aprovechara su celo al máximo.

— ¿No te sientes incómodo? Digo, tendremos sexo aún siendo extraños.

— Es raro, pero prefiero eso a que te vayas con otro alfa y se aproveche de ti solo por que estas en tu celo. — Jungkook sonrió com timidez. — Si quieres puedo ir a dejar a los niños donde mis padres.

— ¿Y Jimin...?

— Lo invitamos. — Jimin se ahogó con sus galletas y negó con su dedo, reguló su respiración y respondió.

— Pues te comento que soy pasivo, también necesito atención, no solo ser un espectador de como ustedes follan. — Jungkook le lanzó una almohada para que se callara, Jimin se quejó y toció una vez más.

— Mañana vemos eso ¿Sí? — Taehyung solo asintió. — Gracias.

— Señor Jeon. — Young soo llegó a su lado y abrazó su pierna.

Jimin al escuchar esa voz chillona escondió sus galletas y su jugo en cajita, que principalmente era de los niños.

— Hola pequeño. — Jungkook besó su cabellera y dejó unas caricias en su mejilla.

— Su amigo está tomando uno de mis jugos en cajita. — Jungkook miró a Jimin quien bebía del jugo haciendo ruido. — Papá.

— Solo es un jugo hijo, mañana te compro más.

— ¡Sí! — Gritó Jimin de felicidad.

Jungkook con una pequeña sonrisa se disculpó, Taehyung le dio una última mirada antes de irse junto a Young soo a dormir a su habitación.

Jungkook en cuanto cerró la puerta suspiró y miró a Jimin, quien ya estaba dormido y roncando con la boca abierta, tomó una de las mantas y lo tapó.

Salió de la habitación apagando la luz y caminó por el pasillo hasta dar con su habitación, apenas prendió la luz vio un papel en su cama.

Era un dibujo que había hecho Young soo de ellos cuatro, el tenía su mano junto a la de Taehyung y arriba había un corazón rojo. Mientras que un poco más lejos estaba Young soo junto a Dong su jugando con dinosaurios y muñeca que el le habla regalado para su cumpleaños.

Jungkook definitivamente amaba a esos niños.

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— Adiós niños. — Se despidió el alfa. — Se portan bien, no hagan enojar a los abuelos.

— ¡Ellos no son como tú! — Gritó la señora Kim.

Taehyung solo rodó sus ojos y se subió al auto aún con una sonrisa en su rostro y ya en camino para su casa, el amigo de Jungkook ya se había a no se donde y solo quedaban Jungkook y el en la casa.

Bueno, ahora solo estaba Jungkook en su casa y el ya iba en camino.

Como había dicho ayer era raro que el aceptara tener sexo con Jungkook, de hecho cuando se le había cruzado eso por la mente se había negado rotundamente. Pero prefería eso a que Jungkook se fuera con otro alfa, de solo pensar que se podían aprovechar de su celo o aprovechar de hasta morderlo sin su consentimiento.

Estacionó el auto apenas llegó y bajó de este los más calmado posible, apenas abrió la puerta el aroma de Jungkook literalmente lo cacheteo, era muy dulce, cerró la puerta y se dedicó a buscarlo por la casa.

En las primeras habitaciones no estaba pero aún así el olor se sentía muy fuerte, llegó hasta la habitación de los niños pero tampoco. Solo quedaba la suya y era donde estaba, pues desde la puerta Taehyung escuchaba sus jadeos con su nombre y el olor era más fuerte que en toda la casa.

— Mhm~

Taehyung decidió asomar su cabeza primero viendo a Jungkook en su cama en posición fetal com su respiración agitada.

— Taehyung. — El alfa flaqueo al ser nombrado por Jungkook, quien aún se daba la vuelta pero sentía su olor desde la cama.

— ¿Sí? — Jungkook se paró de la cama con una pequeña sonrisa y lo abrazó, rozando su nariz contra su cuello. Taehyung podía escuchar un pequeño ronroneo de parte de Jungkook.

— Ayudame.

A Taehyung no le dio el tiempo de responder cuando Jungkook ya había juntado sus labios en un ansiado beso. No supo como reaccionar, solo le correspondió moviendo sus labios al ritmo que Jungkook llevaba.

Jungkook tomó sus manos y las llevó hasta sus nalgas, Taehyung alejó sus manos pero Jungkook las volvió a posicionar ahí.

— Tocame.

Y ahí Taehyung supo que sería una tarde bastante larga.

Womb for Rent || Taekook || ADAPTACIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora