Había pasado un tiempo desde ese día en el parque, él cada vez me parecía mejor persona y ya no era solamente en su físico, ahora realmente apreciaba su interior también, lo buena persona que era al acercarse un poco más.
— Carter — llamó Seungmin, quien recién llegaba a la fundación, como de costumbre. Volteé a mirarlo y consigo llevaba una mochila, usualmente no llevaba nada junto a él, obviando la comida.
— ¿Qué trajiste? — dije mirándolo. Él sonrió y miró de reojo la mochila que traía colgada solamente de un tirante.
— Te lo diré luego, ¿puedo hablar con alguno de los encargados? — preguntó, lo cual se me hizo bastante extraño pues siempre que había algún inconveniente optaba por decirme a mí.
— Si, están por allá — dije señalando la oficina aún confundida, él asintió y comenzó a caminar —..pero si necesitas algo, puedes decirme — comenté alcanzandolo.
— Lo sé Carter — afirmó mirándome directamente a los ojos, lo cual hizo que mi corazón comenzara a latir más rápido, él siguió caminando dejándome ahí.
— Aún no lo entiendo, ¿tú sí? — dije acercándome a la jaula de Sally, quien solo me miraba sin entender nada.
Luego de un rato, finalmente salió.
— ¿Qué pasó? — pregunté al verlo tan sonriente.
— ¿Por qué te importa tanto? — preguntó, pero en su expresión no había nada más que una sonrisa. ¿Debía tomarlo mal?
— Lo..siento — dije haciendo una pausa, aún no sabía si debía disculparme.
— ¿Tienes planes para después de salir? — preguntó recostandose en una pared, ya casi era hora en la que finalizaba mi turno.
— No, solo iré a casa con Matty — dije, Matty era un gato que recientemente había adoptado, pero no tenía ninguna prisa de llegar temprano pues mi mamá estaba con él.
— Oh, ya veo — exclamó, su semblante había cambiado —..vamos a cenar — dijo de repente.
— ¿Hoy? — pregunté y una sonrisa se formó en mi rostro, era como un sueño — ¿Llevarás a Sally de nuevo? — pregunté un poco más emocionada.
— No, sólo tú y yo — aclaró.
— ¿sólo tú y yo? — pregunté de nuevo.
— No pudimos ir a cenar la última vez, te lo debo — dijo acercándose a mí.
— Está bien, vamos — respondí.
Salimos de la fundación, caminamos hacia un pequeño restaurante con una vista espectacular al mismo lago que podía verse desde el parque. Al verlo frente a mí acompañado de ese paisaje tan agradable era como si no pudiese existir nada mejor frente a mí.
— Seguramente si hubiese venido Sally estaría comiendo de mi helado justo como lo hizo en el parque — dijo él con una sonrisa, mientras recordaba.
— Me sorprendió que no quisieras traerla — exclamé mirando hacia el lago.
— Quería hablar contigo — dijo y su mano se posó sobre la mía, rápidamente volteé a mirarlo. —.. Eres muy especial para mí — comenzó, mi corazón palpitaba demasiado rápido, aún no creía que él se sintiese igual que yo —cuidaste a Sally mucho tiempo — agregó, estaba decepcionada porque sabía que todo era en torno a Sally, no por mí.
— Era mi trabajo — dije, era momento de aceptar que él solo estaba ahí conmigo por Sally. Aunque me doliera aceptarlo, aunque me negara y algo dentro de mí quisiera seguir persiguiendo su corazón, era momento de dejarlo. Me rendí.
— ¿Dije algo malo? — preguntó con una expresión de confusión, sus manos comenzaron a urgar en la mochila que traía con él.
— No, no dijiste nada — contesté. Realmente nada.
Sacó unas llaves de la bolsa — Conseguí lo suficiente para mi departamento — dijo poniéndolas sobre la mesa. Mi corazón salto de alegría, era inevitable no sonreír ante esa escena. Había logrado su meta, me llenaba de orgullo.
— Felicidades, estoy muy feliz por tí. Trabajaste mucho por eso — expresé, al verlo tan feliz, quería estar a su lado y ver esa sonrisa para siempre.
— Hoy llevaron mis cosas, mi mamá me ayudó con eso y mañana mismo puedo comenzar a vivir allí — dijo, su felicidad era notoria —.. Y puedo llevarme a Sally conmigo — agregó. Estaba feliz por él, pero eso significaba no vernos más.
— Ella va estar muy feliz — dije tratando de mostrarle mi mejor sonrisa, no podía ser tan egoísta y llenar de mi mala vibra un momento tan importante.
— Y.. — dijo sacando algo más — Sé que ella te extrañará mucho — sacó una pequeña caja —..igual que yo — agregó, no podía creer lo que estaba viendo y escuchando. Parecía un sueño, uno hermoso —.. Me gustas Carter — expresó. Y finalmente sentí mi corazón invadido por una gran calidez, esas tres palabras me hacían tan feliz que ni yo podía creerlo.
—.. Y tú a mí, Seungmin. No hay ni un día que no piense en tí, desde el primer día en que te ví robaste mi corazón — declaré, no podía guardarlo más. Él tenía que conocer mi sentir, debía saber que desde que lo conocí me hacía feliz, debía saber que desde el primer día mi corazón era suyo y de nadie más.
— ¿Te gustaría salir conmigo?, oficialmente..— dijo algo apenado. Era demasiado tierna la manera en la que sonreía y sus ojos se achicaban.
— ¿cómo una pareja? — interrumpí, una sonrisa dibujaba nuestros rostros. Él asintió y acercó a mí la caja en sus manos, era un pequeño anillo con unas orejas de gato.
—.. Lo ví el día que adoptaste a Matty, y lo compré para tí — comentó. Él me acompañó en el momento en el adopté a Matty. Sonreí ante su comentario mirando el pequeño y tierno anillo en mis manos. Al levantar la vista el estaba parado a mi lado, por lo cual me puse de pie imitandolo. — Me haces muy feliz, Carter — dijo mientras su rostro se acercaba al mío, sus manos se posicionaban en mi cuello y sus labios depositaban un corto beso en los míos.
Sabía que debía ser así.
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MY CUTE PUPPY [ KIM SEUNGMIN SKZ]
Fanfiction- Yo cuidaré a Sally por tí - dije poniéndo mi mano sobre la suya, él posó su vista en mí al sentir el tacto. Pero no quite mi mano. Por favor nota mis sentimientos, Seungmin. Historia Corta Kim Seungmin ; Stray Kids