CAP. 1

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Jugaba solo en el arenero del parque cuando de repente se acerca un chico el cual jugó conmigo durante toda la tarde, desde ese día nos volvimos inseparable. Pero toda felicidad acaba tarde o temprano, un día soleado de otóño mientras disfrutaba con lágrimas en los ojos el último abrazo de mi mejor amigo Chifuru puesto que este se tenía que ir a Tailandia por asuntos personales de su madre.

Pasaron los años y yo ya entre a la universidad; un pequeño detalle el cual no mencione es que desde pequeño me encantan el baloncesto, y me dijeron que tenían un club en la universidad en la cual yo estaba.

-Hola, ¿Aquí es para apuntarse al club de baloncesto?
-Si!, Solo rellene este papel y empezarías mañana son todos los días después de clase.
-Esta bien, muchas gracias.

Después de rellenarlo me fui a clases, y los demás leían mientras yo miraba por la ventana distraído, derrepente vi a un hombre muy alto, fuerte y apuesto dirigiéndose hasta el gimnasio mientras botaba una pelota de baloncesto.

-¿Sera mi entrenador?-me preguntaba para mimismo- La verdad es k es muy guapo y tiene un buen cuerpo.

No escuché al maestro el cual me llamaba y chasqueaba para que siguiera la lectura, me disculpé rojo de la vergüenza mientras los demás se reían y cuchicheaban entre ellos, lo ignore y seguí con la lectura.

Al día siguiente después de clases me presente en el gimnasio muy emocionado, pero al entrar me di cuenta de que no había nadie a si que solté la mochila, estire y comencé a tirar varias canastas mientras esperaba a que los demás llegarán.

Unos minutos más tarde me sorprendí cuando vi entrar a un grupo de chicos bastante altos y con buen cuerpo riendo y hablando entre ellos, y no tardaron mucho en fijarse en mi.

- Tu debes ser el de primero, yo soy Eder- se presentó un muchacho de pelo moreno, ojos verdosos y de piel blanca.
-Un gusto yo soy Nagatoro.

Otros dos chicos apartaron a Eder de un empujón haciendo que callera al suelo.

- Yo soy Tanaka y este de aquí es Hiroshi!- un joven de pelo tintado de blanco exponía a otro con un mechón naranja el cual posaba.
- Que os dije de hacer tonterías ante los nuevos- otro hombre de pelo rubio y ojos azules les pego una colleja en la nuca a los dos con una sonrisa de oreja a oreja- Perdón por estos dos son unos idiotas yo soy Sang Bundae y soy el capitan del equipo, ¡bienvenido al equipo!-
-Yo soy Chifuru y seré tu entrenador- me dijo el hombre que vi por la ventana con una acojedora sonrisa.
-Bueno cojan las pelotas para empezar a entrenar.

Después del entrenamiento nos quedamos a limpiar y recoger el gimnasio, aproveche este momento para hablar y observar más a Chifuru ya que me parecía muy extraño que se llamará igual que mi amigo de la infancia, unos minutos después me percate de que tenía una pulsera, una idéntica a la que le di antes de que se fuera a Tailandia.

Lo arremangue para asegurarme de que era la misma y efectivamente era la misma pulsera y creo que el también se dio cuenta de que era yo puesto que me abrazó con lagrimas en los ojos.

Después de varias semanas de entrenamiento no podía parar de pensar en el hermoso, musculoso y simpático Chifuru lo que provocó mi bajada de notas.

Todos los días después de limpiar el gimnasio nos íbamos a el restaurante en el que trabajaba Sang Bundae y nos sentábamos en la mesa a charlas sobre los próximos partidos y a reírnos de las pendejadas de Hiroshi y Tanaka, mientras los demás se reían y charlaban, yo no podía despegar la mirada de Chifuru.

Nuestras miradas se encontraron y pude sentir como mi corazón se aceleraba poco a poco mientras que sus ojos recorrían mi cuerpo y buscaban debajo de la mesa intentando buscar algo más, eso hizo que me pusiera rojo como un tomate.

-Que pasa Nagatoro estas pensando en una chica?- dijo Tanaka con un tono como de "niña"
-Callate pendejo!!- le dije mientras le tiraba un cojín a la cara todo enfadado.
                                                      CAP 2>>>
                                                        

Mi entrenadorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora