ONE-SHOT: NO TE VAYAS (MARIBLANC)

One-shot: "No te vayas"

Hoy damos por iniciado el FANFIC-TON

Narra Marinette:

Había caído la noche en la ciudad de París.

Me encontraba sentada en aquel pequeño banquito en el balcón de mi habitación mientras intentaba realizar un par de bocetos.

La noche no era muy productiva a pesar de tener frente a mi aquella espectacular vista de la torre Eiffel totalmente iluminada a la lejanía y un majestuoso cielo estrellado sobre mi cabeza. Era el escenario ideal para plasmar magníficas creaciones en aquella libreta, pero que solo mantenía bocetos a medio terminar y borrones.

No podía concentrarme.

Todo por lo acontecido aquella misma tarde. Una tarde donde vi a Adrien actuar cabizbajo, preocupado, triste y que por más intentos que hice por acercarme a él para lograr reconformarlo, él no me lo permitió.

Decía que deseaba estar solo, que ni siquiera tenía ganas de asistir esa tarde al colegio, pero que lo hizo porque recordó cuanto suplicó a su padre por tener la oportunidad de ir a la escuela como cualquier chico de su edad, así que no podía permitirse que su padre nuevamente le quitara aquella libertad por negarse a ir un día.

Ni siquiera Nino pudo enterarse el por qué de su estado de ánimo.

Y yo estaba ahí. Intentando distraer mi mente para no ceder a mis impulsos de ir a su encuentro en aquella mansión y tratar de confortarlo. Brindarle mi apoyo incondicional y decirle que podía contarme aquello que le pesaba. Pero sabía que no me lo permitirían.

Que ni siquiera podría pasar de las rejas que rodeaban aquella mansión, mucho menos llegar hasta su habitación sin que Nathalie o su mismo padre me detuvieran.

Aun así, me dolía en extremo saber que Adrien sufría, y yo no sabía el por qué.

Marinette: ¡suficiente! -grité de inmediato- ¡no puedo seguir con esto!

Y después de gritar aquello, arrojé mi cuaderno de diseño a la mesita frente a mí. Hastiada.

Tikki: ¿qué te sucede, Marinette? -preguntó mi pequeña compañera, que hasta el momento me había estado observando mientras merendaba su galleta sobre una de las macetas

Marinette: es que, Tikki.. -respondí mientras me ponía de pie y comenzaba a caminar en círculos, tomándome de la cabeza- ¡no puedo con esto!, no puedo fingir que no me importa lo que sea que esté pasando con Adrien, me duele imaginar que él está ahí, solo, sufriendo en silencio y en la soledad de la mansión

Me detuve en seco, dando un pisotón y apretando mis puños. Giré a verla.

Marinette: quisiera ir con él -proseguí- escucharlo, consolarlo..

Volví a pausar y en esta ocasión me abracé a mi misma, intentando tranquilizar mis propios sentimientos.

Marinette: hacerle sentir que todo está bien..

Ambas nos quedamos en silencio.

Me aferré a más a mi misma. De cierta forma, intentaba transmitirme a mi misma aquello que quería profesar a Adrien si estuviera frente a mí.

Tikki, con toda la calma del mundo, elevó el vuelo y se posó frente a mí, a la altura de mi rostro. Con una cálida sonrisa, llena de ternura, estiró sus bracitos y se afianzó a mi mejilla. Por instinto, levanté las manos y la tomé con ellas, como si fuera un abrazo. Uno que realmente necesitaba en ese momento.

Tikki: tranquila, Marinette.. -expresó con voz suave y apacible- entiendo que tu amor por Adrien y su situación te hagan sentir de esta forma, pero debes tranquilizarte. Él necesita tiempo para pensar en aquello que lo esté lastimando y cuando nuevamente se encuentre mejor, ten por seguro que él vendrá a buscarte